Cruel feminicidio ocurrió en un domicilio de la Colonia Tecaztitla Pueblo de San Antonio Tecómilt en Milta Alta, donde un hombre presuntamente bajo los efectos de la droga asesinó a su pareja sentimental, Jacqueline “H”, la descuartizó; los brazos los puso a cocer con la intención de dárselos de comer a sus perros; el resto de las partes humanas las colocó en bolsas de plástico y las dejó en la azotea de su domicilio. Cuando llegó la madre de la joven muerta, también intentó atacarla con un cuchillo, al gritarle que se fuera o que también la iba a matar.
Al intentar escapar el presunto feminicida, y chef identificado como José Alfredo “C”, de 31 años de edad fue perseguido y detenido por uniformados de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, para ser puesto a disposición del Ministerio Público y en las próximas horas se determinará su situación jurídica.
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Este feminicidio ocurrió la noche del pasado lunes en un domicilio ubicado en la colonia Tecaztitla Pueblo de San Antonio Tecomitl, alcaldía Milpa Alta.
El informe oficial de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México señala que alrededor de las 19:40 horas, Inés de 53 años fue a visitar a su hija quien vive junto a su pareja sentimental José Alfredo "C"; sin embargo, éste le abrió la puerta con un cuchillo en mano y le confesó que había matado a su hija y que se fuera de ahí o también la mataría.
Debido a ello, la mujer solicitó ayuda a elementos de la policía de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, los cuales acudieron al inmueble, donde tras una persecución detuvieron al sospechoso de 31 años, quien dijo que el domingo pasado había contactado a un sujeto por Facebook para intercambiar a su esposa por droga conocida como cristal.
También confesó que se drogó con el cristal y que se quedó dormido. Agrego que al despertar se dio cuenta que había matado a su pareja sentimental de nombre Jacqueline “H” de 25 años de edad, a quien ultimó con un chillo y posteriormente cortó en trozos; además dijo a la policía que los brazos los colocó en una olla y los coció con la intención de dárselos de comer a sus perros.
El detenido, José Alfredo “N” también dijo a los elementos policiacos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México que las otras partes del cuerpo que había cortado las colocó en una bolsa de plástico negra y las dejó en la azotea.
De acuerdo al informe elaborado por uniformados de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX, cuando los policías ingresaron efectivamente encontraron la olla con restos humanos que al parecer eran de la joven Jaqueline y una bolsa negra con manchas de sangre con otros restos humanos.
El presunto feminicida, José Alfredo “C” fue remitido ante las autoridades ministeriales de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México donde se llevan a cabo las investigaciones y en las próximas horas se determinará su situación jurídica.
VECINOS LAMENTAN MUERTE DE JACQUELINE
Con un gran pesar, vecinos del pueblo de San Antonio Tecómitl lamentaron el asesinato de Jacqueline “N” de 25 años de edad –presuntamente- a manos de su pareja sentimental.
“A nosotros se nos hizo muy raro porque siempre los veíamos juntos, y desde hace como 15 días dejamos de ver a la muchacha; el chavo pasaba diario a comprar sus cosas, pero ya ni saludaba”, comentó una de las residentes de la Cerrada José Vasconcelos.
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De acuerdo con los vecinos, la pareja de jóvenes arribó a la colonia hace poco menos de dos años y decidieron rentar un departamento ubicado en el tercer piso del inmueble más lejano.
“En los últimos cuatro meses el chavo cambió mucho; antes estaba más gordito y tenía pelo ya después lo vimos flaco y pelón. Otras vecinas también nos dijeron que de unos meses para acá empezaron a oír peleas (…) nos dijeron que una señora estaba gritando por ayuda porque según a su hija le habían pegado y la tenían secuestrada”, continuaron.
“Si desde esa vez, la señora vio problemas con su hija, pues se la hubiera llevado; ahí empezaron los problemas. Nosotros no lo podemos creer porque era una niña muy trabajadora que por la pandemia se había puesto a vender tacos de guisado”.
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