En el marco del 12 de octubre, el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México, (COPRED) convocó a promover y respetar los derechos fundamentales de los pueblos indígenas y afromexicanos, y a eliminar toda forma de racismo, exclusión y menosprecio, así como avanzar en la construcción de políticas públicas interculturales que eliminen prácticas racistas.
Las razas humanas no existen. El racismo es una construcción social que funcionó durante la colonia –y sigue funcionando- como una herramienta de control desde el privilegio que propone una supuesta superioridad moral, civilizatoria, estética e intelectual para clasificar y jerarquizar el valor de la vida humana de acuerdo con la pertenencia a un grupo poblacional, o lo que se denominó “razas”.
A partir de ello, se utilizó el “mestizaje” como la vía de "mejora de la raza”, apelando a una supuesta uniformidad de las y los mexicanos invisibilizando la existencia de comunidades e identidades indígenas y afromexicanas.
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Por ello, desde este Consejo trabajamos para desmitificar esta idea normalizada que reproduce sistemas de desigualdad y opresión hacia distintos grupos indígenas y afrodescendientes en lo particular, y en lo general, hacia las personas morenas o con fenotipo asociado a identidades indígenas o afro.
De acuerdo con los resultados de la Encuesta sobre discriminación en la Ciudad de México (EDIS 2021) realizada por este Consejo, la percepción del grupo más discriminado en la capital del país recae en las personas de piel morena, seguido de las personas indígenas en segundo lugar.
En el mismo sentido, este Consejo atiende las denuncias por discriminación asociada a prácticas racistas en cualquier espacio público o privado de la Ciudad. Reiteramos que el racismo existe y es necesario y urgente no solo hablar de ello, sino denunciarlo y eliminarlo.
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En un comunicado recordó que durante siglos, esta fecha estuvo asociada a la colonización y a la idea del “mestizaje”, como procesos civilizatorios y positivos para los países de América Latina y, tan solo recientemente, se ha convertido en una oportunidad para cuestionar estas ideas, así como para dignificar y reivindicar los derechos de los pueblos originarios históricamente vulnerados.
“Desde el COPRED, insistimos en la necesidad de visibilizar y reconocer la diversidad humana como una fortaleza que construye sociedades más incluyentes para que nadie, por ninguna circunstancia, reciba un trato discriminatorio, pues los derechos humanos se deben respetar de manera integral, sin importar origen, tonalidad de piel, nivel socioeconómico, o lugar de procedencia”, agregó.
Finalmente destacó que el 12 de octubre debe mover a la reivindicación de los pueblos originarios y a la lucha para erradicar el racismo como sistema de opresión presente hoy día en nuestra sociedad.
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