Tula, Hidalgo.- A tres días de las intensas inundaciones en el centro de Tula, militares y civiles se organizan para retirar las cientos de toneladas de lodo negro que aún permanecen al interior de comercios , viviendas y lugares públicos.
Del mismo modo, personal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ingresó al Hospital General Zona 5 y arrancó las labores de limpieza coadyuvados por personal del Ejército Mexicano.
La mañana de este viernes, el nivel del agua disminuyó casi en su totalidad -en la zona con más afectaciones, ubicada a unos pasos del Río Tula- lo que permitió que la comunidad pudiera ingresar sin poner en riesgo su integridad.
"Lo único que nos urge ahorita es que vengan a vacunarnos y a desinfectar nuestros espacios, porque estamos en contacto directo con el agua que queda y el lodazal", sostuvo el señor Mario, propietario de un café Internet ubicado en la calle 5 de Febrero.
Elementos del Ejército Mexicano -desplegados en el territorio hidalguense luego de activarse el plan DN III- dieron la instrucción de traspalear el lodo y objetos inservibles a la vía pública, ya que en las próximas horas llegarán retroexcavadoras y camiones de volteo para retirar los escombros.
Paralelamente, cuadrillas de paramédicos de la Cruz Roja Mexicana realizaron rondines en los barrios aledaños a la zona afectada y entregaron pastillas de cloro para que los vecinos puedan desinfectar el agua.
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Representantes del municipio colocaron dos módulos de registro en la Plaza del Nacionalismo y en el auditorio del Palacio Municipal para que los afectados se registren en una base de datos y en las próximas semanas puedan recibir apoyos económicos.
Poco antes del mediodía, dos decenas de trabajadores de la Secretaría de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX) arribaron a la comunidad con apoyo de camiones Vactor y cuatro equipos de bombeo para desasolvar el drenaje.
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