Dice el dicho: “quien mete paz, saca más”, y eso le pasó a Juan Antonio "N", quien intentó parar una pelea entre dos sujetos en calles de la colonia Roma Norte, alcaldía Cuauhtémoc, pero tras intervenir fue golpeado, terminó acusado de robo con violencia y está a punto de ir a prisión.
De acuerdo con el relato de Alejandra "N", esposa de Juan, la madrugada del pasado sábado, ambos decidieron ir a bailar al club nocturno Mama Rumba, ubicado entre las calles Querétaro y Medellín.
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Aproximadamente a la una de la mañana, la pareja salió a fumar un cigarro a la calle y al presenciar cómo dos jóvenes se agarraban a golpes, el hombre de 48 años de edad se metió a intentar separarlos.
Al notar la presencia de Juan, los rijosos se unieron y comenzaron a golpearlo sin que se pudiera defender, pues padece diabetes, hipertensión y una afectación severa en los riñones.
"Mi esposo pedía ayuda, decía: ‘ayúdenme, quítenmelos’. Él ni siquiera se puede pelear porque no tiene la fuerza, está enfermo", dijo la esposa de la víctima.
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Un hombre dedicado a acomodar carros en la zona, identificado como Eduardo "N", de 38 años de edad, se metió a auxiliar a la víctima sin pensar que terminaría detenido por el mismo delito.
Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX arribaron al lugar, luego de que una mujer que iba acompañando a los tipos que iniciaron el pleito solicitó el apoyo de elementos policiacos.
Según lo mencionado por la señora Alejandra, quien trabaja como mesera en un restaurante en la colonia Guerrero, los uniformados detuvieron a Juan, quien pretendía retirarse en su camioneta y se la llevaron.
Posteriormente regresaron con el vehículo marca Dodge Caravan, color verde, ya desvalijado y con varios golpes. En su interior se encontraban unas mochilas que presuntamente eran propiedad de los tipos de la pelea inicial.
Juan Antonio y Eduardo, quienes se conocen por las frecuentes visitas al lugar de baile, fueron presentados ante el Ministerio Público en las instalaciones de la Fiscalía de Investigación Territorial en Cuauhtémoc, ubicada en calle Juan Aldama 57, colonia Buenavista.
Asimismo, una mujer familiar de Antonio, manifestó que los presuntos afectados llegaron a realizar la denuncia en completo estado de ebriedad, casi tambaleando, y en el acta se asentó únicamente que traían aliento alcohólico.
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"Lo están acusando injustamente de robo a transeúnte con violencia. Por ese delito me están diciendo que se va a ir al reclusorio. Mi esposo es una persona que depende de la insulina y no me habían dejado pasar a aplicarle el medicamento", comentó Alejandra.
"Queremos que el Ministerio Público los deje libres porque son inocentes. Que revisen los videos y que vean las pruebas. Mi esposo sólo salió a distraerse", mencionó la mujer evidentemente angustiada.
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