La Universidad Nacional Autónoma del Estado de México (UNAM) dio a conocer cinco medidas preventivas para evitar el contagio de enfermedades respiratorias entre la comunidad universitaria, esto luego de que en el país se reporta un incremento en casos de Covid-19 o influenza.
La máxima casa de estudios informó que a través del Programa Universitario de Investigación sobre Riesgos Epidemiológicos y Emergentes (PUIREE), detectó, como se anticipaba, la frecuencia de infecciones respiratorias por la temporada invernal se han incrementado, aunque descarta algún indicador que sugiera alarma.
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A través del informe compartido durante esta mañana, la UNAM aclara que, en su gran mayoría, los contagios son ambulatorios y no requieren hospitalización. “El número de las hospitalizaciones actuales es mucho menor al del invierno pasado”, se lee en el documento.
De esta forma, ante la reanudación de las actividades académicas en la Universidad durante la última semana de enero, emitió cinco recomendaciones para adoptar medidas preventivas a fin de evitar contagios y proteger a las personas más vulnerables.
¿Qué recomendaciones hizo la UNAM para evitar contagios al regreso a clases?
En primer lugar, y como es bien conocido por todos, la UNAM recomienda el uso del cubrebocas al estar con otras personas o en reuniones en espacios cerrados, especialmente, en lugares donde no hay una adecuada ventilación.
En segundo plano, en caso de presentar malestar por alguna infección respiratoria, la recomendación es a quedarse en casa y extremar precauciones, así como no automedicarse y buscar un diagnóstico, además de vigilar la evolución de la enfermedad a fin de evitar alguna complicación grave.
La tercera recomendación va dirigida a los grupos de mayor riesgo de complicación, adultos mayores, grupos con comorbilidades o mujeres embarazadas, a quienes se les sugiere tener dosis de refuerzo de cualquiera de las vacunas disponibles contra influenza y COVID-19.
En cuarto lugar, se recomienda tener ventiladas las aulas, auditorios y sitios de reunión (abrir puertas y ventanas), así como la higiene de las instalaciones.
Y finalmente, cuando se presenten casos de enfermedad coincidentes en un grupo académico o área de oficina, no suspender actividades y extremar las precauciones señaladas, siempre en estrecha comunicación con los responsables sanitarios de cada institución, entidad académica o dependencia.
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