/ domingo 17 de septiembre de 2023

Los Señores de la Guerra II: Fabricantes de armamento

Marinieves García-Manzano

Recientemente hablamos de la intervención de ejércitos privados en guerras como Afganistán, Yemen e Irak donde participaron ejércitos estadounidenses de mercenarios como Academi y Triple Canopy, y en Ucrania donde participa el grupo ruso Wagner. Pero hay otro negocio de los Señores de la Guerra que representa uno de los conglomerados industriales más poderosos del mundo, del que tampoco se habla mucho: el desarrollo y fabricación de armamento.

Para entrar en el tema, primero tenemos que diferenciar a los fabricantes de pistolas como Remington o Smith & Weson de los desarrolladores de armamento de guerra; pues la industria de defensa está íntimamente relacionada con la industria aeroespacial dedicada al diseño y fabricación de aeronaves, cohetes y sistemas de navegación con fines militares. Aquí es donde entran empresas como Boeing, la empresa más valiosa de esta industria, recientemente valorada en 17,500 millones de dólares; seguida por Airbus en 14,400 y Lockheed Martin en 9,500. Huelga decir que tras el inicio de la guerra en Ucrania el valor de las acciones de las 10 empresas de defensa más grandes del mundo aumentó en promedio 18%.

Boeing Defense, Space & Security está enfocada en el desarrollo y fabricación de aeronaves, satélites y armamento. Emplea alrededor de 17,000 personas en 20 países y en 2022 obtuvo utilidades por 23 mil millones de dólares, de los cuales el 26% provino de clientes militares fuera de EEUU. Su base está en Virginia, cerca del Pentágono, sede del departamento de defensa estadounidense.

Airbus Defence & Space es alemana, tiene 40,000 empleados, y sus ingresos en 2022 ascendieron a más de 11 mil millones de euros. En su página web ofrece soluciones colaborativas e interoperables para garantizar la superioridad de los sistemas de combate en los cinco dominios operacionales de la guerra: tierra, aire, mar, espacio e informática; sí, leyó bien, espacio e informática.

Lockheed Martin también está en Virginia y ha desarrollado algunos de los aviones caza más famosos del mundo, como los F-22 contra los que vimos luchar a Tony Stark en Iron Man. Durante el segundo trimestre de 2023 logró un beneficio neto de 1,681 millones de dólares, 5 veces más que en el mismo periodo de 2022, y en lo que va del año aumentó un 8% sus ventas impulsadas principalmente por el F-35, un “avión de combate polivalente de quinta generación”.

Pero no podrían ganar estas fortunas si no tuvieran como clientes a burócratas y políticos que gastan en una carrera insaciable el dinero de los impuestos de sus ciudadanos. El gasto militar mundial subió un 3.7% en 2022, equivalente al 2.2% del PIB global. El presupuesto de los 10 países más consumidores de la industria de la defensa ascendió en 2022 a 1.7 millones de millones de dólares; encabezados por EEUU que gastó 887 mil millones, 3 veces más que China y 10 veces más que Rusia.

Ejércitos privados, fabricantes de armamento, burócratas y políticos, ellos son “Los Señores de la Guerra”.

Twitter: MarinievesGM @gm_marinieves

Marinieves García-Manzano

Recientemente hablamos de la intervención de ejércitos privados en guerras como Afganistán, Yemen e Irak donde participaron ejércitos estadounidenses de mercenarios como Academi y Triple Canopy, y en Ucrania donde participa el grupo ruso Wagner. Pero hay otro negocio de los Señores de la Guerra que representa uno de los conglomerados industriales más poderosos del mundo, del que tampoco se habla mucho: el desarrollo y fabricación de armamento.

Para entrar en el tema, primero tenemos que diferenciar a los fabricantes de pistolas como Remington o Smith & Weson de los desarrolladores de armamento de guerra; pues la industria de defensa está íntimamente relacionada con la industria aeroespacial dedicada al diseño y fabricación de aeronaves, cohetes y sistemas de navegación con fines militares. Aquí es donde entran empresas como Boeing, la empresa más valiosa de esta industria, recientemente valorada en 17,500 millones de dólares; seguida por Airbus en 14,400 y Lockheed Martin en 9,500. Huelga decir que tras el inicio de la guerra en Ucrania el valor de las acciones de las 10 empresas de defensa más grandes del mundo aumentó en promedio 18%.

Boeing Defense, Space & Security está enfocada en el desarrollo y fabricación de aeronaves, satélites y armamento. Emplea alrededor de 17,000 personas en 20 países y en 2022 obtuvo utilidades por 23 mil millones de dólares, de los cuales el 26% provino de clientes militares fuera de EEUU. Su base está en Virginia, cerca del Pentágono, sede del departamento de defensa estadounidense.

Airbus Defence & Space es alemana, tiene 40,000 empleados, y sus ingresos en 2022 ascendieron a más de 11 mil millones de euros. En su página web ofrece soluciones colaborativas e interoperables para garantizar la superioridad de los sistemas de combate en los cinco dominios operacionales de la guerra: tierra, aire, mar, espacio e informática; sí, leyó bien, espacio e informática.

Lockheed Martin también está en Virginia y ha desarrollado algunos de los aviones caza más famosos del mundo, como los F-22 contra los que vimos luchar a Tony Stark en Iron Man. Durante el segundo trimestre de 2023 logró un beneficio neto de 1,681 millones de dólares, 5 veces más que en el mismo periodo de 2022, y en lo que va del año aumentó un 8% sus ventas impulsadas principalmente por el F-35, un “avión de combate polivalente de quinta generación”.

Pero no podrían ganar estas fortunas si no tuvieran como clientes a burócratas y políticos que gastan en una carrera insaciable el dinero de los impuestos de sus ciudadanos. El gasto militar mundial subió un 3.7% en 2022, equivalente al 2.2% del PIB global. El presupuesto de los 10 países más consumidores de la industria de la defensa ascendió en 2022 a 1.7 millones de millones de dólares; encabezados por EEUU que gastó 887 mil millones, 3 veces más que China y 10 veces más que Rusia.

Ejércitos privados, fabricantes de armamento, burócratas y políticos, ellos son “Los Señores de la Guerra”.

Twitter: MarinievesGM @gm_marinieves