Con la llegada de septiembre y ante la cercanía del día 19, Enrique Guevara Ortiz, Director General del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) aclaró que es contundente que los sismos no se pueden predecir y ha sido coincidencia que ocurran el mismos día y la misma fecha y en diferentes años.
El especialista mencionó que si se toma un periodo más amplio, cualquier día del año tiene las mismas probabilidades que ocurran varios sismos en ese mismo día y además sismos grandes.
“La historia sísmica de nuestro país en el planeta se remonta a miles de años, cuando vemos en una escala de tempo mayor, las probabilidades son altas de que ocurran el mismo día varios temblores, si únicamente nos remontamos a unos cuantos años pues entonces todos si nos alertamos y no creemos que es coincidencia pero coincidirán conmigo los sismólogos, los geofísicos que no se pueden predecir y esto ha sido simplemente coincidencia”.
Guevara Ortiz detalló que estadísticamente, el mes y la historia que lleva registro de los sismos y el mes que más sismos fuertes ha registrado es diciembre.
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Sismológico Nacional
Sobre este mismo tema, Arturo Iglesias Mendoza, jefe del Servicio Sismológico Nacional mencionó que depende del umbral de magnitud que se tome, se obtienen diferentes resultados.
“Hace poquito hay una publicación donde analizan el catálogo del Sismológico Nacional que tenemos publicado y si en ese catálogo se toma un umbral de magnitud 5 pues hay un pico en septiembre aparentemente donde ocurre más sismicidad”.
Se disparan las estadísticas
El experto mencionó que tomar una magnitud de 5 es un problema importante pues resulta que algunos de los sismos grandes, que algunos de ellos han ocurrido en septiembre, tienen muchas réplicas y entonces se disparan las estadísticas.
“El sismo de 19 de septiembre tuvo muy poquitas réplicas, tuvo una docena de réplicas, pero el sismo del 7 de septiembre que ocurrió en Tehuantepec tuvo miles de réplicas, muchas de ellas todavía en septiembre, esta cuestión de los sesgos del calendario es realmente muy engañosa”.
Y agregó: “Más allá de los números, desde el punto de vista de sismología nosotros no vemos porqué podrían ser más en septiembre o en diciembre, si tuviéramos una cuestión que pudiéramos ver que están asociados a las lluvias o a la falta de lluvias o a inclusive a las mareas terrestres o a la influencia del sol, lo diríamos sin ningún problema pero no lo vemos”.
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