/ lunes 23 de noviembre de 2020

“Que reabra el Tratado yo no lo veo”

La inminente llegada de Joe Biden y los demócratas al poder no inquietan a Jesús Seade, el subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México y principal negociador del nuevo tratado comercial con Canadá y Estados Unidos. Se va tranquilo de la cuatroté.

“Lo que se negoció lo acabaron ellos apoyando al 100 por ciento”, dice cuando le preguntamos si habrá alguna afectación al T-MEC con la salida de Donald Trump y los republicanos de la Casa Blanca. “Ellos dijeron: nosotros queremos un mecanismo fuerte, para que se cumpla lo laboral. Nosotros les contestamos: ese mecanismo se llama solución de diferencias. Lo discutimos a fondo, lo perfeccionamos, lo acordamos. Ellos querían que fuera para lo laboral. Para lo laboral perfecto, pero para todo lo demás también. Para el acero de México, para las fresas, para el aguacate y para el atún”.

Lograron gracias a los demócratas superar la oposición de los republicanos al sistema de solución de controversias. La gente de Trump no lo quería, los demócratas sí.

“Que reabra el Tratado yo no lo veo”, asegura Seade Kuri en entrevista con El Sol de México, nuestra última conversación antes de viajar a Hong Kong y regresar con su familia. “Que lo apliquen con mucha dedicación, eso sí puede ser. Una cosa es que tengas el mecanismo para exigirle a México buena evolución en sus prácticas laborales, una vez que tengas el mecanismo, y otra cosa es que hagas la exigencia. Con qué dedicación haces la exigencia. Entonces yo sí creo que va a ser con los demócratas una relación más robusta en el tema laboral y en el tema ambiental. Hablo de exigencia, de que se cumpla”.

—¿Y de aquí para allá?—, pregunta el reportero.

—López Obrador tiene todo el interés de que se cumpla. Él a mí siempre me dijo: perfecto, que nos obliguemos a que la reforma laboral se lleve a la práctica a pie juntillas, adelante, a mí eso no me espanta. Eso nos va a ayudar a que se haga real la reforma laboral. Yo por ese lado lo veo con preocupación de hacer las cosas, pero con gusto en el sentido político.

Le recordamos que con su llegada al equipo que conformaba el tabasqueño, desde Asia, se esperaba que la relación con China, Japón y Corea del Sur fuera ahora sí prioridad del gobierno de México, pero eso no se notó.

“¡Claro que sí!!, responde de inmediato. “Concluímos las negociaciones del tratado al final del 2019, y estuve totalmente dedicado a eso. A partir de enero de este año yo estaba ya pensando en irme del Gobierno y el Presidente fue quien dijo, mejor, durante los próximos meses, sigue con la subsecretaría, pero la puedes llevar en buena medida desde Hong Kong, puedes estar yendo y viniendo, y nos ayudas a explorar, a acercarse a allá, gobierno, empresarios, y es lo que he estado haciendo. Claro que se vino la pandemia y vinieron limitaciones, pero es lo que estoy haciendo, por voluntad del Presidente”.

Asegura que López Obrador no se enojó cuando le dijo que él quería regresar con su familia. “Ahorita no es buen momento para hacer cambios”, le dijo en enero de este año. Pero hace unos días aceptó su salida. Será en la segunda semana de diciembre cuando Jesús Seade tome su avión de regreso y se convierta en consultor privado. “Desde enero yo hablé con él y le dije Señor Presidente, pues ya, ya acabé, ya firmamos, el encargo ya se hizo”.

—¿Como consultor, cómo le va a ofrecer a México a los extranjeros? A esos inversionistas españoles que reciben una patada, a los estadounidenses que representan trasnacionales, que reciben una patada, a los de energía, que reciben una patada…

—No, yo creo que eso de la patada es un poco a medias, no tanto, y el tratado yo creo que es una base de largo plazo, más allá de todas las patadas, es una base de largo plazo muy buena, muy vendible. Se exige más presencia en América del Norte o estás fuera, y eso pues es de gran interés. Desde el primer día que se concluyó la primera negociación con Ildefonso Guajardo, ellos estaban dando declaraciones todas... reconociendo que habíamos tenido que aceptar reglas de origen más duras, lo cual no era muy bueno. Yo les dije, están locos, esto va a ser buenísimo para México, y así lo sigo viendo. Y lo siguen viendo las empresas.

Ha sido un año perdido, dice Jesús Seade, este año no existe.

“Entre la pandemia y la situación política —mucha gente ha aprovechado la pandemia para atacar—, nos hemos dedicado a discusiones bizantinas y a manejar la economía y la pandemia bajo situaciones de crisis, pero sí hay el interés total de atraer en particular a Asia”.

Reitera una y otra vez que el Presidente sí escucha, y él es ejemplo de ello, pues no lo conocía y lo puso al frente de la negociación del tratado comercial confiando en sus aptitudes. “Es muy abierto, debate mucho para entender, yo siempre el ejemplo que doy es que yo no lo conocía, no tenía el gusto de conocerlo en absoluto cuando él me invitó a colaborar, y me invitó a un puesto no de subsecretario, era negociador del T-MEC, imagínate que expuesto políticamente para él ese puesto, al cual estaba metiendo a una persona que lo iba a representar a él, a estar hombro a hombro, lado a lado, con los negociadores de Peña Nieto. Si manda a un patán, a alguien que no le sabe, queda súper mal. Era de alto riesgo mandar a alguien que no fuera de su más entera confianza”.

Es un hombre que sí escucha, dice Seade.

Pero tenemos un Gobierno con grupos de intereses divididos. ¿Contradicciones en la cuatroté? Acepta que hay diferentes direcciones y llegó el Covid, pero pronto se definirá la dirección que se tome en diferentes temas

La inminente llegada de Joe Biden y los demócratas al poder no inquietan a Jesús Seade, el subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México y principal negociador del nuevo tratado comercial con Canadá y Estados Unidos. Se va tranquilo de la cuatroté.

“Lo que se negoció lo acabaron ellos apoyando al 100 por ciento”, dice cuando le preguntamos si habrá alguna afectación al T-MEC con la salida de Donald Trump y los republicanos de la Casa Blanca. “Ellos dijeron: nosotros queremos un mecanismo fuerte, para que se cumpla lo laboral. Nosotros les contestamos: ese mecanismo se llama solución de diferencias. Lo discutimos a fondo, lo perfeccionamos, lo acordamos. Ellos querían que fuera para lo laboral. Para lo laboral perfecto, pero para todo lo demás también. Para el acero de México, para las fresas, para el aguacate y para el atún”.

Lograron gracias a los demócratas superar la oposición de los republicanos al sistema de solución de controversias. La gente de Trump no lo quería, los demócratas sí.

“Que reabra el Tratado yo no lo veo”, asegura Seade Kuri en entrevista con El Sol de México, nuestra última conversación antes de viajar a Hong Kong y regresar con su familia. “Que lo apliquen con mucha dedicación, eso sí puede ser. Una cosa es que tengas el mecanismo para exigirle a México buena evolución en sus prácticas laborales, una vez que tengas el mecanismo, y otra cosa es que hagas la exigencia. Con qué dedicación haces la exigencia. Entonces yo sí creo que va a ser con los demócratas una relación más robusta en el tema laboral y en el tema ambiental. Hablo de exigencia, de que se cumpla”.

—¿Y de aquí para allá?—, pregunta el reportero.

—López Obrador tiene todo el interés de que se cumpla. Él a mí siempre me dijo: perfecto, que nos obliguemos a que la reforma laboral se lleve a la práctica a pie juntillas, adelante, a mí eso no me espanta. Eso nos va a ayudar a que se haga real la reforma laboral. Yo por ese lado lo veo con preocupación de hacer las cosas, pero con gusto en el sentido político.

Le recordamos que con su llegada al equipo que conformaba el tabasqueño, desde Asia, se esperaba que la relación con China, Japón y Corea del Sur fuera ahora sí prioridad del gobierno de México, pero eso no se notó.

“¡Claro que sí!!, responde de inmediato. “Concluímos las negociaciones del tratado al final del 2019, y estuve totalmente dedicado a eso. A partir de enero de este año yo estaba ya pensando en irme del Gobierno y el Presidente fue quien dijo, mejor, durante los próximos meses, sigue con la subsecretaría, pero la puedes llevar en buena medida desde Hong Kong, puedes estar yendo y viniendo, y nos ayudas a explorar, a acercarse a allá, gobierno, empresarios, y es lo que he estado haciendo. Claro que se vino la pandemia y vinieron limitaciones, pero es lo que estoy haciendo, por voluntad del Presidente”.

Asegura que López Obrador no se enojó cuando le dijo que él quería regresar con su familia. “Ahorita no es buen momento para hacer cambios”, le dijo en enero de este año. Pero hace unos días aceptó su salida. Será en la segunda semana de diciembre cuando Jesús Seade tome su avión de regreso y se convierta en consultor privado. “Desde enero yo hablé con él y le dije Señor Presidente, pues ya, ya acabé, ya firmamos, el encargo ya se hizo”.

—¿Como consultor, cómo le va a ofrecer a México a los extranjeros? A esos inversionistas españoles que reciben una patada, a los estadounidenses que representan trasnacionales, que reciben una patada, a los de energía, que reciben una patada…

—No, yo creo que eso de la patada es un poco a medias, no tanto, y el tratado yo creo que es una base de largo plazo, más allá de todas las patadas, es una base de largo plazo muy buena, muy vendible. Se exige más presencia en América del Norte o estás fuera, y eso pues es de gran interés. Desde el primer día que se concluyó la primera negociación con Ildefonso Guajardo, ellos estaban dando declaraciones todas... reconociendo que habíamos tenido que aceptar reglas de origen más duras, lo cual no era muy bueno. Yo les dije, están locos, esto va a ser buenísimo para México, y así lo sigo viendo. Y lo siguen viendo las empresas.

Ha sido un año perdido, dice Jesús Seade, este año no existe.

“Entre la pandemia y la situación política —mucha gente ha aprovechado la pandemia para atacar—, nos hemos dedicado a discusiones bizantinas y a manejar la economía y la pandemia bajo situaciones de crisis, pero sí hay el interés total de atraer en particular a Asia”.

Reitera una y otra vez que el Presidente sí escucha, y él es ejemplo de ello, pues no lo conocía y lo puso al frente de la negociación del tratado comercial confiando en sus aptitudes. “Es muy abierto, debate mucho para entender, yo siempre el ejemplo que doy es que yo no lo conocía, no tenía el gusto de conocerlo en absoluto cuando él me invitó a colaborar, y me invitó a un puesto no de subsecretario, era negociador del T-MEC, imagínate que expuesto políticamente para él ese puesto, al cual estaba metiendo a una persona que lo iba a representar a él, a estar hombro a hombro, lado a lado, con los negociadores de Peña Nieto. Si manda a un patán, a alguien que no le sabe, queda súper mal. Era de alto riesgo mandar a alguien que no fuera de su más entera confianza”.

Es un hombre que sí escucha, dice Seade.

Pero tenemos un Gobierno con grupos de intereses divididos. ¿Contradicciones en la cuatroté? Acepta que hay diferentes direcciones y llegó el Covid, pero pronto se definirá la dirección que se tome en diferentes temas