Con playeras, collares, pulseras, cuadros y figuras de diferentes materiales, alusivas a San Judas Tadeo, llegaron miles de devotos hasta la iglesia de San Hipólito, ubicada en esquina entre avenida Hidalgo y Paseo de la Reforma, en el perímetro de la colonia Guerrero, en la alcaldía Cuauhtémoc, para venerar al ícono de la religión católica.
Como cada 28 de cada mes, los seguidores de San Juditas acuden al templo para agradecer los favores realizados y poder escuchar misa.
Mariachis y 17 misas
A partir de las 24:00 horas y a las 4:30 de la mañana, los fieles les cantaron las tradicionales mañanitas; las misas iniciaron desde las 5 de la mañana y seguirán hasta las 9 de la noche.
Son 17 misas durante el día que ofician en promedio 5 o 6 sacerdotes, entre ellos, un obispo. Para los que no pueden, las celebraciones religiosas se transmiten por sus redes sociales del Templo.
Las personas piden por su salud, por un trabajo, por la paz; que termine la violencia en México, mayor seguridad o bien vendrá agradecer la petición que le hicieron a San Juditas, por lo cual regalan imágenes, dulces, pulseras, collares, tortas, tamales; incluso habrá un señor que va a regalar tacos de pastor durante varias horas.
San Hipólito es visitado por fieles de la capital, Estado de México, Veracruz, Puebla, Chiapas, Oaxaca, así como extranjeros que pasan a visitar a San Judas Tadeo.
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"Es muy grande la fe que tenemos"
Entre los asistentes se encontraba la familia Moreno Jiménez, compuesta por seis integrantes, quienes vestidos con una playera blanca que tenía estampada la oración al santo y el nombre de cada uno, llegaron en peregrinación, cargando una figura de metro y medio, provenientes del Barrio de Marina Nacional, ubicado en el municipio mexiquense Tlalnepantla de Baz.
"Es muy grande la fe que tenemos. Hace como cinco años mi hermano se llevó la mano en una sierra, le pedimos y gracias a Dios, le quedaron todos los dedos completos", dijo el señor Gustavo, de oficio fabricante de cuchillos, quien acudió acompañado de su esposa Karina y sus cinco hijos, entre ellos Tadeo, de 11 años.
"Es el patrón de patrones", dijo Axel Armando de 20 años de edad, quien salió en peregrinación desde Villa Nicolás Romero, cargando una figura del santo tallada en un pequeño tronco que le regalaron. Después de 12 horas y tras recorrer más de 30 kilómetros, llegó a agradecer una petición concedida.
"Mi papá estuvo internado. Duró seis meses en coma. Gracias a San Judas Tadeo, la libró y se recuperó. Ahora hay que cumplir también las mandas", comentó el joven estudiante que con devoción acude cada año desde 2010.
"!Que la feligresía diga quien es el mero mero, el mero mero es el señor!", gritaban a coro los integrantes del la organización Bella Vista, provenientes de la colonia del mismo nombre ubicada cerca del Metro Tacubaya, en la alcaldía Álvaro Obregón. Entre el grupo de aproximadamente 30 personas, iba Alejandro, de 27 años de edad, quien con lentes tono metálico reflejante y una gorra negra, acudió a agradecer los favores concedidos.
"Le pedí para que saliera bien de una operación en mi ojo y así fue, ya me estoy recuperando. Nosotros tenemos más o menos 17 años viniendo por devoción", comentó el joven, mientras caminaba junto a sus acompañantes que cargaban una imagen de aproximadamente dos metros, haciéndose notar.
La fe católica se manifestó entre porras y júbilo, provocado el acostumbrado cierre de avenidas principales y caos vial en el pleno Centro de la CDMX, durante el día dedicado al santo, patrón y socorrista de quienes, según la feligresía católica, han llegado a sentir que todo está perdido.
Simbología de San Juditas
La llama, que llega en la cabeza, es la presencia o el don del Espíritu Santo Pentecostés, es amor, fuego que quema y que purifica, da amor y da nueva vida; el medallón en el pecho es que lleva a Jesús en su corazón, el báculo, bastón o garrote.
La historia señala que tras la conquista de Tenochtitlan, Hernán Cortés ordenó edificar un templo dedicado a San Hipólito y San Casiano, cuyas fiestas religiosas se conmemoran precisamente el día 13 de agosto, día de la caída de Tenochtitlan.
Fue construido en 1740; su fachada luce un par de relevantes torres ricamente ornamentadas en sus dos cuerpos, las cuales muestran la singularidad de estar “giradas” 45 grados respecto de la fachada, mientras sus bases lucen revestidas de hermosas ajaracas o elementos geométricos de influencia mudéjar. Con información de Patricia Carrasco
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