Nuevo León recibió el año nuevo 2022 con tres ejecuciones, y cerró el 2021 con mil 58 homicidios, la cifra más alta al menos en los últimos cuatro años.
En este inicio violento apenas entró el año nuevo en el cruce de las calles Orto y Thompson, en el Barrio Moderna, en el norte de Monterrey, fue dejada una hielera que contenía la cabeza de una mujer.
Junto al recipiente se dejó el cuerpo de la víctima envuelto en una cobija, además de una bolsa de plástico con más restos humanos.
La mujer podría haber tenido entre 30 y 35 años de edad.
Por otro lado, al sur de la Ciudad las calles Cerrito y Presidencia Municipal Sur, de la Colonia Ignacio Altamirano, fueron ejecutados un padre y su hijo cuando celebraban la llegada del 2022.
Hombres armados llegaron y dispararon contra los hombres y al parecer habrían dejado heridas a dos personas.
Y en Cadereyta, unos 30 kilómetros al oriente de Monterrey en la Colonia Lázaro Cárdenas, un hombre fue ejecutado y otra persona lesionada cuando irrumpió un comando armado en la vivienda.
Para el secretario de Seguridad Pública estatal, Aldo Fasci Zuazua, es necesario bajar los números para poder generar una percepción de tranquilidad en la sociedad.
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"La seguridad es una percepción: es sentirte seguro o inseguro. Puede que haya un solo delito, un magnicidio que ponga a temblar a todo el mundo, o puede haber muchos y te acostumbras, como pasa en otros territorios", afirma.
Acepta que en el año que terminó se reflejaron los dos extremos de la violencia, la de género y el otro es que se rompió la raya de los mil muertos, que son demasiados.
Para el 2022 éstos serán los temas fundamentales a enfrentar son violencia de género, delitos sexuales y el de los homicidios que es muy complejo.
En 2018 se registraron 825 homicidios, 956 en 2019 y 914 en 2020, pero 2021 superó con mil 58, según datos de la Fiscalía de Justicia.
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