El consumo per cápita de agua en la Ciudad de México se estima en 200 litros por persona al día; sin embargo, este promedio desciende hasta 20 litros por persona al día en aquellas colonias que reciben agua por tandeo o pipas.
De acuerdo con datos oficiales del gobierno de la Ciudad de México, alrededor del 20% de la población capitalina recibe agua por tandeo; sin embargo, este porcentaje podría ser de 26% e incluso mayor, señaló David Mark Vargas, presidente y co-fundador de Isla Urbana, proyecto dedicado a captar agua de lluvia.
A ese consumo per cápita se debe agregar el 40% de agua que se pierde en fugas, por lo que realmente estamos trayendo de los acuíferos alrededor de 350 litros por persona al día, explicó David Mark Vargas.
Hay colonias de Azcapotzalco, la zona alta del Ajusco, Xochimilco e Iztapalapa que viven con alrededor de 80 a 100 litros por persona al día, donde el agua les llega por tandeo o pipas, señaló David Vargas al destacar que, incluso, hay zonas donde el consumo diario es de 20 litros por persona.
Explicó que esto ocurre en colonias donde el abasto es a través de tambos. “Aquí pasan las pipas que llegan los tambos, en esas colonias las familias viven con 4 tambos a la semana; es decir, 800 litros para siete días, para cinco personas, lo que significa un consumo de 20 litros al día per cápita”, precisó.
“No estamos hablando de África o una comunidad remota de la sierra de Oaxaca, estamos hablando de la Ciudad de México, donde hay familias que están viviendo con 20 litros de agua por persona al día, lo que afecta actividades de limpieza del hogar, lavado de trastes y ropa, higiene personal, alimentación, calidad de vida, desarrollo escolar, profesional y laboral, lo que cierra el círculo de pobreza, explicó.
CRISIS HÍDRICA
El presidente del proyecto Isla Urbana, David Mark Vargas expresó que México enfrenta una crisis hídrica. En grandes zonas del país, incluyendo el Valle de México, la situación es crítica. El Banco Mundial y Conagua proyectan enormes déficits de agua para el 2030, empeorando gravemente el acceso para millones de personas.
Hoy mismo, al menos 250 mil personas en la CDMX ni siquiera tienen conexión a la red. Irónicamente, mientras nuestra ciudad sufre cada vez más escasez, cada año miles de millones de litros de agua de lluvia simplemente van al drenaje o causan inundaciones, siendo que esta agua puede ser utilizada.
Durante los meses del confinamiento por la pandemia, el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM coordinó un estudio en el que se afirma que 32.8% de la población que habita la Zona Metropolitana del Valle de México recibe agua en su vivienda algunos días, mientras que 66.5% declaró recibirla todos los días.
En el caso específico de la Ciudad de México, alrededor de 13.8% de la población encuestada mencionó que el servicio de agua en su vivienda es intermitente, mientras que 85.9% señaló que tiene el servicio todos los días.
Dicho estudio señala que para contribuir a una mayor sanidad y garantizar el abasto de agua en hospitales y clínicas de salud que se consideraron prioritarios, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) promovió un contrato para la instalación de una planta potabilizadora en Tláhuac, aportó dinero para la habilitación de pozos ubicados en el Estado de México y aumentó la distribución del agua mediante pipas.
No obstante, el estudio del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM señala que la crisis sanitaria y económica derivada de la Covid-19 acrecentó problemas estructurales de una sociedad caracterizada por una fuerte desigualdad, de manera que la población en situación de pobreza o que carece de un suministro seguro en su vivienda está en condiciones de mayor adversidad para enfrentar los diferentes problemas que ha representado la pandemia.
¿QUÉ ES LA CAPTACIÓN DE AGUA DE LLUVIA?
Los sistemas de captación de agua de lluvia funcionan a través de canaletas que luego de pasar por diversos filtros llegan a un tanque de almacenamiento. El agua no es para consumo humano, pero tiene la calidad adecuada para darle distintos usos, como es el lavado de manos, uso en instalaciones hidrosanitarias o labores de limpieza.
David Mark Vargas, presidente de Isla Urbana, explicó en entrevista con LA PRENSA, luego de la entrega del proyecto “Escuela de Lluvia”, en la escuela primaria Kioto de la colonia Tezozómoc, alcaldía de Azcapotzalco, que el objetivo de esta iniciativa es garantizar el acceso adecuado al agua, sobre todo, en zonas de la ciudad que tradicionalmente enfrenta problemas de suministro.
Explicó que a través de esta instalación se podrán captar y almacenar alrededor de 25 mil litros de agua de lluvia y un promedio de 200 a 250 mil litros al año, lo que permitirá garantizar el suministro en un periodo de cinco a ocho meses durante la temporada de lluvias.
Durante la entrega del proyecto Escuela de Lluvia, ante la presencia de la alcaldesa de Azcapotzalco, Margarita Saldaña, se informó que a través de esta instalación de captación de agua pluvial, lavamanos “wash” y un programa educativo enfocado al cuidado del agua e higiene, se beneficiarán más de 400 alumnos, maestros y padres de familia de la Escuela Primaria Kioto.
Explicó que para tener agua durante la temporada de sequía se requiere una mayor capacidad de almacenamiento; sin embargo, comentó que el sistema baja el consumo anual hasta en un 50%.
Informó que alrededor de 200 escuelas de la Ciudad de México ya cuentan con este tipo de sistemas de captación de agua de lluvia, principalmente de las alcaldías Tlalpan, Iztapalapa y Milpa Alta. A nivel nacional hay 100 más.
Indicó que el proyecto Escuelas de Lluvia es parte del proyecto de Isla urbana, que lleva 13 años instalando sistemas de captación de agua de lluvia. “Tenemos más de 23 mil sistemas de captación instalados en viviendas, más que nada en la Ciudad de México”, explicó.
“El agua se capta en los techos, de ahí pasa a un sistema de canaletas y tuberías, por lo que los únicos requisitos son tener un techo limpio y un espacio adecuado para tener un almacenamiento”, indicó.
David Mark Vargas explicó que en unidades habitacionales no es viable instalar este tipo de sistemas, debido a que “hay muy poco techo para un gran número de habitantes”, por lo que el sistema resulta más viable en escuelas, viviendas unifamiliares e incluso empresas.
Recordó que en ocasión del Día Mundial del Agua, Isla Urbana lanzó el reto para que las personas intenten cubrir todas sus necesidades con una cubeta de 20 litros de agua durante todo el día, a fin de crear conciencia sobre el cuidado del recurso vital, ya que más de 700 millones de personas en el mundo viven con esa cantidad de agua.
MÁS CARA Y CADA VEZ MÁS LEJANA
Al señalar que la cifra oficial de que el 20% de la población de la Ciudad de México es conservadora y podría ser de 26%, David Mark Vargas indicó que este sistema de tandeo se emplea desde hace 30 o 40 años.
Un estudio del Congreso de la Ciudad de México advierte que casi 20% de los capitalinos no cuentan con agua corriente en los grifos de sus hogares, por lo que miles de familias reciben agua una vez a la semana o en varias semanas. En otros casos llega, pero el líquido no es más que un fango amarillento, incluso, hay quienes tienen que contratar pipas a un costo que a veces es más elevado.
Indicó que otra solución que ha analizado el gobierno capitalino es traer agua de más lejos; sin embargo, indicó que esos proyectos ya no son factibles, por el alto costo que representan para las finanzas públicas.
Mencionó el ejemplo de Nuevo León que en la pasada administración buscó traer agua de Veracruz, pero no fue factible porque eso le iba a costar 50 mil millones de pesos.
Indicó que en foros internacionales se habla de encontrar soluciones descentralizadas, como es la captación de lluvia y reciclar agua, que además representan una solución al cambio climático por el ahorro de energía y agua.
David Mark Vargas, mencionó que los sistemas de captación de agua de lluvia, reducen en temporada de lluvias el flujo de agua a los drenajes y, por ende, el riesgo de inundaciones, que colapsan a la Ciudad de México.
De acuerdo con datos del Congreso de la Ciudad de México, el área metropolitana no cuenta con la capacidad a gran escala, para reciclar aguas negras ni para recolectar agua pluvial, por lo que se ve obligada a expulsar más de 700 mil millones de litros de aguas residuales y de lluvia por desagües paralizados como el Gran Canal, o por la incapacidad de quienes no concluyen obras tan necesarias como el Acuaférico.
Otro beneficio es un menor gasto de energía para bombear y transportar agua a las viviendas, por lo menos durante la temporada de lluvias. Recordó que el 30% del agua de la red en la Ciudad de México proviene del sistema Lerma-Cutzamala, cuyas aguas deben ser bombeadas 150 km de distancia y 1 km vertical desde sus cuencas fuera del Valle de México. La energía requerida para bombear toda esta agua es parecida al consumo total de la ciudad de Puebla.
Un sistema de captación en la CDMX generalmente le da entre 5 y 8 meses de independencia en agua a una familia y permite la recuperación de acuíferos al extraer menos agua durante la temporada de lluvias, podríamos reducir la presión sobre nuestros acuíferos y ríos, además de permitir su recarga, apuntó.
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