En círculos políticos llamó la atención la propuesta de Alejandro Alito Moreno, dirigente nacional del PRI.
Le solicitó al candidato de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez declinar a favor de Xóchitl Gálvez antes del tercer debate.
A cambio Alito ofreció a renunciar a la presidencia tricolor y a su candidatura al Senado.
Es de sobra conocida la sagacidad de Moreno Cárdenas, y lo que propuso y ofreció tiene mucho detrás.
Fuentes de primer nivel, indicaron a este espacio que Alito negoció su inclusión como secretario de Gobernación ante el eventual triunfo de Xóchitl.
Para nada es descabellado pensar que eso haya sucedido. Moreno no da paso alguno sin pensarlo o planearlo.
Tiene tras de sí las enseñanzas de Manlio Fabio Beltrones, candidato al Senado, -al igual que Alito y- de reconocida capacidad negociadora.
Sin embargo, en cuanto Moreno hizo público el planteamiento, Máynez lo rechazó sin contemplaciones.
Por el contrario, el candidato naranja le pidió a Alejandro Moreno renunciar como dirigente del PRI, pues de todos modos lo hará después del 2 de junio.
“Te van a correr a patadas”, le dijo Máynez, ante los resultados negativos que va a tener, señaló.
En el pasado, Beltrones fue líder del Senado (2006-2012) y Alito formó parte de la bancada que ayudó a gobernar a Felipe Calderón ante los embates de López Obrador.
Hoy, ambos van como candidatos a la Cámara Alta. La jugada de Moreno no puede entenderse sin las enseñanzas de Manlio.
Es decir, que en caso de que Máynez decline por Xóchitl y al triunfo de la oposición, Alito ocuparía la oficina de Bucareli.
Beltrones quedaría como líder de los priistas en el Senado, desde donde desplegaría su poder e influencia.
Cerraría la pinza con Alito, al frente de Gobernación y la relación directa con los gobernadores.
Todo lo anterior permite dilucidar que después de Xóchitl, el siguiente candidato a la Presidencia surgiría del PRI.
Pero hay otros imponderables que pueden suceder antes y después de los comicios, es decir, otros interesados en la cartera de Gobernación.
En los corrillos políticos suena con fuerza Guadalupe Acosta Naranjo, para tal responsabilidad. Es el actual representante del PRD ante el INE.
Hay que considerar también las opciones del PAN. Por ejemplo, Santiago Creel ocupó ese cargo durante el sexenio de Vicente Fox.
Todo lo anterior, es el entorno de la estrategia de Alito.
PROSPECCIÓN… En el ojo del huracán se encuentra, el director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, quien por orden de un juez debe reactivar el pago por viudez a María Amparo Casar, presidenta de Mexicanos Contra la Corrupción. Pero además, debe acatar la resolución del Poder Judicial para liquidar el adeudo que Pemex tiene con la Empresa Naviera TRESE que ha librado con éxito una intensa batalla en tribunales. El caso que ha sido expuesto en la “mañanera” ante Andrés Manuel López Obrador, es otro de varios pendientes jurídicos de cumplimiento inexorable para el agrónomo que acumula varias advertencias de juzgadores federales para obedecer resoluciones definitivas.
X: @JoelSaucedo
