Agentes de la Policía de Investigación (PDI) detuvieron a Abelardo "N", un adolescente de 17 años, por su presunta participación en la muerte de su primo, el pequeño Fredy.
El menor de ocho años de edad murió en el Hospital Infantil de Cuautepec a consecuencia de golpes contusos y quemaduras que presuntamente recibió de manos de sus asesinos. Una tía del pequeño dijo a la policía que se salió de su casa y lo encontró mal herido en la calle Del Carmen en la Colonia del mismo nombre en la Alcaldía Gustavo A. Madero.
Un día después, fue detenida la tía y el tío de un niño. El vocero de la dependencia, Ulises Lara López, detalló que "se estableció la probable participación de Flor "N" y Rogelio "N”, en el delito de homicidio calificado en agravio del pequeño, de quien ambos son familiares indirectos".
A consecuencia de las investigaciones por agentes de la Policía de Investigación (PDI), el Ministerio Público de la Fiscalía de Justicia Penal para Adolescentes, de la Coordinación General de Investigación de Delitos de Género y Atención a Víctimas, solicitó y obtuvo de un juez especializado, otra orden de aprehensión contra Abelardo "N", que se cumplimentó la tarde de este viernes.
Dictan prisión preventiva contra tíos
Un juez de control dictó prisión preventiva oficiosa contra Flor "N" y Rogelio "N” por su probable participación en el delito de homicidio calificado en agravio de Fredy.
La Fiscalía capitalina informó que la defensa de ambas personas solicitó la duplicidad del término constitucional, por lo que la próxima semana continuará la audiencia para determinar la situación legal de los presuntos involucrados.
Fredy no convivía con vecinos
Vecinos de la familia de Fredy manifestaron no conocer bien a los integrantes de la misma, pues no convivían mucho con ellos.
"Yo lo que llegué a ver es que los papás del niño son muy de hacer sus reuniones, toman y ponen música. Luego los niños andan por ahí solos y ellos no están al pendiente de lo que pueda pasarles", dijo una señora que monta un puesto de dulces diariamente, cerca de donde vivía el niño.
"El niño creo que se lo trajeron de la sierra, que según escuché, que de por Hidalgo. Allá creo que tienen más familia. Sus tíos viven por el rumbo, pero no sé exactamente donde", comentó la mujer, mientras quitaba de la mesa su mercancía, y la guardaba en bolsas de plástico.
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"Pues nosotros no los conocemos bien, aquí hay mucha gente que viene a rentar unos días y luego ya no los ves. Yo la verdad no vi nada raro, ni que lo hayan venido a aventar ni nada", dijo un hombre de unos 50 años de edad, que vive frente a las bombas de agua donde supuestamente fue hallado el cuerpo.
Una señora que se acercó a platicar con los dueños de una frutería que está frente al callejón donde apareció el pequeño Fredy, comentó "Se me hace muy raro todo, no sé cómo pudo haber parecido ahí de la nada, hasta hoy vimos muchos policías, que según investigando".
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