Julia Sánchez es vagonera del Metro desde hace 22 años, con este trabajo ha logrado sacar a sus hijos adelante; ahora denuncia que vive en un clima de persecución y acoso en su actividad, por lo que pide a las autoridades del STC que la dejen trabajar en los vagones de este sistema de transporte, ya que de manera frecuente las mujeres son sujetos de extorsión y detenciones arbitrarias de la policía bancaria y auxiliar y terminan detenidas en el Torito.
Las multas por ejercer comercio ambulante en el STC están en 975 pesos; “pero para ayudarlas”, sólo pagan entre 200 y 300 pesos para que puedan salir, pero antes ya las detuvieron entre 3 y 5 horas.
Te recomendamos: No se permitirá instalación de vendedores en el Metro aseguró Sheinbaum
Ante la prohibición de realizar el comercio en los vagones y ver que a las feministas las dejaron armar un tianguis en los pasillos del Metro, ella y decenas de sus compañeras se sumaron a esa vendimia, junto con las denominadas "mercaditas autogestivas" que tomaron ese medio de transporte, narró en entrevista con La Prensa.
La señora Julia, quien forma parte de las millones de mexicanas que se dedican a la economía informal, al igual que las mujeres en Lucha contra la Violencia Económica, y por lo menos durante 6 meses si tuvieron mejores ventas en los pasillos, sin que se las llevaran los cuerpos policiacos.
Ella se integró a la colectiva “Leonas en Manada” que vendía en Taxqueña, “aprovechándose que hubo oportunidad de tomar el Metro, por los estragos económicos que ha dejado la pandemia”
Ha trabajado durante 18 años en la Línea 3, aunque comenzó en la Línea B donde duró 4 años, destacó.
Julia y las cerca de 120 vagoneras en varios turnos, que trabajan en la Línea 3 solicitan a las autoridades del Metro y del gobierno local que las dejen trabajar dignamente, “les den la oportunidad de darles unos espacios, ya que a través del tiempo hemos visto muchos locales vacíos, que tienen años cerrados, así como las llamadas latas, de nueva creación también están cerradas”.
Sería bueno que nos permitieran vender en esos espacios, con una renta social, que ahora están cerrados para dejar de sentir esa incertidumbre de las persecuciones de que son sujetas. Sabemos que cometemos una falta cívica, lo cual no es un delito, pero si la gente vende en el Metro es porque tiene necesidad de trabajar
Que nos dejen trabajar, insistió, ya sea como vagoneras o en los pasillos, pero sin persecución policial y sin ser criminalizadas.
Describió que en la estación Centro Médico, varias vagoneras se reúnen porque hacen sus tandas, no estaban con mercancía, ni estorbando el paso, pero como ya las conocen los policías que son vendedoras, fueron por ellas y se las llevaron esposadas.
"También conocen a los carteristas y rateros que andan en el Metro y a ellos si los dejan ir”, denunció.
Afirmó que infinidad de veces la ha detenido, “hace un año se sentía mal, estaba esperando a uno de sus hijos, llegaron le dijeron que iban a hacer una revisión, “yo le respondí y porque si no estoy en el vagón, no estoy vendiendo y mis cosas las tenía guardadas, pero me dijeron eres vendedora”, relató.
Ese día la llevaron esposada con las manos hacia atrás y con su mercancía, se le bajó la presión, se desmayó, luego la sacaron de la delegación y la dejaron en la calle.
“En otra ocasión iba de paseo, no llevaba mercancía, sino unos dulces para mi nieto, de la misma manera, porque ya nos conocen que somos vagoneras y abusan”, describió.
No olvides seguirnos en Google Noticias para mantenerte informado
La señora Sánchez aseguró que a ellas ya no ponen resistencia cuando las detiene los uniformados, porque si no les fabrican un delito, como resistencia a particular, robo, portación de droga y por mínimo los llevan tres días a Santa Martha Acatitla, a las mujeres, y al Reclusorio Oriente, a los hombres.
También puedes leer: Lucha por espacios entre vendedores ambulantes dentro del Metro problema latente
Adelantó que se van a sumar a las protestas del día Internacional de la Mujer el próximo 8 de marzo, principalmente, van a reclamar tener un trabajo digno, “queremos trabajar sin ser perseguidas, criminalizadas, sin ser hostigadas sexualmente o agredidas'', resaltó Julia.
Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem