El mexicano naturalizado estadounidense, Abel Revill Ochoa, fue ejecutado este jueves en la prisión de Hunstville, Texas, muy cerca de la ciudad de Houston.
La tarde de este jueves, familiares y abogados mantuvieron incertidumbre sobre sí se llevaría a cabo o no la ejecución, ya que en la Suprema Corte de EU aún se exponían que la razón del homicidio de 5 personas de su familia se debió a delirios causados por el alto consumo de drogas de Revill Ochoa.
Además de acuerdo al gobierno de México fue enviada una carta de clemencia al poder judicial federal, para intervenir por el originario de Durango.
Sin importar los esfuerzos de su abogado, la ejecución se realizó alrededor de las 6:oo pm a cargo del estado de Texas por medio de inyección letal.
Las últimas palabras del multihomicida fueron de agradecimiento a su familia y de perdón por cometer este terrible delito.
"Quiero agradecer a Dios padre, Jesús mi salvador; quiero disculparme con mi familia política por el dolor que les he causado; quiero decirle a mis hermanas que las quiero mucho y les quiero agradecer mucho por haberme perdonado. Gracias alguacil."
La madre de la esposa de Revill dijo que por fin se hizo justicia y que le espera un lugar especial en el infierno por matar a su familia; de igual forma su hijastro, con lagrimas en los ojos dijo que este crimen fue de forma cobarde pues su abuelo no pudo defenderse.
A su vez, la CNDH manifestó su absoluto rechazo a la aplicación de la pena de muerte e insta a las autoridades del estado de Texas conmutar esa pena contra el mexicano Abel Revilla Ochoa por otra sentencia de prisión.
En un comunicado indicó que:
• Se manifiesta pleno respaldo a la aplicación de sanciones que se encuentren dentro del Sistema Internacional de Derechos Humanos a los que nuestro sistema jurídico se acoge.
• En México está prohibida la pena de muerte, de acuerdo con lo establecido por el artículo 22 constitucional.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos ha señalado en múltiples ocasiones su oposición a la pena de muerte en todos los casos sin excepción, con independencia del carácter o las circunstancias de la conducta delictiva y reitera su rechazo en su aplicación toda vez que la pena capital es de irreparables efectos y se ha mostrado su ineficacia como factor contención real de la delincuencia y su aplicación no garantiza la impartición de justicia y contraria a lo proclamado en la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Este Organismo Nacional es respetuoso de la imposición de penas que cada país, en el ejercicio de su soberanía tiene; no obstante, se manifiesta por la aplicación de sanciones que se encuentren dentro del Sistema Internacional de Derechos Humanos a los que nuestro sistema jurídico se acoge.
En México está prohibida la pena de muerte, de acuerdo con lo establecido por el artículo 22 constitucional, aunado a que nuestro país está adherido al Protocolo a la Convención Americana sobre Derechos Humanos, relativo a la Abolición de la Pena de Muerte, y al Segundo Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, y desde 2007 es parte de dichos instrumentos.
Actualmente la CNDH atiende y da seguimiento a través de la Tercera Visitaduría General a casos de mexicanos sentenciados a pena de muerte en el extranjero, misma que tiene registro de 19 connacionales a quienes se les ha conmutado la pena capital por otra de prisión.
CNDH rechaza la pena de muerte 19 mexicanos en espera de la pena capital.
