La denominada Ley Maple prosperó en el Congreso de la Ciudad de México, al haber sido avalado por las fracciones y asociaciones parlamentarias del órgano deliberativo, el dictamen dirigido a regular la actividad de guarderías, hospitales, paseadores, centros entrenamiento y establecimientos que se dedican al cuidado, salvaguarda, adiestramiento o pensión de animales de compañía.
Fue en octubre pasado cuando la iniciativa en la materia se presentó por la asociación parlamentaria Ciudadana del Poder Legislativo local, impulsada por la causa de Adriana, cuidadora del perro Maple, sociedad civil, activistas y más de 75 mil firmas de apoyo a través de la plataforma Change.org.
El coordinador de la denominada bancada naranja en el recinto de Donceles y Allende, Royfid Torres González, señaló que el logro también se debió al esfuerzo de legisladores , principalmente los que conforman la Comisión de Bienestar Animal en el Congreso, que fueron sensibles a la petición por parte de Adriana Mondragón, quien padeció y denunció haber recibido a Maple en cenizas, en una urna, sin explicación satisfactoria alguna y después de llevarlo a una guardería por un par de días, cuando el ser sintiente no padecía ninguna enfermedad que pudiera provocar su deceso.
Asimismo, el representante popular de Movimiento Ciudadano, se refirió al trabajo de todos los involucrados para dar este paso fundamental en el tema, al brindar seguridad y garantías a quienes dejan algún animal a resguardo en pensiones, veterinarias o escuelas de adiestramiento en la Ciudad de México.
“Reconocer el esfuerzo y la valentía de Adri, de Nydia y David, quienes confiaron en nosotros para llevar adelante su lucha; de la voluntad y el trabajo de la Comisión de Bienestar Animal, al ser sensibles y atender este tema, que busca dotar de certeza a los dueños y cuidadores, porque se trata también de garantizar los derechos a estas familias multiespecie”, declaró.
Con lo dispuesto por los diputados, los lugares en donde se atiende a las mascotas tienen que ser regulados, con el objetivo de dar seguridad tanto a los responsables como a los dueños de los animales y no vuelvan a suceder muertes sin explicación como de los perros Maple y Mixtli, así como de la gata Catapina.
La Ley Maple permitirá la creación de un padrón oficial de prestadores de servicios como escuelas y pensiones, para que las personas conozcan quién cuida a su mascota y que para hacerlo tengan registro.
A su vez, las 16 alcaldías tendrán que regular y supervisar a las pensiones y escuelas, asegurándose que cumplan con requisitos, como tener un veterinario disponible las 24 horas de los siete días de la semana e instalaciones adecuadas.
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Mientras, los paseadores, terapistas y entrenadores tendrán que contar con un permiso para poder realizar sus actividades.
La Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) de la Ciudad de México, deberá canalizar las denuncias de violencia animal a la autoridad judicial. Si una persona va a denunciar la tienen que recibir y atender adecuadamente.
Resulta que la Ley Maple también apuesta por la justicia restaurativa, en la que los violentadores de animales domésticos tendrán que asistir por lo menos a una jornada de convivencia con animales de apoyo emocional, además de las medidas adicionales que determine la ley.
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