Las continuas contingencias ambientales registradas en la capital del país en el presente año, luego de que autoridades locales declararon el regreso a la normalidad, tras la crisis sanitaria que se vivió por el Covid-19, son muestra de la fallida estrategia en materia ambiental impulsada por el gobierno local, reconocieron diputados de la fracción parlamentaria del PAN en el Congreso de la Ciudad de México.
Para la bancada de Acción Nacional, la capital del país va rápido en implantar un nuevo récord en la declaratoria de la fase 1 de contingencia ambiental, que afecta directamente la movilidad, al suspenderse la circulación de diversos vehículos de acuerdo al número terminal de las placas, cuando no se actúa a fondo de la causa del problema que representa la contaminación.
El diputado panista Aníbal Alexandro Cañez Morales, lamentó que la autoridad capitalina y el partido en el poder, Morena, aún no sepan cómo desarrollar la política pública en materia ambiental, pese a que la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo ya fue titular de la Secretaría del Medio Ambiente (SEDEMA) y se supondría que controla el tema.
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Consideró que el gobierno local es omiso a las propuestas sobre mejora ambiental que han presentado diversos sectores, no le apuesta a una política de cambio de estrategia en bien de la salud de los capitalinos.
Ante la aplicación, de nueva cuenta de la fase 1 de contingencia ambiental el Valle de México, Cañez Morales, quien preside la Comisión de la Agenda 2030 en el Congreso capitalino, recriminó que el gobierno de Sheinbaum sea omiso a las exigencias de actualizar las políticas de medio ambiente, con base a normas internacionales.
“Así como los planes y proyectos que permitan atenuar el impacto de contaminantes en la Ciudad de México, requerimos un estudio serio sobre los factores de contaminación que impactan en la capital”, expresó.
Refirió que el grupo parlamentario blanquiazul le demanda a la jefa de gobierno, como máxima autoridad de la ciudad, que levante la voz frente a la administración federal y exija el cierre de la Termoeléctrica en Tula, que se ha comprobado que genera más del 35 por ciento del dióxido de azufre que respiran los capitalinos.
“Solicitamos a Sheinbaum tomar con seriedad el compromiso de medio ambiente que tenemos como ciudad y como país, no puede ser que suframos nuevamente y respiremos veneno”, delineó.
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