/ martes 30 de noviembre de 2021

Que regrese Nieto, pero dice no

El chisme que corre en la administración pública federal es de cambios en el primer nivel de la toma de decisiones. Es la hora de los leales, de los que iniciaron y se han ido quedando en el camino como es el caso de Jaime Bonilla que le hace ojitos a la SCT y a la Sectur, aunque su corazòn sea querer el lugar que hoy tiene Mario Delgado al frente de Morena y otro que está en veremos, igual para llegar hasta arriba es Santiago Nieto cuya renuncia es un daño colateral del pleito que traen Paola Felix y Brenda Ruiz, pero esa es otra historia. Su renuncia a la UIF le abre el camino, nos dicen, a tomar un nuevo lugar en la mesa de los muchachones de la 4T

Mientras tanto, lo que pasa es que 17 universidades estatales fueron sede este fin de semana de la evaluación para que los sujetos obligados que realizan actividades vulnerables obtengan una Certificación de la UIF. La mencionada acreditación fue impulsada por el exjefe de esa oficina, Santiago Nieto, para cumplir con lo establecido en el régimen de prevención de lavado de dinero y combate del financiamiento al terrorismo; por cierto, nos dicen que los resultados del examen estarán listos el próximo mes de enero.

Cada vez es más difícil contener la inseguridad en la Ciudad de México. Durante el pasado fin de semana fueron asesinadas 19 personas y conforme se acerque el informe del presidente en el zócalo de la ciudad, habrá datos que serán contrastantes, por ejemplo, los de seguridad. Apenas hace unos días se habló del reforzamiento de seguridad con la Guardia Nacional a Zacatecas ¿y ahora viene para la CDMX? El costo político de todo esto no es para los alcaldes recién llegados, es para la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbwun y sus aspiraciones presidenciales de cara al 2024, mostrando que le cuesta trabajo gobernar la capital del país.

Por cierto, mal le fue a la Diputada Federal, Ana Lilia Herrera al querer encabezar las causas de las mujeres mexiquenses no se identificaron con ella, no le creyeron a la priista mexiquense, y es que la semana pasada encabezó un acto de la asociación estatal “50 + 1” en el marco del Día Naranja y en las redes le reclamaron su cercanía con el diputado local Enrique Vargas.

El chisme que corre en la administración pública federal es de cambios en el primer nivel de la toma de decisiones. Es la hora de los leales, de los que iniciaron y se han ido quedando en el camino como es el caso de Jaime Bonilla que le hace ojitos a la SCT y a la Sectur, aunque su corazòn sea querer el lugar que hoy tiene Mario Delgado al frente de Morena y otro que está en veremos, igual para llegar hasta arriba es Santiago Nieto cuya renuncia es un daño colateral del pleito que traen Paola Felix y Brenda Ruiz, pero esa es otra historia. Su renuncia a la UIF le abre el camino, nos dicen, a tomar un nuevo lugar en la mesa de los muchachones de la 4T

Mientras tanto, lo que pasa es que 17 universidades estatales fueron sede este fin de semana de la evaluación para que los sujetos obligados que realizan actividades vulnerables obtengan una Certificación de la UIF. La mencionada acreditación fue impulsada por el exjefe de esa oficina, Santiago Nieto, para cumplir con lo establecido en el régimen de prevención de lavado de dinero y combate del financiamiento al terrorismo; por cierto, nos dicen que los resultados del examen estarán listos el próximo mes de enero.

Cada vez es más difícil contener la inseguridad en la Ciudad de México. Durante el pasado fin de semana fueron asesinadas 19 personas y conforme se acerque el informe del presidente en el zócalo de la ciudad, habrá datos que serán contrastantes, por ejemplo, los de seguridad. Apenas hace unos días se habló del reforzamiento de seguridad con la Guardia Nacional a Zacatecas ¿y ahora viene para la CDMX? El costo político de todo esto no es para los alcaldes recién llegados, es para la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbwun y sus aspiraciones presidenciales de cara al 2024, mostrando que le cuesta trabajo gobernar la capital del país.

Por cierto, mal le fue a la Diputada Federal, Ana Lilia Herrera al querer encabezar las causas de las mujeres mexiquenses no se identificaron con ella, no le creyeron a la priista mexiquense, y es que la semana pasada encabezó un acto de la asociación estatal “50 + 1” en el marco del Día Naranja y en las redes le reclamaron su cercanía con el diputado local Enrique Vargas.