/ domingo 26 de febrero de 2023

Hundimiento de la Línea 4 deforma las vías del Metro

Un informe advierte que algunas estructuras emergieron hasta 17 centímetros, pero rechaza un riesgo

El tramo elevado de la Línea 4 del Metro tiene deformaciones en el sistema de vía y desplazamiento de trabes que dañan las conexiones entre los tramos Talismán-Morelos y Fray Servando-Santa Anita, reveló un informe de Consorcio IUYET.

La empresa firmó un contrato con el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, el 12 de julio de 2022, para llevar a cabo la "instrumentación, monitoreo y seguimiento topográfico del comportamiento del viaducto elevado de la Línea 4".

Los resultados del estudio, publicados en diciembre y a los que tuvo acceso El Sol de México, revelan que la Línea 4 del Metro, que va de Santa Anita a Martín Carrera, está ubicada en una zona en la que antiguamente estaba el lago de Texcoco, por lo que el tipo de suelo es blando y puede registrar deformaciones.

Esta situación causó que parte de la estructura del tramo elevado de esta ruta emergiera entre cinco y 17 centímetros, según el hundimiento por zona, pues abarca a las alcaldías Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza e Iztacalco.

“(La) cimentación tiende a emergercon magnitudes variables, lo que en ciertas zonas ha generado diversas afectaciones en mayor o menor grado, siendo el tramo de Bondojito-Consulado el más afectado, presentándose deformación en el sistema de vía, desplazamiento de trabes, dañando neoprenos y conexiones”, apunta el documento.

Consorcio IUYET señala que por el hundimiento, las estaciones Talismán, Bondojito y Consulado tienen desniveles en las conexiones de los edificios, las pasarelas (usadas para entrar al Metro y llegar al andén) y los apeaderos, en los que los usuarios esperan la llegada de los trenes. También hay daños estructurales y en muros de locales.

Aunque el documento detalla que el hundimiento del viaducto elevado es de entre 6.10 y 14.08 centímetros por año, aclara que no es de peligro en un futuro inmediato.

“Los hundimientos diferenciales se mantuvieron por debajo de 29 centímetros, cantidad que no es considerable, ya que la longitud de los andenes es de 150 metros y, por lo tanto, no causará problemas en la estructura a corto plazo”, revela el análisis de la empresa.

Aunque no hay un riesgo latente, la empresa determinó que el STC Metro debe llevar a cabo una revisión de la superestructura de la Línea 4, las condiciones actuales de los cimientos superficiales y bajo tierra.

Consorcio IUYET sostiene en el documento que las verificaciones que haga el organismo local a partir de los hallazgos que presenta ayudarán para proponer y definir soluciones a la problemática.

Por ello, el Metro comenzó a hacer diversos estudios sobre el comportamiento de la Línea 4 para llevar a cabo obras de mantenimiento correctivo.

El Sistema de Transporte Colectivo Metro informó a esta casa editorial que monitorea permanentemente el viaducto elevado para identificar posibles daños estructurales, los cuales, sostuvo, no ha habido.

“En este año se continuará con el monitoreo para dar seguimiento al comportamiento del viaducto y se llevarán a cabo labores para la restitución de los apoyos, mediante inyección de lodo fraguante, ello como medida preventiva y con la finalidad de contrarrestar los efectos de emersiones aparentes en zonas plenamente identificadas", señaló el organismo, que reiteró que no hay riesgos en la operación actual.

ACCIONES PARA PREVENIR

En 2021, luego del desplome del tramo elevado entre las estaciones Olivos y Tezonco, de la Línea 12 del Metro debido a fallas estructurales, el organismo llevó a cabo una revisión de las vías elevadas de su red.

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Como parte de las acciones para detectar alguna problemática en la estructura del sistema, el Metro firmó un contrato con Consorcio IUYET, S.A. de C.V. por un monto de 14 millones 531 mil 696.54 pesos.

El acuerdo fue para que la empresa mexicana especializada en ingeniería civil llevara a cabo los estudios pertinentes en la Línea 4 del Metro para detectar anomalías que representen un riesgo para la operación del transporte y para los usuarios.

El tramo elevado de la Línea 4 del Metro tiene deformaciones en el sistema de vía y desplazamiento de trabes que dañan las conexiones entre los tramos Talismán-Morelos y Fray Servando-Santa Anita, reveló un informe de Consorcio IUYET.

La empresa firmó un contrato con el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, el 12 de julio de 2022, para llevar a cabo la "instrumentación, monitoreo y seguimiento topográfico del comportamiento del viaducto elevado de la Línea 4".

Los resultados del estudio, publicados en diciembre y a los que tuvo acceso El Sol de México, revelan que la Línea 4 del Metro, que va de Santa Anita a Martín Carrera, está ubicada en una zona en la que antiguamente estaba el lago de Texcoco, por lo que el tipo de suelo es blando y puede registrar deformaciones.

Esta situación causó que parte de la estructura del tramo elevado de esta ruta emergiera entre cinco y 17 centímetros, según el hundimiento por zona, pues abarca a las alcaldías Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza e Iztacalco.

“(La) cimentación tiende a emergercon magnitudes variables, lo que en ciertas zonas ha generado diversas afectaciones en mayor o menor grado, siendo el tramo de Bondojito-Consulado el más afectado, presentándose deformación en el sistema de vía, desplazamiento de trabes, dañando neoprenos y conexiones”, apunta el documento.

Consorcio IUYET señala que por el hundimiento, las estaciones Talismán, Bondojito y Consulado tienen desniveles en las conexiones de los edificios, las pasarelas (usadas para entrar al Metro y llegar al andén) y los apeaderos, en los que los usuarios esperan la llegada de los trenes. También hay daños estructurales y en muros de locales.

Aunque el documento detalla que el hundimiento del viaducto elevado es de entre 6.10 y 14.08 centímetros por año, aclara que no es de peligro en un futuro inmediato.

“Los hundimientos diferenciales se mantuvieron por debajo de 29 centímetros, cantidad que no es considerable, ya que la longitud de los andenes es de 150 metros y, por lo tanto, no causará problemas en la estructura a corto plazo”, revela el análisis de la empresa.

Aunque no hay un riesgo latente, la empresa determinó que el STC Metro debe llevar a cabo una revisión de la superestructura de la Línea 4, las condiciones actuales de los cimientos superficiales y bajo tierra.

Consorcio IUYET sostiene en el documento que las verificaciones que haga el organismo local a partir de los hallazgos que presenta ayudarán para proponer y definir soluciones a la problemática.

Por ello, el Metro comenzó a hacer diversos estudios sobre el comportamiento de la Línea 4 para llevar a cabo obras de mantenimiento correctivo.

El Sistema de Transporte Colectivo Metro informó a esta casa editorial que monitorea permanentemente el viaducto elevado para identificar posibles daños estructurales, los cuales, sostuvo, no ha habido.

“En este año se continuará con el monitoreo para dar seguimiento al comportamiento del viaducto y se llevarán a cabo labores para la restitución de los apoyos, mediante inyección de lodo fraguante, ello como medida preventiva y con la finalidad de contrarrestar los efectos de emersiones aparentes en zonas plenamente identificadas", señaló el organismo, que reiteró que no hay riesgos en la operación actual.

ACCIONES PARA PREVENIR

En 2021, luego del desplome del tramo elevado entre las estaciones Olivos y Tezonco, de la Línea 12 del Metro debido a fallas estructurales, el organismo llevó a cabo una revisión de las vías elevadas de su red.

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Como parte de las acciones para detectar alguna problemática en la estructura del sistema, el Metro firmó un contrato con Consorcio IUYET, S.A. de C.V. por un monto de 14 millones 531 mil 696.54 pesos.

El acuerdo fue para que la empresa mexicana especializada en ingeniería civil llevara a cabo los estudios pertinentes en la Línea 4 del Metro para detectar anomalías que representen un riesgo para la operación del transporte y para los usuarios.