Todo parece indicar que sí habrá cambios en la Procuraduría Federal del Consumidor, que a finales de mayo dio a conocer a sus delegaciones que desaparecerían para convertirse en Oficina de Defensa del Consumidor, al menos así ocurrió en Tabasco, donde esta nueva Odeco entraría en vigor a nivel nacional.
Esto quiere decir que las atribuciones de esta oficina protectora del consumidor podrían transformarse, ya sea para ampliarse o reducirse, con eso de que en esta transformación parece que la búsqueda es cambiar todo de nombre, como si con eso se borrara todo lo hecho por gobiernos anteriores.
Y no es que la población quiera vivir en el pasado o que sea corrupta, sino que conocía un camino en cuanto sufría la irregularidad de una negociación, o bien algún servicio dejaba qué desear.
Estos cambios han retrasado la justicia que buscan algunos compradores o pagadores de bienes y servicios, quienes ya no tienen la atención que requieren, porque, en efecto, estas oficinas de la hasta ahora Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), ta anuncian su cierre.
Así lo anunció la ubicada en Periférico, al sur de la Ciudad de México, donde ya no reciben quejas y están canalizando a usuarios a otra oficina.
Así lo indicó a La Prensa una lectora, quien resaltó que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) le notificó hace poco que debía pagar una multa por la cantidad de 66 mil 500 pesos, debido a que fue hallado un "diablito" en una de sus propiedades en 2013.
Aunque ella alegó que han pasado seis años, la respuesta en la CFE fue la de siempre, pague y luego hablamos.
Pero ella buscó el amparo de la Procuraduría Federal del Consumidor, donde le indicaron que estaba en vías de desaparecer y su próxima cita ya no sería en esta oficina de Periférico Sur, sino en la defensoría de Bucareli.
Es decir, que debía presentarse al Instituto Federal de Defensoría Pública, que es a donde están enviando a los clientes de Profeco, aunque oficialmente no se ha dicho mucho al respecto.
@Antoniodemarcel
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