/ martes 2 de agosto de 2022

SIN PROTOCOLO | Farsa democrática

El Presidente Andrés Manuel López Obrador adoptó el papel de vocero de Morena, al felicitar a los participantes en la elección interna de su partido.

La calificó como “buena jornada democrática”, a donde acudieron alrededor de 2 millones 500 mil personas para elegir delegados al Congreso de Morena.

Pero aquí viene la trampa, admitida por el propio Presidente, que quienes no eran militantes, al “mismo tiempo se estaban afiliando a Morena”.

López Obrador y su partido incurrieron en el mayor de los engaños, porque afiliaron a acarreados sin su consentimiento.

Fue sin duda una falsa afiliación que presume el partido en el poder como democracia. Es decir que de facto, alcanzaron una afiliación de 2 millones 500 mil militantes.

¿Cuánto les costó eso? El mandatario reconoció que hubo inconformidad, “violaciones, acarreos, inducción del voto”.

Es demasiado clara la declaración del Presidente, en cuanto a las “violaciones” en el proceso interno. Para él es algo normal; en eso consiste la “democracia”.

Para quien despacha en Palacio Nacional pasaron desapercibidas las triquiñuelas de compra de voto, entrega de dádivas y despensas.

Las múltiples denuncias de morenos contra morenos por recurrir a vicios del pasado, tampoco le importaron.

“Y no hay aparato”, se atrevió a presumir. “Es el pueblo, es la gente”. Pero no aclaró que a ese pueblo le compraron el voto. De esas evidencias están saturadas las redes.

Además, sus operadores estrella buscaron apoyo en otros partidos políticos, como lo denunciaron sus propios dirigentes como el de Morena en la Ciudad de México, Tomás Pliego.

Por esas y otras razones el líder de los senadores de Morena, Ricardo Monreal rechazó participar en el proceso interno.

De hecho el zacatecano fue más allá a calificar el proceso como de “mala calidad”, debido a que la elección interna ya estaba “prefigurada”.

Durante su conferencia matutina, el Presidente pareció actuar como líder opositor a su propio gobierno, con las siguientes expresiones:

Si no hay ideales, si no hay principios, no dura ningún partido, porque todo es pragmatismo, todo es la lucha del poder por el poder.

“Sin ideales, sin principios, es el quítate tú porque quiero yo, es triunfar a toda costa sin escrúpulos morales de ninguna índole.

“Es comprar votos, amenazar, condicionar apoyos, falsificar actas, rellenar urnas, porque no hay ideales, no hay principios.

Una gente verdaderamente honesta no va a hacer eso, y para eso se requieren los principios, los ideales, tener una filosofía, tener una doctrina”.

Con lo anterior López Obrador dio la impresión de habérsele olvidado que los causantes de los desmanes y compra de votos fueron los militantes y dirigentes a los que felicitó.

Esa fue la farsa de una elección supuestamente democrática bañada de todos los vicios que siempre cuestionaron.

PROSPECCIÓN… El senador Juan Manuel Fócil Pérez, sostuvo que no han cambiado las prácticas políticas que el Presidente tanto criticó de los gobiernos del PRI y PAN. En México, dijo, se tiene un gobierno rico con un pueblo pobre, pues intención de López Obrador de aplicar una pobreza Franciscana tiene como fin obtener más recursos para el Tren Maya y la Refinería Olmeca. “Era bonito escuchar al Presidente en sus campañas hablar de los excesos de los gobiernos del pasado, pero ahora estamos igual, usan camionetas blindadas, con guaruras; él mismo ya dejó de usar el Jetta, ahora solo usa camionetas blindadas”, afirmó.

Twitter: @JoelSaucedo

saucedosj@yahoo.com.mx

El Presidente Andrés Manuel López Obrador adoptó el papel de vocero de Morena, al felicitar a los participantes en la elección interna de su partido.

La calificó como “buena jornada democrática”, a donde acudieron alrededor de 2 millones 500 mil personas para elegir delegados al Congreso de Morena.

Pero aquí viene la trampa, admitida por el propio Presidente, que quienes no eran militantes, al “mismo tiempo se estaban afiliando a Morena”.

López Obrador y su partido incurrieron en el mayor de los engaños, porque afiliaron a acarreados sin su consentimiento.

Fue sin duda una falsa afiliación que presume el partido en el poder como democracia. Es decir que de facto, alcanzaron una afiliación de 2 millones 500 mil militantes.

¿Cuánto les costó eso? El mandatario reconoció que hubo inconformidad, “violaciones, acarreos, inducción del voto”.

Es demasiado clara la declaración del Presidente, en cuanto a las “violaciones” en el proceso interno. Para él es algo normal; en eso consiste la “democracia”.

Para quien despacha en Palacio Nacional pasaron desapercibidas las triquiñuelas de compra de voto, entrega de dádivas y despensas.

Las múltiples denuncias de morenos contra morenos por recurrir a vicios del pasado, tampoco le importaron.

“Y no hay aparato”, se atrevió a presumir. “Es el pueblo, es la gente”. Pero no aclaró que a ese pueblo le compraron el voto. De esas evidencias están saturadas las redes.

Además, sus operadores estrella buscaron apoyo en otros partidos políticos, como lo denunciaron sus propios dirigentes como el de Morena en la Ciudad de México, Tomás Pliego.

Por esas y otras razones el líder de los senadores de Morena, Ricardo Monreal rechazó participar en el proceso interno.

De hecho el zacatecano fue más allá a calificar el proceso como de “mala calidad”, debido a que la elección interna ya estaba “prefigurada”.

Durante su conferencia matutina, el Presidente pareció actuar como líder opositor a su propio gobierno, con las siguientes expresiones:

Si no hay ideales, si no hay principios, no dura ningún partido, porque todo es pragmatismo, todo es la lucha del poder por el poder.

“Sin ideales, sin principios, es el quítate tú porque quiero yo, es triunfar a toda costa sin escrúpulos morales de ninguna índole.

“Es comprar votos, amenazar, condicionar apoyos, falsificar actas, rellenar urnas, porque no hay ideales, no hay principios.

Una gente verdaderamente honesta no va a hacer eso, y para eso se requieren los principios, los ideales, tener una filosofía, tener una doctrina”.

Con lo anterior López Obrador dio la impresión de habérsele olvidado que los causantes de los desmanes y compra de votos fueron los militantes y dirigentes a los que felicitó.

Esa fue la farsa de una elección supuestamente democrática bañada de todos los vicios que siempre cuestionaron.

PROSPECCIÓN… El senador Juan Manuel Fócil Pérez, sostuvo que no han cambiado las prácticas políticas que el Presidente tanto criticó de los gobiernos del PRI y PAN. En México, dijo, se tiene un gobierno rico con un pueblo pobre, pues intención de López Obrador de aplicar una pobreza Franciscana tiene como fin obtener más recursos para el Tren Maya y la Refinería Olmeca. “Era bonito escuchar al Presidente en sus campañas hablar de los excesos de los gobiernos del pasado, pero ahora estamos igual, usan camionetas blindadas, con guaruras; él mismo ya dejó de usar el Jetta, ahora solo usa camionetas blindadas”, afirmó.

Twitter: @JoelSaucedo

saucedosj@yahoo.com.mx