Apenas inició el 2022 y el hampa ya ha hecho de las suyas, pese a los múltiples y muy anunciados operativos, incluso coordinados entre diversos órdenes de gobierno, que han mostrado nuevamente su ineficacia, al perpetrarse un nuevo asalto en una unidad de pasajeros en territorio mexiquense.
Fue la noche del primero de enero del 2022 que al menos seis pasajeros de una vagoneta adaptada para el transporte público que se desplazaba por Coacalco fueron sorprendidos por solitario ladrón, que por su forma de delinquir se presume es un inexperto, pues por momentos, se le ve lidiar con el cargador de una subametralladora, que además se presume es falsa.
El hampón quien aborda la unidad solo, cerca del cruce del Eje 15 y Eje 8, apenas ocupa su lugar a un costado de la puerta y comienza el asalto, “se trata de la siguiente… ya se la saben”, amaga, seguido de una ola de insultos y amenazas en contra de los pasajeros, a quienes les pide “celulares, carteras, aretes, anillos”, mientras les apunta con un arma larga.
Poco a poco el criminal se apodera de las pertenencias de los pasajeros y las va guardando en los bolsos de su pantalón y sudadera; en medio del atraco el cargador de la subametralladora que ocupa se cae, al mismo tiempo, intenta abrir la puerta de la camioneta mientras continua con las amenazas.
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Ya apunto de consumar el asalto el hampón vuelve a colocar el cargador del arma larga mientras continúa desapoderando de sus pertenencias a una pasajera, en medio de la mirada incierta del resto de pasajeros y la frustración de no poder enfrentar al criminal.
Finalmente y luego de poco más de un minuto que duró el robo, el asaltante desciende de la unidad y logra escapar con total impunidad. Mientras tanto, al interior de la combi, las víctimas reclaman al chofer por “haberle hecho la parada”, mientras que otros debaten entre si era o no real el arma utilizada en el asalto violento.
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