La organización de la sociedad civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) denunció que desde abril de 2022, un peritaje del Instituto para la Seguridad de las Construcciones alertó de un “fuerte” asentamiento diferencial que ocasionó la deformación de vigas de apoyo en la terminal de la Línea 9 del Metro.
Todo ello, de acuerdo con documentos obtenidos por la agrupación. Sin embargo, resaltó, las autoridades capitalinas dejaron pasar 1 año y 4 meses de la alerta y hasta ahora prevén cerrar ese tramo elevado.
Este miércoles 23 de agosto el director del Metro, Guillermo Calderón, anunció el cierre de la parte elevada en el tramo de la Línea 9 que presenta hundimientos, entre las estaciones de Velódromo y Pantitlán.
El director del Sistema de Transporte Colectivo informó que se realizarán cambios y modificaciones para garantizar un mejor servicio en el Metro. Incluso confirmó que la Línea 9 se está hundiendo por cerca de unos 80 centímetros.
En el reporte realizado por MCCI se alertaba del “alto riesgo” que representaba el viaducto elevado y era necesario tomar acciones urgentes.
La investigación realizada por Mauricio Rubí revela las recomendaciones del Instituto para la Seguridad de las Construcciones en la CDMX a la Secretaría de Obras capitalina que alertaba sobre los peligros del tramo elevado en Metro Pantitlán.
Recordó que cerca de la medianoche del 3 de mayo de 2021, una hora después de que ocurriera el fatal derrumbe de un tramo de la Línea 12 del Metro, un usuario en Twitter compartió fotografías del viaducto elevado en la terminal Pantitlán en las que se aprecian desniveles y fisuras.
“Que no se nos olviden las condiciones en las que también se encuentra el metro Pantitlán. Una bomba de tiempo más”, escribió el usuario desde su cuenta @adrianbandeck.
Al paso de los días, se multiplicaron los reportes de ciudadanos que alertaban del grave deterioro en la estación Pantitlán, ubicada al oriente de la Ciudad de México, que es la más concurrida del sistema de transporte colectivo, con un promedio de más de 150 mil usuarios por día en las líneas que confluyen en ese punto.
Pero subraya el investigador que fue hasta casi un año después, en abril de 2022, que las autoridades ordenaron una inspección estructural en uno de los tramos reportados por los usuarios del Metro, y el peritaje confirmó el “alto riesgo” que representaba el viaducto elevado de esa estación, de acuerdo con documentos obtenidos por (MCCI).
Ni las denuncias ciudadanas, añadió, ni el peritaje oficial llevaron a una reacción inmediata de las autoridades capitalinas. Fue hasta febrero de 2023 --diez meses después de la alerta oficial-- que se colocaron estructuras metálicas de refuerzo en un tramo elevado que muestra un evidente desnivel.
Tanto la entonces jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, como el secretario de Obras, Jesús Esteva, señalaron que el reforzamiento fue para atender los hundimientos que se han dado en la zona.
Empero, el diagnóstico obtenido por MCCI advierte que la intervención para reducir el riesgo no debe ser sólo el apuntalamiento, ya que se requieren obras de recimentación y renivelación, porque que “se encuentra comprometida la estabilidad de la estructura por el paso continuo y por las cargas dinámicas que generan los trenes”.
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El Instituto para la Seguridad de las Construcciones en la Ciudad de México entregó en abril de 2022 a la Secretaría de Obras capitalina una serie de recomendaciones para reducir el riesgo en el tramo elevado de la terminal Pantitlán de la Línea 9 del Metro.
Donde mencionó que una parte del tramo elevado ha presentado “un fuerte asentamiento diferencial que ha ocasionado la deformación de las vigas de apoyo de la ‘pasarella’ de los trenes a la llegada de la terminal de la estación terminal Pantitlán de la Línea 9 del Metro”.
El Instituto también recomendó realizar un estudio de mecánica de suelo en los apoyos de las columnas inspeccionadas en Pantitlán y así definir las causas que dieron origen al “fuerte” asentamiento diferencial que se registró en esa zona de la Línea 9, en su tramo elevado.
El Instituto –un organismo descentralizado del Gobierno de la CDMX– solicitó además que, una vez elaborado un proyecto de recimentación y renivelación, se interviniera la estructura para recuperar la horizontalidad de las vigas, algunas de ellas encargadas de soportar las cargas de la denominada Pasarella de los trenes y de la estructura de soporte en el tramo elevado de Pantitlán.
“Las placas y tornillos de los topes sísmicos presentan corrosión por falta de mantenimiento y protección contra la intemperie”, se lee en el documento obtenido por MCCI.
Entre los antecedentes expuestos en el peritaje se recuerda que la Línea 9 del Metro en su tramo de Pantitlán a Centro Médico fue inaugurado el 26 de agosto de 1987, por lo que el tramo –ahora apuntalado– tenía una antigüedad de casi 35 años, durante los cuales había operado de manera continua.
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