Por Salvador Guerrero Chiprés
Escena cotidiana y de alto riesgo: tres y hasta cuatro personas en una moto, solo una de ellas adulta —quien va al volante—, sin casco y entre vehículos o un carril confinado para sortear el tránsito.
Ante la ausencia de responsabilidad personal al estar frente a cualquier vehículo y no sólo por nuestra seguridad, sino por la de nuestros acompañantes y quienes transitan por donde circulamos, ha sido necesario modificar las reglas de circulación para los motociclistas.
Recién entraron en operación cambios al Reglamento de Tránsito relacionados con la portación de casco diseñado exclusivamente para motociclistas, evitar invadir ciclovías y carriles exclusivos del transporte público, viajar solo el número de personas indicadas en la tarjeta de circulación y la prohibición de que sean menores de 12 años.
El respeto a las leyes y la responsabilidad al conducir son el punto de partida de la seguridad vial y clave para la sana convivencia.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el 49 por ciento de los accidentes de tránsito están involucrados motociclistas, peatones y ciclistas. En México, la mortalidad en estos grupos es del 60 por ciento. Además, el riesgo de muerte en un percance es 17 veces mayor en motoristas con relación a los automovilistas.
Cinco factores aumentan el riesgo de lesiones: exceso de velocidad, conducción tras consumir alcohol, no usar casco, no usar cinturones de seguridad y no emplear medios de sujeción para menores de edad.
En los motociclistas, utilizar correctamente un casco certificado reduce 40 por ciento el riesgo de morir durante un accidente y en 70 por ciento el de una lesión severa.
Este aditamento disminuye la desaceleración del cráneo y el movimiento del cerebro al absorber el impacto, dispersa la fuerza del golpe y previene el contacto directo entre la cabeza y el objeto con el cual choca.
Regularmente, los acompañantes viajan en la moto sin protección o muy inferior a la de los tripulantes. Un estudio del Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras indica que sufren 54 por ciento más lesiones graves por tener menos control sobre la relación cuerpo-vehículo y portar equipo de seguridad menor.
Las modificaciones al Reglamento buscan disminuir los riesgos, preservar la vida, e implican sanciones económicas —de los 518 a los 2 mil 075 pesos— como una forma de obligar a la seguridad de los motociclistas.
Una preocupación y atención desarrollada por Claudia Sheinbaum y continuada por Martí Batres como Jefe de Gobierno de la capital nacional, quien ha dicho: “amigos motociclistas prevengan, no estamos en contra de ninguna forma de movilidad, pero sí queremos seguridad”.
El peligro está directamente relacionado a la responsabilidad y prudencia.
@guerrerochipres
