/ miércoles 15 de abril de 2020

Controlan intento de motín en penal de Cuautitlán

Elementos de la SSEM y de la Guardia Nacional controlaron a los reclusos

Luego de varias horas de fuerte tensión, la misma noche de ayer, alrededor de las 8 de la noche, elementos de la SSEM y de la Guardia Nacional controlaron el intento de motín que internos buscaban realizar y familiares de estos, en protesta por la suspensión de visitas que ordenaron autoridades del penal para evitar contagios del coronavirus.

El conflicto inicio minutos antes de las seis de la tarde, cuando decenas de familiares comenzaron a congregarse afuera del penal e intentaban ingresar por la fuerza al penal para saber cuál era el estado de salud de sus familiares internos, ya que por los medios de comunicación se habían enterado que algunos de los recluso se habían contagiado con el coronavirus y que incluso habían sido trasladados el penal Neza-sur, donde se había adaptado un área especial para atender a estos enfermos.

Foto: Cortesía

Aunado ello, la inconformidad que surgió entre los familiares fue cuando autoridades del penal dieron a conocer que como medida de seguridad para evitar más contagios se suspendían las visitas familiares.

Esto desató la ira de los familiares y de los mismo internos que a manera de presión para echar abajo esta decisión y saber a ciencia cómo estaba la situación dentro del penal, en torno a la propagación del coronavirus, trataron de amotinarse y causaron una serie de desmanes en el exterior y por todos los medios trataban de entrar al Centro de Readaptación Social para saber cuál era el estado de salud de sus familiares y si no estaban contagiados con el Covid-14.

Debido a que la situación se estaba volviendo tensa y corría el riesgo de salirse de control, más de 150 policías estatales, municipales y de la Guardia Nacional se presentaron en el lugar para poner orden y aunque algunos enfrentamientos con los familiares de internos, jaloneos y empujones finalmente después de dos horas controlaron la situación, sin que la sangre llegara al río.

Foto: Cortesía

Pero no obstante ello, familiares de los internos siguen preocupados y exigen a las autoridades penitenciarias que se les diga cuál es el estado de salud de sus familiares internos y cuál es la situación que prevalece al interior del penal, en torno a la propagación del Covid-14 y si hay posibilidad de que los reclusos se puedan infectar con este virus.

Luego de varias horas de fuerte tensión, la misma noche de ayer, alrededor de las 8 de la noche, elementos de la SSEM y de la Guardia Nacional controlaron el intento de motín que internos buscaban realizar y familiares de estos, en protesta por la suspensión de visitas que ordenaron autoridades del penal para evitar contagios del coronavirus.

El conflicto inicio minutos antes de las seis de la tarde, cuando decenas de familiares comenzaron a congregarse afuera del penal e intentaban ingresar por la fuerza al penal para saber cuál era el estado de salud de sus familiares internos, ya que por los medios de comunicación se habían enterado que algunos de los recluso se habían contagiado con el coronavirus y que incluso habían sido trasladados el penal Neza-sur, donde se había adaptado un área especial para atender a estos enfermos.

Foto: Cortesía

Aunado ello, la inconformidad que surgió entre los familiares fue cuando autoridades del penal dieron a conocer que como medida de seguridad para evitar más contagios se suspendían las visitas familiares.

Esto desató la ira de los familiares y de los mismo internos que a manera de presión para echar abajo esta decisión y saber a ciencia cómo estaba la situación dentro del penal, en torno a la propagación del coronavirus, trataron de amotinarse y causaron una serie de desmanes en el exterior y por todos los medios trataban de entrar al Centro de Readaptación Social para saber cuál era el estado de salud de sus familiares y si no estaban contagiados con el Covid-14.

Debido a que la situación se estaba volviendo tensa y corría el riesgo de salirse de control, más de 150 policías estatales, municipales y de la Guardia Nacional se presentaron en el lugar para poner orden y aunque algunos enfrentamientos con los familiares de internos, jaloneos y empujones finalmente después de dos horas controlaron la situación, sin que la sangre llegara al río.

Foto: Cortesía

Pero no obstante ello, familiares de los internos siguen preocupados y exigen a las autoridades penitenciarias que se les diga cuál es el estado de salud de sus familiares internos y cuál es la situación que prevalece al interior del penal, en torno a la propagación del Covid-14 y si hay posibilidad de que los reclusos se puedan infectar con este virus.