/ viernes 12 de abril de 2024

SIN PROTOCOLO | El enojo de López

En algo coinciden plenamente Andrés Manuel López Obrador y su candidata Claudia Sheinbaum.

Son iracundos y les gana la ira con facilidad; su explosivo carácter es conocido por todos al interior del gobierno y Morena.

Esa forma de ser de ambos, salió a la luz pública estos días por el enojo del mandatario tras el debate donde Sheimbaum no defendió su legado.

López Obrador eligió a Claudia como candidata, pero por lo visto estos días, tal parece que se arrepintió. Pero no hay marcha atrás.

Durante su conferencia del martes, el Presidente se quejó porque la candidata de Morena no lo defendió ante Xóchitl Gálvez.

Sheinbaum siempre ha sido la más obediente del gabinete. Lo fue desde que López Obrador se desempeñó como jefe de gobierno, y ella titular de Medio Ambiente.

Desde esa época data el carácter irascible del tabasqueño. Por ejemplo, montó en cólera cuando el secretario de Obras, César Buenrostro se negó a construir el segundo piso del Periférico.

Claudia, siempre obediente lo hizo, pese a no ser ingeniera. En el debate con Xóchitl siguió el guión, pero no defendió al Presidente con la fiereza exigida por López.

Una legión de aplaudidores salió a dar ganadora a Claudia tras el debate, pero no lo observó así su “padre” político, como difundió el diario La Jornada.

Diversos analistas dieron cuenta de lo que ha trascendido de Palacio Nacional: el descontento de López Obrador por el desempeño de su candidata.

Han sido repetidas las ocasiones en que el Presidente ha explotado en contra de sus colaboradores por que no dan la cara por él.

La cuestión es que así lo quiso el mandatario, al concentrar el poder de la palabra de su gobierno en una conferencia cada 24 horas.

En los hechos, López Obrador ha maniatado a sus colaboradores. Les ha puesto una mordaza; cuando dicen algo que no es de su grado, los manotazos en la mesa no son nada suaves.

Claudia tiene un estilo similar. Como candidata presidencial cobró facturas a quienes frenaron las aspiraciones de Omar García Harfuch para la jefatura de gobierno.

Sheinbaum castigó a adversarios internos, y premió a incondicionales sin importar sus negros antecedentes.

Todo eso llevó a que crecieran las diferencias entre los equipos de Clara Brugada y la aspirante presidencial.

El caso es que Claudia cayó de la gracia del Presidente.

PROSPECCIÓN… La Comisión Iberoamericana de Derechos Humanos para el Desarrollo de las Américas (CIDHPDA), a través de su Consejo Iberoamericano, que preside la Caritina Islas Maldonado, se une a la resolución de la Organización de Estados Americanos(OEA) y condena la irrupción del Gobierno de Ecuador a la Embajada de México. A través de un proyecto de resolución presentado por la delegación de Colombia, condenó enérgicamente el violento asalto de policías de Ecuador a la embajada mexicana, al ser considerada una acción “en contra de la integridad y la dignidad del personal diplomático de la misión”. Dicha resolución reafirma la obligación de todos los Estados a “garantiza el respeto de los privilegios e inmunidades de las misiones diplomáticas y el principio de inviolabilidad de conformidad con el Derecho Internacional”.

X: @JoelSaucedo

saucedosj@yahoo.com.mx

En algo coinciden plenamente Andrés Manuel López Obrador y su candidata Claudia Sheinbaum.

Son iracundos y les gana la ira con facilidad; su explosivo carácter es conocido por todos al interior del gobierno y Morena.

Esa forma de ser de ambos, salió a la luz pública estos días por el enojo del mandatario tras el debate donde Sheimbaum no defendió su legado.

López Obrador eligió a Claudia como candidata, pero por lo visto estos días, tal parece que se arrepintió. Pero no hay marcha atrás.

Durante su conferencia del martes, el Presidente se quejó porque la candidata de Morena no lo defendió ante Xóchitl Gálvez.

Sheinbaum siempre ha sido la más obediente del gabinete. Lo fue desde que López Obrador se desempeñó como jefe de gobierno, y ella titular de Medio Ambiente.

Desde esa época data el carácter irascible del tabasqueño. Por ejemplo, montó en cólera cuando el secretario de Obras, César Buenrostro se negó a construir el segundo piso del Periférico.

Claudia, siempre obediente lo hizo, pese a no ser ingeniera. En el debate con Xóchitl siguió el guión, pero no defendió al Presidente con la fiereza exigida por López.

Una legión de aplaudidores salió a dar ganadora a Claudia tras el debate, pero no lo observó así su “padre” político, como difundió el diario La Jornada.

Diversos analistas dieron cuenta de lo que ha trascendido de Palacio Nacional: el descontento de López Obrador por el desempeño de su candidata.

Han sido repetidas las ocasiones en que el Presidente ha explotado en contra de sus colaboradores por que no dan la cara por él.

La cuestión es que así lo quiso el mandatario, al concentrar el poder de la palabra de su gobierno en una conferencia cada 24 horas.

En los hechos, López Obrador ha maniatado a sus colaboradores. Les ha puesto una mordaza; cuando dicen algo que no es de su grado, los manotazos en la mesa no son nada suaves.

Claudia tiene un estilo similar. Como candidata presidencial cobró facturas a quienes frenaron las aspiraciones de Omar García Harfuch para la jefatura de gobierno.

Sheinbaum castigó a adversarios internos, y premió a incondicionales sin importar sus negros antecedentes.

Todo eso llevó a que crecieran las diferencias entre los equipos de Clara Brugada y la aspirante presidencial.

El caso es que Claudia cayó de la gracia del Presidente.

PROSPECCIÓN… La Comisión Iberoamericana de Derechos Humanos para el Desarrollo de las Américas (CIDHPDA), a través de su Consejo Iberoamericano, que preside la Caritina Islas Maldonado, se une a la resolución de la Organización de Estados Americanos(OEA) y condena la irrupción del Gobierno de Ecuador a la Embajada de México. A través de un proyecto de resolución presentado por la delegación de Colombia, condenó enérgicamente el violento asalto de policías de Ecuador a la embajada mexicana, al ser considerada una acción “en contra de la integridad y la dignidad del personal diplomático de la misión”. Dicha resolución reafirma la obligación de todos los Estados a “garantiza el respeto de los privilegios e inmunidades de las misiones diplomáticas y el principio de inviolabilidad de conformidad con el Derecho Internacional”.

X: @JoelSaucedo

saucedosj@yahoo.com.mx