Los Comedores Públicos para el Bienestar proporcionan alimentación gratuita para aquellas personas que, de otra manera, no tendrían acceso a una comida diaria, suficiente y nutritiva.
El número de comedores en operación se eleva sustancialmente en los meses de noviembre a febrero a consecuencia de la temporada de invierno, ya que está en función de la cantidad de alimentos demandada en la temporada.
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Más de 90 mil raciones servidas
En el periodo de 2019 a mayo de 2023 se han ofrecido 90,338,562 raciones alimenticias de la siguiente manera: 76,079,603 en Comedores Comunitarios para el Bienestar; 265,843 en los Comedores Consolidados; 5,837,153 en Comedores Públicos; 2,839,045 en Comedores Móviles para el Bienestar; 2,990,708 en Comedores Emergentes para el Bienestar, y 2,326,210 Bienestar en Temporada Invernal (cenas calientes).
El presupuesto acumulado ejercido durante 2019-2022 es de 1,341 millones. En 2023 el programa tiene un presupuesto programado de 350 millones.
Bajo la Sibiso
En el año 2020, los comedores públicos y comunitarios de la Ciudad de México se fusionaron en un solo programa social hoy denominado Comedores para el Bienestar, bajo la supervisión de la Secretaría de Inclusión y Bienestar Social (Sibiso).
Como parte de las nuevas modalidades, ya se venían operando un año atrás los Come-Móviles, como un mecanismo de atención a la población que va por atención médica a las zonas de hospitales y para quienes acompañan a las personas hospitalizadas.
También en el año 2020 se incorporó la modalidad del Comedor Consolidado para el Bienestar; con un modelo de administración sostenible que genera recursos propios mediante un modelo de autogestión a cargo de un Comité de Operación integrado por personas en situación de vulnerabilidad social y económica, con capacidad de producir más de 400 raciones de comida diariamente.
Los Comedores Comunitarios para el Bienestar trabajan con un enfoque de coproducción, ya que la responsabilidad en la prestación del servicio de alimentación es compartida entre el gobierno, personas u organizaciones de la sociedad civil.
El Gobierno de la Ciudad proporciona un apoyo económico, ya que no es un recurso efectivamente pagado a los operadores del comedor, sino un mecanismo para elaborar las raciones (compra de insumos en su totalidad).
Cualquier persona puede recibir un alimento cubriendo una cuota de recuperación de 11 pesos.
La operación de los comedores públicos es subsidiada por el Gobierno de la Ciudad.
La comida se prepara diariamente en tres cocinas industriales y se distribuye en un promedio de 70 puntos, y en la temporada invernal (de noviembre a febrero) hasta 150 puntos en total: instalaciones en espacios públicos, come-móviles ubicados en las inmediaciones de hospitales públicos, y comedores emergentes que se habilitan en caso de contingencias ambientales y/o sociales.
En temporada de bajas temperaturas los puntos de distribución se incrementan para llegar a zonas altas, céntricas y de población de alta vulnerabilidad.
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Comedores Populares
El programa Comedores Populares para el Bienestar tiene como propósito promover la participación ciudadana para ofrecer raciones alimenticias a quienes no cuentan con acceso a alimentos nutritivos, y que habitan y/o transitan en Unidades Territoriales con Índice de Desarrollo Social muy bajo, bajo y medio, a través de comedores operados por Comités de grupos solidarios.
De enero de 2019 a diciembre de 2022 se han beneficiado en promedio mensual 100,000 personas en los 101 Comedores Populares, con un costo de 11 por ración. De enero a julio de 2023, a través de 99 comedores se entregaron 3,019,962 raciones alimentarias.
Durante los cinco años de la presente administración se han proporcionado 24,702,913 raciones alimenticias, principalmente a grupos de atención prioritaria como son niñas, niños, adolescentes, madres solteras y personas con discapacidad a través de 99 comedores populares.
Centro de acopio y recuperación de alimentos de la Central de Abasto (ITACATE)
En México se desperdician aproximadamente 20.4 millones de toneladas de alimentos al año, lo que representa un desperdicio por persona de 170 kilogramos anuales.
En la Ciudad de México 1.6 millones de habitantes (17.8% de la población) carecieron de acceso adecuado a la alimentación durante el año 2020, mientras que en la Central de Abasto (CEDA) se desperdician ocho toneladas de alimentos diarias, lo que llevó a establecer un programa de acopio y redistribución de alimentos que permite recuperar productos perecederos en buen estado, pero que, por algún motivo, no tienen salida comercial.
Operación Itacate
El 26 de febrero de 2020 inició la operación del Centro de Acopio para la Recuperación y Donación de Alimentos denominado ITACATE.
Las acciones realizadas en una primera etapa se enfocaron en concientizar a los comerciantes de la CEDA de la importancia de donar los remanentes de productos en el área donde opera el Centro de Acopio.
De aquí se distribuyen a población vulnerable a través de los 491 comedores sociales del Gobierno de la Ciudad, así como a la Secretaría de las Mujeres de la Ciudad de México (Semuje-res). Durante estos cinco años realizamos el acopio de 735 toneladas de diversos productos perecederos en buen estado.
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