Entre los vidrios del medallón destrozado de un vehículo y junto a una motocicleta con el manubrio doblado, quedaron dos bikers que salieron vivos, tras impactarse a alta velocidad en el perímetro de la colonia Country Club Churubusco, perteneciente a la alcaldía Coyoacán.
De acuerdo con versión de testigos, luego de que el hombre que conducía la moto entre carriles de Viaducto Tlalpan, no alcanzara a frenar, golpeó de lleno la parte trasera de un automóvil y su acompañante salió proyectada contra el vidrio trasero.
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Tras el fuerte golpe, los motociclistas que se circulaban con rumbo hacia el Centro de la CDMX, quedaron tendidos sobre el asfalto, justo frente a una gasolinera, a la altura de la calle Nadadores.
El sujeto se pudo incorporar y rápidamente intentó auxiliar a su esposa, Liliana Lucero de 31 años de edad, pero esta ya no se pudo incorporar y permaneció recostada debido a que prestaba un fuerte dolor en la espalda.
Varios empleados del punto de carga de combustible, se acercaron a tratar de ayudar a la mujer. "¡No la muevan!", gritó un hombre.
Entre los presentes, solo atinaron a poner una chamarra verde de fondo anaranjado, sobre el rostro de la lesionada, para protegerla del sol, lo cual ante la mirada de los curiosos hizo parecer que había perdido la vida.
El conductor del Chevrolet tipo Onix en color gris plata, un hombre alto y tez clara, bajó de la unidad y tras observar la situación, con nerviosismo, comenzó a hacer llamadas para contactar a la agencia aseguradora.
Luego de percatarse del incidente vial, registrado aproximadamente a las 9:00 horas de este viernes, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX, arribaron al lugar y solicitaron la presencia de los servicios de emergencia.
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"Pues yo solo escuché el golpe cuando volteé, la moto hizo como un caballito y la chava salió volando contra el carro. Dicen que el auto se frenó, pero por lo que yo veo, más bien el de la moto se fue a estrellar", dijo Lucía, una mujer de unos 30 años de edad, despachadora de gasolina.
Paramédicos del Sistema de Atención Médica de Urgencias (SAMU), llegaron a bordo de una ambulancia, para valorar a los involucrados. La mujer requirió ser trasladada a un hospital de la zona para una revisión a profundidad.
Dos hombres, familiares de los motociclistas, levantaron la Italika tipo Fz 250, en color negro, la cual derramaba aceite del motor y la pusieron a un costado de la banqueta. Uno de ellos exclamó "Afortunadamente, están bien".
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