/ jueves 1 de diciembre de 2022

Jóvenes de 20 a 34 años, los más afectados por el VIH

La mitad de los casos acumulados se concentran en este grupo de edad; llaman a mejorar la educación sexual

La pandemia de VIH-Sida en México creció seis por ciento en 2021. Los nuevos casos pasaron de 17 mil 486 en 2020 a 18 mil 550 el año pasado.

Desde 1983, cuando se registró el primer caso de sida en México, a octubre de 2022, fecha del informe más reciente de Censida, suman 369 mil 400 casos activos de VIH, y los jóvenes representan el grupo más vulnerable, no solo por las tasas de prevalencia, sino por la falta de educación sexual, afirmaron especialistas.

Te puede interesar: El SIDA no mata a las personas con VIH: es el desabasto y los estigmas

Una de cada dos personas que vive con VIH en nuestro país tiene entre 20 y 34 años de edad.

“El llamado es al Gobierno federal, para fomentar una mejor educación. Desafortunadamente, en las escuelas no hay información suficiente para que se aprenda a ejercer una sexualidad saludable”, aseguró Guillermo Bustamante, directivo de AIDS Healthcare Foundation (AHF). Una muestra de la falta de esa educación sexual, dijo, es el incremento en el número de embarazos entre los adolescentes. “En México tenemos 68 embarazos por cada mil, mientras en Alemania son tres embarazos por cada mil y ha sido a consecuencia de no tener una información o educación suficiente, basta, científica”.

Eso se suma a otros prejuicios, como no poner al alcance de la población adolescente y de los jóvenes condones gratuitos. Recordó que antes de acceder a los preservativos, éstos suelen pasar por filtros médicos y responder preguntas del personal, lo cual provoca que disminuya su falta de confianza.

“Entre las causas por las cuales en esos grupos de edad no usan preservativos se identifica en primer lugar la falta de conocimiento de que el condón previene el contagio del VIH, luego la falta de dinero y en tercer lugar no lo usaron porque no lo tienen a la mano”, expuso

Bustamante. Añadió que uno de los mayores retos en nuestro país es lograr diagnósticos oportunos para evitar, más tarde, una carga al sistema de salud, puesto que las 369 mil 400 personas que viven con VIH-Sida en nuestro país apenas son siete de cada 10 portadoras doras del virus; “nos falta identificar a tres de cada 10 portadores”, dice.

Actualmente, menciona, seis de cada 10 que viven con VIH tienen acceso a un tratamiento antirretroviral y solo la mitad de los que viven con el virus lograron alcanzar la supresión viral, es decir, una mejor condición de vida.

Frente a la meta que planeó ONU-Sida para 2030, anticipa, “desde ahora podemos observar que México no cumplirá, porque tenemos que llegar a 95 por ciento de las personas diagnosticadas, mientras que de tratamiento tenemos que llegar también a 95 por ciento y nos faltan 34 puntos”.

“Donde vamos muy bajos es en el número de personas que alcanzaron supresión viral; ahí el rezago es de 41 por ciento”.

En entrevista por separado, Alaín Pinzón, activista y quien se convirtió en el símbolo de la lucha de quienes viven con VIH pero enfrentan el desabasto de medicinas y servicios médicos en nuestro país, aseguró que sigue siendo muy difícil que los adolescentes y jóvenes tengan acceso gratuito a los condones en los centros de salud del país.

“La brecha de acceso a esa herramienta de prevención es enorme en nuestro país por la desinformación y el estigma”.

Dijo que en este año “la mayor preocupación es el de las personas que han tenido que ser hospitalizadas porque se encuentran en etapa de Sida y no tienen servicio médico o no tienen acceso a retrovirales”.

Previo a la marcha que se realizará este día por el centro de la Ciudad de México para hacer visibles a las personas que viven con Sida, así como los que fallecieron por la falta de medicinas o diagnósticos, el activista indicó que “el testeo- diagnóstico sigue siendo pobre en términos generales, pero si se revisa en el caso de las entidades hay lugares como Veracruz o instituciones como el IMSS en dónde no hemos avanzado y son altos los niveles de serofobia (fobia a los seropositivos)”.

Ambos especialistas coincidieron que uno de los retos es reducir el tiempo de diagnóstico para un paciente, puesto que mientras en la clínica especializada de la Ciudad de México puede llevar 15 días, en el caso de las unidades del IMSS implica hasta 150 días y en las unidades médicas de las entidades por arriba de ello.

En el Día Mundial de la Lucha contra el Sida que se conmemora este 1 de diciembre, Censida dio a conocer que mientras en 2018 se aplicaron dos millones 659 mil pruebas para diagnosticar el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida, para 2021 sólo se hicieron dos millones 106 mil, es decir, 553 mil pruebas menos (20.8 por ciento).

MORTALIDAD

Las más recientes cifras del Inegi refieren que en 2021 fallecieron cuatro mil 662 pacientes con VIH, pero 40.3 por ciento de quienes murieron de enfermedades relacionadas con el virus no contaba con afiliación a una institución de salud.

Veracruz, Ciudad de México, Jalisco y Estado de México tuvieron mayor incidencia, mientras Aguascalientes, Tlaxcala y Zacatecas reportaron los más bajos casos.

La pandemia de VIH-Sida en México creció seis por ciento en 2021. Los nuevos casos pasaron de 17 mil 486 en 2020 a 18 mil 550 el año pasado.

Desde 1983, cuando se registró el primer caso de sida en México, a octubre de 2022, fecha del informe más reciente de Censida, suman 369 mil 400 casos activos de VIH, y los jóvenes representan el grupo más vulnerable, no solo por las tasas de prevalencia, sino por la falta de educación sexual, afirmaron especialistas.

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Una de cada dos personas que vive con VIH en nuestro país tiene entre 20 y 34 años de edad.

“El llamado es al Gobierno federal, para fomentar una mejor educación. Desafortunadamente, en las escuelas no hay información suficiente para que se aprenda a ejercer una sexualidad saludable”, aseguró Guillermo Bustamante, directivo de AIDS Healthcare Foundation (AHF). Una muestra de la falta de esa educación sexual, dijo, es el incremento en el número de embarazos entre los adolescentes. “En México tenemos 68 embarazos por cada mil, mientras en Alemania son tres embarazos por cada mil y ha sido a consecuencia de no tener una información o educación suficiente, basta, científica”.

Eso se suma a otros prejuicios, como no poner al alcance de la población adolescente y de los jóvenes condones gratuitos. Recordó que antes de acceder a los preservativos, éstos suelen pasar por filtros médicos y responder preguntas del personal, lo cual provoca que disminuya su falta de confianza.

“Entre las causas por las cuales en esos grupos de edad no usan preservativos se identifica en primer lugar la falta de conocimiento de que el condón previene el contagio del VIH, luego la falta de dinero y en tercer lugar no lo usaron porque no lo tienen a la mano”, expuso

Bustamante. Añadió que uno de los mayores retos en nuestro país es lograr diagnósticos oportunos para evitar, más tarde, una carga al sistema de salud, puesto que las 369 mil 400 personas que viven con VIH-Sida en nuestro país apenas son siete de cada 10 portadoras doras del virus; “nos falta identificar a tres de cada 10 portadores”, dice.

Actualmente, menciona, seis de cada 10 que viven con VIH tienen acceso a un tratamiento antirretroviral y solo la mitad de los que viven con el virus lograron alcanzar la supresión viral, es decir, una mejor condición de vida.

Frente a la meta que planeó ONU-Sida para 2030, anticipa, “desde ahora podemos observar que México no cumplirá, porque tenemos que llegar a 95 por ciento de las personas diagnosticadas, mientras que de tratamiento tenemos que llegar también a 95 por ciento y nos faltan 34 puntos”.

“Donde vamos muy bajos es en el número de personas que alcanzaron supresión viral; ahí el rezago es de 41 por ciento”.

En entrevista por separado, Alaín Pinzón, activista y quien se convirtió en el símbolo de la lucha de quienes viven con VIH pero enfrentan el desabasto de medicinas y servicios médicos en nuestro país, aseguró que sigue siendo muy difícil que los adolescentes y jóvenes tengan acceso gratuito a los condones en los centros de salud del país.

“La brecha de acceso a esa herramienta de prevención es enorme en nuestro país por la desinformación y el estigma”.

Dijo que en este año “la mayor preocupación es el de las personas que han tenido que ser hospitalizadas porque se encuentran en etapa de Sida y no tienen servicio médico o no tienen acceso a retrovirales”.

Previo a la marcha que se realizará este día por el centro de la Ciudad de México para hacer visibles a las personas que viven con Sida, así como los que fallecieron por la falta de medicinas o diagnósticos, el activista indicó que “el testeo- diagnóstico sigue siendo pobre en términos generales, pero si se revisa en el caso de las entidades hay lugares como Veracruz o instituciones como el IMSS en dónde no hemos avanzado y son altos los niveles de serofobia (fobia a los seropositivos)”.

Ambos especialistas coincidieron que uno de los retos es reducir el tiempo de diagnóstico para un paciente, puesto que mientras en la clínica especializada de la Ciudad de México puede llevar 15 días, en el caso de las unidades del IMSS implica hasta 150 días y en las unidades médicas de las entidades por arriba de ello.

En el Día Mundial de la Lucha contra el Sida que se conmemora este 1 de diciembre, Censida dio a conocer que mientras en 2018 se aplicaron dos millones 659 mil pruebas para diagnosticar el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida, para 2021 sólo se hicieron dos millones 106 mil, es decir, 553 mil pruebas menos (20.8 por ciento).

MORTALIDAD

Las más recientes cifras del Inegi refieren que en 2021 fallecieron cuatro mil 662 pacientes con VIH, pero 40.3 por ciento de quienes murieron de enfermedades relacionadas con el virus no contaba con afiliación a una institución de salud.

Veracruz, Ciudad de México, Jalisco y Estado de México tuvieron mayor incidencia, mientras Aguascalientes, Tlaxcala y Zacatecas reportaron los más bajos casos.