Vaya pifia parlamentaria. Resulta que al diputado de Morena, Eleazar Rubio, se le ocurrió presentar una iniciativa para incluir en la ley la “gratuidad” del uso de instalaciones deportivas, sustentado en el derecho a la ciudad y acceso al deporte. El colmo fue que la tuvo que desechar porque el cobro sirve para pagar a sus trabajadores y profesores. A esa grave omisión se le olvidó que el Legislativo local, ya no es Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) sino Congreso de la Ciudad de México. Es en serio. No es broma.
Tras dejar la dirigencia capitalina de Morena, Martí Batres se fue a la campaña por la senaduría de la Ciudad y después a su labor como Presidente del Senado. Nunca designó, ni propuso a nadie para quedarse en su lugar. Año y medio después fue designada Flor Ivonne Morales, como encargada de la dirigencia, y ahora está Héctor Ulises García. Lo interesante es que ambos nombramientos se hicieron a propuesta de la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
La guerra del gas no cede en Baja California. Resulta que la Juez de Control en Tijuana, Patricia Hernández, emitió una orden judicial para que la fiscalía estatal liberara 10 inmuebles de la gasera Blue Propane, que estaban asegurados desde tiempos del gobernador Francisco “Kiko” Vega. No obstante, el MP encargado de ejecutar la sentencia, Arturo Gutiérrez, se dirigió a los inmuebles para volver a clausurarlos. La empresa espera una respuesta del Fiscal Guillermo Ruiz por lo que considera un desacato y, probablemente, un sabotaje del poderoso grupo gasero Tomza, de Tomás Zaragoza.
Las pláticas de Ricardo Monreal con el presidente son un asunto de cada 15 días y ayer conversaron sobre la agenda legislativa del Senado y al presidente lo que le interesa es desahogar el tema de discriminación racial, el desafuero presidencial y las reformas al sistema de pensiones. Por cierto, hasta hoy no hay una propuesta sobre la ley de consulta indígena. Dice Monreal que vio a un Presidente sensible, informado y firme en sus decisiones ¿En serio?
PD: El 29 de agosto se define el futuro del PRD, se formaliza su dirigencia - ya no será colegiada- hará su congreso y ya instalaron 18 comités estatales. La fuerza más grande es Nueva Izquierda, que lleva todas la de ganar, y detrás de ellos está ADN.
