TULTITLÁN, Méx., 14 de Agosto.- Dos jóvenes de 19 y 22 años de edad, quienes trabajaban como cargadores en la Central de Abastos de este municipio, fueron asesinados a balazos por un grupo de delincuentes que les dispararon en más 8 ocasiones con armas de fuego desde una camioneta en marcha.
Consumada la doble ejecución, los presuntos homicidas que a decir de la policía al parecer actuaron en una venganza, imprimieron velocidad a su camioneta para darse a la fuga y perderse entre las calles del lugar, sin que hasta el momento se sepa nada de su identidad y posible paradero.
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Autoridades policíacas informaron que de acuerdo a las primeras investigaciones que se realizaron, los ahora occisos acababan de terminar con su jornada laboral y caminaban por la calle, al parecer rumbo a su domicilio, cuando fueron sorprendidos por varios sujetos que viajaban en una camioneta Honda de color negra, mismos que sacaron de entre los cristales armas de fuego para dispararles en repetidas ocasiones.
A consecuencia de los balazos que recibieron en tórax, brazos y piernas, ambos sujetos cayeron al piso heridos de muerte, por lo que algunas de las personas que caminaban por el lugar, al darse cuenta de lo sucedido de inmediato pidieron el auxilio de una ambulancia para que recibieran atención médica de urgencia.
Sin embargo, cuando paramédicos de la Cruz Roja llegaron y trataron de brindarles los primeros auxilios determinaron que ya no había nada que hacer, pues ambos ya habían muerto, a consecuencia de los múltiples balazos que recibieron.
Después de que los paramédicos confirmaron la muerte de dichos sujetos, policías municipales que llegaron al lugar, en atención a un llamado de auxilio, acordonaron toda la zona y pidieron la intervención del Ministerio Público para que diera fe de los hechos.
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Durante las primeras inspecciones oculares que practicó en el lugar, el MP informó que los occisos quedaron tirados boca arriba, casi juntos y que ambos presentaban múltiples balazos en diferentes partes de su cuerpo, al parecer de pistolas calibre .9 milímetros, pues en el lugar se encontraron al menos 8 casquillos percutidos de dicha arma.
Concluidas las diligencias ministeriales y una vez que ordenó el levantamiento de los cadáveres, el MP dio inicio a la carpeta de investigación correspondiente por el delito de homicidio y con ello giró instrucciones a elementos de la policía de investigación para que sean estos quienes con base en sus trabajos policíacos establezcan cuál fue el móvil del crimen y quiénes los responsables para buscarlos y detenerlos y con ello resolver este caso.
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