La pandemia por Covid-19 no solo ha dejado pérdidas humanas y problemas económicos, también ha causado estragos en el personal médico que le hace frente pues a la fecha, en los hospitales de la Ciudad de México se registraron mil 54 trabajadores contagiados y 44 han perdido la vida.
De éstos, el 38% son enfermeras y enfermeros, 26% médicos, 4% residentes, internos de pregrado y pasantes en trabajo social de medicina y enfermería, y 32% corresponde a personal administrativo, laboratoristas, cocineros, camilleros y nutricionistas.
En las unidades de atención ambulatoria se han registrado 745 trabajadores contagiados, la mayoría de ellos han sido casos leves (96%) y 13 trabajadores han fallecido.
Al 15 de julio, en el ámbito nacional, la Secretaría de Salud Federal registró 20 mil 217 trabajadores sanitarios contagiados con sars-CoV-2 y 271 defunciones.
El IMSS, las unidades médicas de la Secretaría de Salud Federal y de los servicios estatales de salud concentraron la mayor parte de los trabajadores contagiados, con 9 mil 470 y 8 mil 143 casos, respectivamente.
Los 2 mil 594 casos restantes correspondieron a personal de hospitales privados, Sedena e ISSSTE.
El personal de salud constituye la primera línea de defensa que tiene la población frente a Covid-19, tanto en los ámbitos ambulatorios como hospitalarios donde se despliegan los procesos de detección, búsqueda de contactos, diagnóstico, tratamiento y recuperación de los enfermos, en particular de aquellos con síntomas y signos graves de la enfermedad.
Los trabajadores de salud son, también, los más expuestos a contraer la enfermedad, sobre todo, en la primera fase de la pandemia cuando el conocimiento sobre una enfermedad nueva es todavía muy escaso.
Y el riesgo laboral se incrementa cuando no se dispone oportunamente del equipo de protección personal o los trabajadores no se adhieren rigurosamente a las medidas de seguridad establecidas.
La situación laboral de muchos médicos, enfermeras y personal afín representa un elemento adicional al riesgo de contagio del personal de salud que los conduce a trabajar turnos adicionales en otras unidades médicas, lo cual eleva el riesgo de exposición a la enfermedad.
Los sistemas de salud tienen la obligación de proteger a sus trabajadores porque son ellos los que protegen a la población.
La mayoría de los sistemas de salud en el mundo padecen una situación de escasez de personal de salud, la ausencia temporal o definitiva de trabajadores sanitarios por enfermedad o muerte, además de ser una tragedia personal, familiar y social, compromete severamente la capacidad de respuesta de los servicios de salud.
Como los sistemas de información del Gobierno de la Ciudad de México no incluían un registro específico para el personal de salud contagiado, la Sedesa decidió crear una base de datos alimentada con los registros provenientes del Sistema de Información de Vigilancia de Enfermedades Respiratorias (Sisver), de los datos aportados a través de la comunicación directa con el personal de vigilancia epidemiológica y de recursos humanos de hospitales y de centros de salud, y con los datos obtenidos del Subsistema de Información, Equipamiento, Recursos Humanos e Infraestructura para la Salud (Sinerhias).
Este registro es indispensable para conocer la magnitud del posible contagio y, consecuentemente, fortalecer las acciones de capacitación técnica, hacer llegar los apoyos institucionales requeridos para su recuperación y reincorporación laboral, así como también para ajustar los equipos de trabajo al interior de los hospitales y centros de salud mientras perdura la ausencia de los trabajadores enfermos.
En el Hospital de Especialidades, Doctor Belisario Domínguez se contabilizaron hasta el 12 de julio de este año, 3 médicos contagiados de Covid-19 así como 4 residentes, 91 enfermeras, 12 del área de administración y otros, una persona fallecida y 95 recuperados.
Hasta ese mismo lapso, en el Hospital General Doctor Enrique Cabrera, resultaron contagiados 5 médicos, 5 residentes, 6 enfermeras, 2 del personal administrativo y otros, un fallecido y 17 recuperados.
En el Hospital General Gregorio Salas hasta el 12 de julio, hubo un médico contagiado, uno de la administración y un recuperado.
También se registraron contagios en el Hospital General de Iztapalapa con 25 doctores contagiados de coronavirus, así como 8 residentes, 44 enfermeras, 33 del personal administrativo, 8 fallecidos y 90 recuperados.
En el Hospital General de Balbuena se enfermaron 28 médicos, 5 residentes, 51 enfermeras, 19 personas de otras áreas y de la administración con dos fallecidos y 101 recuperados.
Todos los hospitales de la Secretaría de Salud del Gobierno de la Ciudad de México sufrieron los estragos de la pandemia.
Tal es el caso del Hospital Ajusco Medio donde hubo seis casos de médicos contagiados, 3 enfermeras, 9 del área administrativa y de otras, un muerto y 17 recuperados.
Otro caso es el Hospital General de Ticomán donde se reportaron 15 médicos contagiados de Covid, 10 enfermeras, 17 del personal administrativo y de otras áreas, tres fallecidos y 36 personas recuperadas.
Así como en el Hospital General de Tláhuac donde hubo hasta el 12 de julio de este año, 13 médicos contagiados, 48 enfermeras, 25 del personal administrativo y de otras áreas, un fallecido y 84 personas recuperadas.
En Milpa Alta se registraron 6 médicos enfermos, un residente y 9 enfermeras, 15 recuperados y una persona fallecida.
Otro hospital donde también se presentaron contagios fue el Rubén Leñero con 18 médicos contagiados, 5 residentes y 10 enfermeras, 6 muertos y 40 recuperados.
En los centros penitenciarios hasta esa fecha se registraron 56 personas contagiadas, 15 enfermeras, 21 miembros del personal administrativo y de otras áreas, 87 recuperados y tres personas fallecidas.
Y en el Hospital General de Torre Médica Tepepan hubo 4 médicos infectados, tres enfermeras, dos del personal administrativo con una persona recuperada y un fallecido.
A NIVEL NACIONAL
Un nuevo análisis de Amnistía Internacional encontró que cerca de 7,000 personas trabajadoras de la salud han muerto en todo el mundo después de contraer Covid-19. En el caso de México se ha confirmado que al menos 1,320 trabajadores de ese sector han fallecido, la cifra más alta conocida para un solo país.
En su informe, el organismo internacional dijo que registró un elevado número de muertes de personas trabajadoras de la salud en Estados Unidos (1,077) y Brasil (634), donde las tasas de infección y mortalidad han sido altas durante toda la pandemia, así como cifras alarmantes en Sudáfrica (240) e India (573), donde las tasas de infección se han disparado en los últimos meses.
Steve Cockburn, director de Justicia Económica y Social de Amnistía Internacional manifestó que todas las personas trabajadoras de la salud tienen derecho a estar seguras en el trabajo, es un escándalo que tantos estén pagando el precio final”, declaró.
En México, al 25 de agosto, el Ministerio de Salud de México confirmó 97,632 casos de Covid-19 entre las personas trabajadoras de la salud.
Se ha informado que las personas encargadas de la limpieza en los hospitales de México son especialmente vulnerables a la infección. Muchas de ellas están subcontratadas, lo que significa que tienen menos protección.
En mayo, Amnistía Internacional documentó el caso de Don Alejandro, de 70 años de edad, quien trabaja limpiando instalaciones de hospitales estatales en la Ciudad de México. Don Alejandro dijo a Amnistía Internacional que solicitó su reasignación a zonas administrativas, debido a su perfil de riesgo ante el COVID-19, precisó que su empleador accedió a esa solicitud pero redujo sus ingresos en aproximadamente un 16%.
AI destacó el hecho de que el gobierno mexicano lleva un registro detallado de muertes de personas trabajadoras de la salud, con datos desglosados por edad, género y profesión. Esta transparencia es esencial y todos los países deberían poner a disposición este tipo de detalles; puede servir para explicar las inquietantes cifras de México en relación con otros países.
Precisó que los países con las cifras más altas estimadas de trabajadores de la salud que han muerto a causa de COVID-19 son México (1,320), EE.UU. (1,077), Reino Unido (649), Brasil (634), Rusia (631), India (573), Sudáfrica (240), Italia (188), Perú (183), Irán (164) y Egipto (159).
“Tras muchos meses de pandemia, las personas trabajadoras de la salud siguen muriendo a un ritmo espantoso en países como México, Brasil y Estados Unidos, mientras que la rápida propagación de las infecciones en Sudáfrica y la India demuestra la necesidad de que todos los Estados tomen medidas.
“Debe haber una cooperación mundial para asegurar que todas las personas trabajadoras de la salud reciban el equipo de protección adecuado, para que puedan continuar su trabajo vital sin arriesgar sus propias vidas”.
En el informe Expuesto, acallado y atacado, del 13 de julio de 2020, Amnistía Internacional encontró que más de 3,000 personas trabajadoras de la salud habían muerto en el mundo después de contraer COVID-19. Las últimas cifras se deben al aumento de las tasas de COVID-19 en varios países, así como a la disponibilidad de nuevas fuentes de datos.
Es posible que las cifras de los países no siempre sean directamente comparables debido a los diferentes métodos utilizados para reunir los datos, así como por las definiciones de las personas trabajadoras de la salud utilizadas en los distintos países.
Y e probable que estas cifras tengan una subestimación significativa, debido al subregistro de muchos de los países incluidos en el análisis.
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