La mayor parte de los millones de envases y empaques empleados por la industria de alimentos y bebidas están diseñados para ser de un solo uso.
A pesar de esto, el sector empresarial utiliza narrativas que centran la responsabilidad de la contaminación plástica en sus consumidores, y en cambio, promueven falsas soluciones como el reciclaje, pues se estima que en el mundo, tan solo el 9 % de todos los plásticos producidos logran ser reciclados, informó El Poder del Consumidor.
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A nivel global, los mayores contaminantes de plásticos incluyen a compañías como The Coca-Cola Company, PepsiCo, Nestlé, Mondelēz International, Unilever, Mars, y Danone, entre otros.
En la presentación del estudio de caso titulado “Empaquetado y Procesamiento: Ahogándonos en plásticos”, se evidenciaron las prácticas de diferentes corporaciones y asociaciones empresariales para la captura de las regulaciones en materia de producción y manejo de residuos plásticos en México.
Los ponentes dijeron que Asociaciones empresariales como ECOCE, realizan un fuerte énfasis en el acopio de residuos y su reciclaje como solución.
Industrias
La asociación está conformada por industrias como Coca-Cola, Nestlé, MARS, Bonafont, Danone, Grupo Bimbo, Ciel, Sabritas, PepsiCo y otros gigantes de la industria de ultraprocesados.
También se nombraron a actores como el Consejo Coordinador Empresarial, quienes a través de Think Tanks como CESPEDES (integrado de nuevo por Coca-Cola, FEMSA, PepsiCo, BASF, Arca Continental, Walmart, Grupo México, Bayer y la ANIQ) han impulsado iniciativas de autorregulación como el “Acuerdo Nacional para la Nueva Economía del Plástico”, mismo que ha sido rechazado públicamente por su laxitud y metas de bajo impacto por organizaciones internacionales de Economía Circular como la Fundación Ellen McArthur.
El estudio forma parte de la segunda entrega del proyecto “Bajo la Mira: La captura corporativa sobre los sistemas alimentarios en México”, el cual subraya que las grandes compañías como Coca-Cola, FEMSA,y Oxxo, y ECOCE, impulsan reformas ineficaces para reducir plásticos y promover la Economía Circular.
Los resultados identifican que en el entorno político, estas compañías han ejercido influencia para impulsar reformas tendenciosas en la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR), y el Proyecto de decreto por el que se expide la Ley General de Economía Circular (LGEC).
Estrategias
Entre las estrategias empleadas, se encuentran el impulso a definiciones laxas de plásticos de un solo uso, dejando fuera a muchos de los empaques que estas mismas compañías producen, además de diluir términos como “Responsabilidad Extendida de los Productores” con el fin de evadir su responsabilidad en la crisis de plásticos.
También han ejercido un intenso cabildeo en ambas cámaras y ocupado la mayoría de los asientos en las sesiones de Audiencias Públicas para discutir las minutas.
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Además, otras agrupaciones que se han presentado para cabildear a favor de estas propuestas inadecuadas que favorecen a su modelo de negocio, y a la continuación excesiva de plásticos sin asumir responsabilidad sobre los residuos que se generan, son Fundación Coca-Cola y la Asociación Mexicana de Bebidas (MexBeb). El estudio acusa que más del 60% de los integrantes de MexBeb (como ASCOCA, Arca Continental, Bepensa, Embotelladora de Colima, FEMSA, Grupo Embotellador Nayar y Bebidas Refrescantes de Nogales), pertenecen y responden a los intereses de la misma compañía: Coca-Cola. Para la investigadora Ana Larrañaga, “este es un ejemplo claro del acaparamiento que la refresquera más grande del mundo ejerce en espacios de toma de decisión, disfrazándose de diferentes fachadas”.
Campañas
Por otro lado, el estudio resalta que para moldear la formación de preferencias de las audiencias, estas compañías se encargan de hacer visibles todo tipo de campañas de lavado verde, limpiezas de playas, charlas sobre la importancia del reciclaje e incluso cursos dirigidos a niños y niñas en edad escolar.
Esto les permite posicionarse como “líderes en sustentabilidad”, pese a ser los principales productores de estos residuos contaminantes que pueden tardar siglos en degradarse, y se descomponen en microplásticos que ingerimos y respiramos, impactando en nuestra salud, y la del planeta.
El reporte pone en evidencia la doble cara de industrias como Coca-Cola, FEMSA, Propimex y Oxxo, pues mientras que promueven sus acciones de maquillaje “eco-amigables” a través de campañas de responsabilidad social empresarial, estas también han invertido en equipos legales para atacar e interponer amparos en los estados que han intentado eliminar el uso de plásticos de un solo uso y unicel, como fue el caso de la Ley Antidesechables de Oaxaca.
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