Se llevó a cabo la “Reunión de Reconstrucción de Templos" con la participación de diversas instituciones involucradas en el proceso de intervención, restauración, obras, proyectos y protección de bienes muebles e inmuebles que resultaron afectados por el sismo del 19 de septiembre del 2017.
A la reunión asistieron el alcalde José Carlos Acosta Ruiz; la Coordinadora Nacional de Monumentos Históricos del INAH, Valeria Valerio Pie; la Coordinadora Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural del INAH, María del Carmen Castro Barrera; así como representantes de la Arquidiócesis Primada de México, sacerdotes de las capillas de los barrios y parroquias los pueblos de: San Luis Tlaxialtemalco, San Gregorio Atlapulco, Santa María Nativitas, Santiago Tulyehualco, Xaltocan y San Bernardino de Siena, así como de la Secretaría de Cultura, de la Zona Patrimonio, Mundial Natural y Cultural Xochimilco, Tláhuac, y Milpa Alta, entre otras instituciones.
Valeria Valerio destacó que la alcaldía Xochimilco, después de la Cuauhtémoc, fue la demarcación que presentó mayores daños en sus recintos religiosos, y dio a conocer que de los 33 inmuebles que visitaron, 30 son los que serán intervenidos. Para realizar las obras se recurrirá a dos bolsas de financiamiento por una parte del FONDEN en la atención de 27 recintos y tres con el seguro del INAH (capilla de San Lorenzo, San Salvador y Xaltocan).
Por su parte, el alcalde en Xochimilco, José Carlos Acosta Ruiz, señaló enfático "hago una solicitud urgente para la pronta calendarización y atención de las iglesias y capillas, un diagnóstico con fechas de intervención, ya que este es un reclamo generalizado de la comunidad, en virtud de que son quienes los mantiene vivos mediante las actividades religiosas".
Por último, el funcionario agradeció a las autoridades del INAH por esta reunión y fijó un plazo de 6 meses para realizar otra reunión y conocer los avances en los proyectos e inicio de obras en los recintos religiosos.
Para el diagnóstico participaron especialistas conformados por arquitectos restauradores, arqueólogos y antropólogos, quienes clasificaron los daños: 9 iglesias con daño severo; 8 moderado y 13 con daños menores.
