Vaya que esta pandemia nos ha dejado muchos cambios en la llamada nueva normalidad, y eso incluye a las campañas políticas para estas próximas elecciones.
Y más allá de que la gran mayoría de los candidatos, siguen irresponsablemente convocando mítines o eventos donde se hace imposible la sana distancia, las redes sociales se han convertido en la herramienta con la cual intentan convencer al electorado.
Sin embargo, las apariencias engañan, y para muestra varios botones.
En todas las redes sociales existen los llamados bots, que son cuentas que aparentan ser de alguna persona, pero que en realidad son fantasmas y no representan a nadie de carne y hueso.
Estos bots han existido desde que iniciaron las redes, y son parte del negocio que ofrecen diversas empresas o hackers, para elaborar estrategias de marketing y hacer creer que determinado producto tiene una gran cantidad de reacciones y seguidores.
En este caso, el producto es el personaje político, que aparenta tener un muy alto número de seguidores, pero que en realidad la mayoría de las veces está muy inflado por estos llamados bots.
Ahí encontramos ejemplos muy interesantes de candidatos, qué si en verdad movieran ese número real de seguidores, serían ya Presidentes de la República. Tal fue el caso de Gibran Ramírez, que intentó llegar a la Presidencia de Morena apoyada por Estefanía Veloz -una famosa tuit star-, pero no ganaron ni un premio de consolación.
O actualmente Fernando Belauzarán y Triana por el PAN, o Atollini y Renata Turrent por Morena, quienes en redes sociales tienen “miles de seguidores” pero difícilmente ganarían la elección por la que están compitiendo.
O más allá, precandidatos que aparentemente arrasarían, y ni siquiera les tocó competir, como el Director del medio oficial “El Soberano”, o el reportero conocido como “el pirata” quien era asiduo protagonista en las mañaneras.
A toda regla hay una excepción y ahí están Samuel García del MC, o Fernández Noroña del PT, que igual arrastran en redes sociales que en el voto popular.
@floresaquino
