Amordazado y golpes en la cabeza fue hallado el cadáver de un presunto elemento de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en un inmueble del área común donde vivía en la alcaldía Miguel Hidalgo. Por la forma en que fue cometido el asesinato se presumen que la víctima conocía a sus agresores; sin embargo, serán los avances de las pesquisas los que determinen los motivos por los que fue ultimado.
De acuerdo al parte oficial, cerca de las 11:30 horas del sábado, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México fueron alertados de un homicidio.
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Los agentes se trasladaron a una vecindad ubicada en la colonia Pensil, donde la dueña del predio les dijo que uno de los albañiles que realiza trabajos de remodelación en el lugar, halló a uno de sus inquilinos sin vida.
El empleado de construcción de nombre Alejandro "N" refirió a las autoridades que notó que la puerta de uno de los apartamentos se encontraba entre abierta y que del interior emanaba un olor fétido.
Al asomarse vio el cuerpo de un hombre tirado y sobre un charco de sangre. Paramédicos determinaron que la víctima ya no presentaba signos vitales, por ello acudieron peritos de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) a levantar el cuerpo y a llevar a cabo las primeras diligencias.
Sin embargo, fuentes de la institución refirieron que cuando los especialistas llegaron a la escena del crimen había más de 20 elementos de la Policía capitalina, quienes no respetaron la cadena de custodia del cadáver, pues tocaron y revisaron el departamento.
Al revisar el cuerpo, los peritos observaron que la víctima tenía cita adhesiva en la boca y que tenía atadas las manos, así como heridas en la cara y tórax. Pero los empleados de la FGJ no hallaron el arma o el objeto con el que se cometió el asesinato.
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Lo que si localizaron fue una credencial del fallecido que lo identifica como Héctor "N" de 31 años y que lo acreditaba como elemento de la Secretaría de la Denuncia Nacional (Sedena). En el apartamento había uniformes tipo militar y objetos como boinas, botas y navajas.
La casera refirió al Ministerio Público que le rentaba el apartamento a la víctima y a otro hombre desde el 1 de octubre pasado. Y que desconocía el paradero del otro sujeto.
Sobre los hechos la mujer dijo desconocer lo que había sucedido, pues señaló que ella no reside en el lugar, y que actualmente sólo le rentaba al fallecido debido a los trabajos de remodelación que hace en el sitio.
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