Este domingo se jugaron las finales de conferencia en la temporada 100 de la NFL, las cuales nos dejaron a los dos equipos que disputarán el Super Bowl, el próximo 2 de febrero, Kansas City y San Francisco, pero ¿qué fue lo que hicieron estos equipos para lograr el campeonato de conferencia?
MAHOMES, Y UNA OFENSIVA EXPLOSIVA
Jefes de Kansas City fue el primer equipo en meterse al Super Bowl, la clave fue el desempeño de Patrick Mahomes durante los cuatro cuartos, por un lado, por el otro la presión ejercida de la línea defensiva sobre la línea ofensiva de los Titanes, una de las mejores de la liga.
Patrick Mahomes completó 23 pases de 35 intentos para 294 yardas y tres anotaciones, con un promedio de 8.4 yardas por pase. La victoria de Kansas se concretó luego que el plan de juego desde el principio fue darle libertad a Mahomes de acarrear el balón, añadiendo que Titanes sólo presionaba con cuatro jugadores y tener más hombres en el perímetro para evitar cualquier pase largo.
Sirvió, sin embargo, pocas veces. Patrick tuvo un hombre que lo siguiera para todos lados, por lo que tras cuatro o cincos segundos sin encontrar receptor libre, optaba por correr y conseguía yardas fácilmente. Mahomes consiguió 53 yardas, en ocho acarreos.
Por su parte, la defensiva comandada por Tyrann Mathieu en lo profundo, Damiel Wilson en la zona de backers y Frank Clark en la línea frontal, pusieron en apuros a la línea ofensiva de los Titanes, una de las mejores de toda la liga; eliminaron por completo el juego terrestre de Derrick Henry, dejándolo sólo con 69 yardas en 19 acarreos, provocaron que Ryan Tannehill buscara avanzar por aire, y al no tener un “playmaker” como Kelce, Watkins y Hill de Kansas, se le complicó todo el panorama.
JIMMY G, CON LO JUSTO Y NECESARIO
Lo hecho por San Francisco en la final de conferencia no es nada nuevo, la defensiva se mantuvo a tope durante los cuatro cuartos, a tal grado de vencer a Rodgers, un mariscal de campo que pelea hasta el último segundo.
¿Cómo es que un quarterback con menos de 10 pases lanzados gana un partido? La respuesta está en Raheem Mostert, que consiguió 229 yardas en 19 acarreos y cuatro anotaciones; Jimmy G sólo tuvo seis pases completos de ocho intentos para 77 yardas.
Lo interesante es que San Francisco destrozó a la defensa de Green Bay con un “playbook” terrestre muy básico, zonas de ambos lados, jugadas de trampas y directas. Bastaba un pequeño espacio para que Raheem promediara 7.6 yardas por carrera.
Del otro lado, la defensiva sólo permitió 62 yardas por tierra y al hacer que Green Bay nunca pudiera concretar el juego terrestre y obligarlos a lanzar, el perímetro de San Francisco se portó a la altura y evitó cometer errores.
La presión de Nick Bosa, probable novato defensivo del año, sobre Aaron Rodger fue fundamental para que la ofensiva de Green Bay no pudiera carburar.
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