/ jueves 23 de mayo de 2024

TENDENCIAS ECONÓMICAS Y FINANCIERAS | Contingencia ambiental

Cada año mueren en Ciudad de México 18,000 personas por la contaminación atmosférica. Ciudades como Londres o Los Ángeles han logrado de forma significativa limpiar el aire que respiran, así como varias ciudades chinas que hace unos años, eran consideradas las más contaminadas del mundo, lo que demuestra que si hay voluntad política se puede lograr.


Hace 30 años, el entonces Distrito Federal fue pionero en la implementación del Hoy No Circula, medida que se tomó por los muy elevados niveles de polución que presentaba la capital del país. Además de este polémico programa, se tomaron otras acciones como cerrar la refinería que operaba en Azcapotzalco, así como cerrar diversas fábricas que contaminaban de forma muy importante en la zona norte de la ciudad.


En el momento actual y después de 9 contingencias ambientales en lo que va del 2024, así como advertencias científicas sobre el aumento de la temperatura en el Valle de México, sin que haya suficientes vientos ni lluvias que dispersen la contaminación, es altamente probable que se registren más contingencias ambientales en las próximas semanas, por lo que debemos pensar en medidas de política pública para reducir la contaminación.


Debemos señalar que la termoeléctrica de Tula, es la principal fuente de contaminación ambiental fija. Esta planta de CFE genera electricidad para el Valle de México, usa combustóleo como comburente, alto en azufre, que es un desecho del proceso de depuración del petróleo y que se produce en la refinería que también se encuentra en Tula, Hidalgo. Las nubes de azufre y otros contaminantes derivados de la quema de combustóleo, viajan por los vientos en dirección a la Ciudad de México y se estancan encima de la misma, por las montañas que rodean a la urbe. Cuando no hay vientos y se presentan elevadas temperaturas, los contaminantes se quedan y no permiten que otros contaminantes salgan del Valle lo que eleva los niveles de partículas dañinas que respiramos.


La termoeléctrica de Tula puede usar gas natural, sin azufre, lo que reduciría emisión de contaminantes de forma muy importante o mejor aún, podría usar hidrógeno que como desecho produce vapor de agua. El único problema es que Pemex se quedaría sin su principal cliente para el combustóleo que nadie quiere.


También debe considerarse un programa gradual para cambiar todo el transporte público y camiones del gobierno que hoy usan motores de combustión a motores eléctricos y un programa para eliminar los taxis y ubers de gasolina y pasarlos a autos eléctricos, como se hacía en 1990 con los taxis ecológicos de ese momento de 4 cilindros.


Limpiar el aire de Ciudad de México, no será fácil, ni serán decisiones populares, al contrario serán decisiones difíciles pero muy necesarias y prioritarias para el próximo gobierno, sin importar quien gane.


Carlos López Jones

Director de Consultoría en Tendencias.com.mx

Twitter: @Carloslopezjone


Cada año mueren en Ciudad de México 18,000 personas por la contaminación atmosférica. Ciudades como Londres o Los Ángeles han logrado de forma significativa limpiar el aire que respiran, así como varias ciudades chinas que hace unos años, eran consideradas las más contaminadas del mundo, lo que demuestra que si hay voluntad política se puede lograr.


Hace 30 años, el entonces Distrito Federal fue pionero en la implementación del Hoy No Circula, medida que se tomó por los muy elevados niveles de polución que presentaba la capital del país. Además de este polémico programa, se tomaron otras acciones como cerrar la refinería que operaba en Azcapotzalco, así como cerrar diversas fábricas que contaminaban de forma muy importante en la zona norte de la ciudad.


En el momento actual y después de 9 contingencias ambientales en lo que va del 2024, así como advertencias científicas sobre el aumento de la temperatura en el Valle de México, sin que haya suficientes vientos ni lluvias que dispersen la contaminación, es altamente probable que se registren más contingencias ambientales en las próximas semanas, por lo que debemos pensar en medidas de política pública para reducir la contaminación.


Debemos señalar que la termoeléctrica de Tula, es la principal fuente de contaminación ambiental fija. Esta planta de CFE genera electricidad para el Valle de México, usa combustóleo como comburente, alto en azufre, que es un desecho del proceso de depuración del petróleo y que se produce en la refinería que también se encuentra en Tula, Hidalgo. Las nubes de azufre y otros contaminantes derivados de la quema de combustóleo, viajan por los vientos en dirección a la Ciudad de México y se estancan encima de la misma, por las montañas que rodean a la urbe. Cuando no hay vientos y se presentan elevadas temperaturas, los contaminantes se quedan y no permiten que otros contaminantes salgan del Valle lo que eleva los niveles de partículas dañinas que respiramos.


La termoeléctrica de Tula puede usar gas natural, sin azufre, lo que reduciría emisión de contaminantes de forma muy importante o mejor aún, podría usar hidrógeno que como desecho produce vapor de agua. El único problema es que Pemex se quedaría sin su principal cliente para el combustóleo que nadie quiere.


También debe considerarse un programa gradual para cambiar todo el transporte público y camiones del gobierno que hoy usan motores de combustión a motores eléctricos y un programa para eliminar los taxis y ubers de gasolina y pasarlos a autos eléctricos, como se hacía en 1990 con los taxis ecológicos de ese momento de 4 cilindros.


Limpiar el aire de Ciudad de México, no será fácil, ni serán decisiones populares, al contrario serán decisiones difíciles pero muy necesarias y prioritarias para el próximo gobierno, sin importar quien gane.


Carlos López Jones

Director de Consultoría en Tendencias.com.mx

Twitter: @Carloslopezjone