LA PAZ, Méx., 24 de marzo.-Dolor, llanto, pero sobre todo el grito de “justicia”, fue lo que imperó la tarde del viernes en el panteón de la colonia Lomas de Altavista, en este municipio, a donde bajaron a su última morada los restos mortales de la señora Angélica María, quien fuera asesinada y encontrada sepultada clandestinamente dentro de una obra construcción en el municipio de Chimalhuacán, donde acababa de ser contratada para realizar trabajos de albañilería.
Luego de haber sido velada durante toda la noche, por familiares, amigos y vecinos, el féretro que contenía los restos mortales de la señora Angélica salieron de lo que fue su domicilio, en el municipio de Chimalhuacán, al filo de las 15:30 de la tarde de este viernes rumbo al citado panteón, donde serían sepultados.
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Durante el trayecto, familiares y las personas que más estimaron a la señora Angélica acompañaron su féretro, con lágrimas, cantos, rezos y sobre todo con el grito de “justicia” y castigo ejemplar para los sujetos que la privaron de la vida, dos de los cuales ya están detenidos, caminaron paso a paso hasta que llegaron al cementerio.
“Era una buena mujer y buena madre”
“No es justo, ella no merecía morir así, era una buena mujer, una buena madre, una mujer ejemplar y trabajadora, daba todo por su esposo y sus dos hijos”, con lágrimas en los ojos y la impotencia reflejada en el rostro, lo manifestó su hermana María Dolores Leticia.
Ella tenía un negocio de talachas, así como la ve todos los días llegaba al negocio para parchar y cambiar llantas de autos y lo hacía muy bien, demostraba que ese trabajo no era exclusivo para hombres, también lo podían hacer las mujeres y ella lo hacía muy bien, por eso tenía muchos clientes, agregó su hermano.
En la semana un sujeto le ofreció trabajar como albañil en una obra en construcción y como le iba a pagar 3 mil 500 pesos a la semana y solo iba a trabajar viernes, sábado y domingo, aceptó porque aparte de que era muy chambeadora, no iba a descuidar muchos días su negocio de talachas.
La asesinaron y sepultaron
Sin embargo, dijo la dolida mujer, nunca pensó que ese trabajo le iba a costar la vida, pues el sujeto que la contrató y otros dos albañiles, sin saber a ciencia cierta por qué lo hicieron, el mismo día que entró la asesinaron y para evadir la acción de la justicia la sepultaron clandestinamente.
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Gracias a la intervención de elementos de la policía de investigación de Chimalhuacán, dijo, pudimos encontrar el cuerpo de mi hermana, pues ellos se dieron cuenta que en una zona de la obra en construcción había tierra removida y al escarbar ahí encontraron a su hermana sepultada, si no hubiera sido así, indicó, nunca la hubiéramos encontrado.
En ese momento, se cortó la conversación, las lágrimas comenzaron a rodar y los gritos de dolor y llanto se hicieron presentes, cuando el féretro que contenía los restos mortales de la señora Angélica María bajaron a su última morada.
No señor, por qué, por qué te la llevaste si era una buena mujer, honesta y trabajadora que no le hacía nada a nadie, gritaban sus familiares, principalmente su esposo y sus dos hijos de 5 y 11 años de edad.
Después del fuerte momento, más tranquila, la señora María Dolores Leticia se quedó mirando fijamente y enseguida dijo: “queremos justicia, que los responsables de la muerte de mi hermana sean detenidos, todos, porque aún falta uno, y que sean castigados con todo el rigor de la ley, que nunca salgan de la cárcel, la muerte de mi hermana no debe de quedar impune, mi familia y yo exigimos justicia, concluyó.
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