/ lunes 25 de octubre de 2021

Tenebrosas leyendas de la Ciudad de México

Estas son algunas historias icónicas de la capital del país. Atrévete a visitar estos lugares.

En la ciudad de México, la quinta ciudad más poblada del mundo con 21.8 millones de habitantes, existe una diversidad de mitos y leyendas debido a la antigüedad de esta, así como su historia desde la época prehispánica, pasando por la conquista, época colonial, Independencia, revolución, hasta este 2019.

Historias como las de La Llorona, La Casa de la Tía Toña, el Antiguo Convento de la Concepción, el Viejo Hospital Juárez, los fantasmas de la Basílica de Guadalupe, son tan solo algunos casos que han sembrado terror en decenas de generaciones en la Ciudad de México. Aquí te contamos algunas.

“La Leyenda de La Llorona”

Esta sin duda alguna es de las más famosas a nivel nacional y Latinoamérica, se remonta a la época prehispánica con Cihuacóatl, quien fue una mujer que perdió a su esposo en una batalla y tras el sufrimiento y dolor enloqueció, mató a sus hijos.

Tras cometer este atroz crimen intentó suicidarse, sin embargo, la comunidad la detuvo para que fuera juzgada, torturada y finalmente sacrificada.

Otra versión dice que la mujer mató a sus hijos por petición de su novio y posteriormente se arrepintió cuando su pareja le fue infiel.

Sin embargo, la leyenda cuenta que hasta estos días hay una mujer vestida de blanco que se aparece por las noches en distintas zonas de la Ciudad de México susurrando “Ay mis hijos, dónde están mis hijos”.

“La casa de la tía toña”

En la tercera sección de Chapultepec hay una enorme casa, y cuenta la leyenda que le pertenecía a una señora conocida como “La tía toña” quien poseía una gran fortuna heredada de su esposo.

La tía Toña se la pasaba sola en su casa, pero la bondad le corría por la sangre y para gastar bien su dinero decidió darles hogar a niños de la calle, también vestido y alimento.

Sin embargo, los niños sin saber la buena acción que realizaba la Tía Toña, comenzaron a portarse mal, a ser irrespetuosos, hacerle la vida imposible, hasta un qué, la mujer no soportó y mató a todos los pequeños y después los arrojó a la barranca.

Después de esto la anciana decidió quitarse la vida. Cuentan las personas que intentan ingresar a la casa que se escuchan gritos de niños, así como una vibra negativa, además que se logra ver la silueta de la Tía Toña en una de las ventanas de la casa.

“La casa de las Brujas”

En el corazón de la colonia Roma, entre las calles de Orizaba y Durango, se encuentra el Edificio Rio de Janeiro, también conocido como la “Casa de la Brujas” por muchos vecinos, quienes indican que por las noches se siente mucha tensión cuando pasas por afuera.

Esta edificación es de 1908 cuando Porfirio Díaz lo mandó a construir en el marco de las celebraciones del Centenario de la Independencia.

La leyenda dice que a mitad del siglo XX, en una de las habitaciones vivía una bruja llamada Bárbara Guerrero, una bruja llamada “Pachita” que era contantemente por políticos, artistas entre otras personas famosas para pedirle favores.

Se dice que realizaba rituales, donde invocaba espíritus y fantasmas. Hasta hoy en día vecinos señalan que aún deambula Pachita por los rincones del edificio, pues en ocasiones se escuchan ruidos extraños.

“El Antiguo Convento de la Concepción”

Este convento de monjas fue construido en la época colonial, ubicado en la esquina de Belisario Domínguez y República de Brasil en el Centro Histórico de la Ciudad de México.

La leyenda cuenta que había una joven adinerada llamada María Gil, quien se había enamorado perdidamente de un joven, el cual solo quería el dinero.

Los hermanos de esta mujer le dijeron que solo era un interesado, pero ella no hizo caso, por lo que le ofrecieron una fuerte cantidad de dinero al susodicho para que se alejara de María, lo aceptó y huyó.

María entró en depresión, sufría y lloraba todas las noche, por lo que sus hermanos decidieron meterla al convento y que se recuperara emocionalmente con el amor de Jesús, sin embargo, solo empeoró y terminó suicidándose en un árbol de duraznos. Fue enterrada al día siguiente.

Meses después otras monjas dijeron ver la silueta de María en todos los rincones del convento, el árbol fue retirado y sus apariciones siguen vigentes hasta la fecha.

“Viejo Hospital Juárez”

Esta leyenda cuenta la historia de una enfermera llamada Eulalia, conocida como “La Planchada”, debido a su vestimenta impecable. Y que laboraba en el Hospital Juárez de México.

Un día atendió a un apuesto joven llamado Joaquín y se enamoró de él, eran felices que hasta planeaban casarse. Joaquín tuvo que hacer un viaje a un seminario; Eulalia feliz le contó a uno de sus compañeros enfermeros y este le contó que su novio, Joaquín, se había casado y estaba de luna de miel.

Esta situación provocó que Eulalia entrara en depresión, se enfermó y murió en el hospital. Se dice que tras su muerte, miles de pacientes agradecían atenciones a enfermeros y enfermeras, sin que estos tuvieran conocimiento de acción alguna.

Con el tiempo empezaron a describir a esta enfermera que cuidaba de los pacientes en la madrugada, se trataba de “La Planchada”, que regresa del más allá para atender a las personas. Hasta la fecha aún hay pacientes que aseguran que recuperaron su fuerza gracias a Eulalia.

HM


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En la ciudad de México, la quinta ciudad más poblada del mundo con 21.8 millones de habitantes, existe una diversidad de mitos y leyendas debido a la antigüedad de esta, así como su historia desde la época prehispánica, pasando por la conquista, época colonial, Independencia, revolución, hasta este 2019.

Historias como las de La Llorona, La Casa de la Tía Toña, el Antiguo Convento de la Concepción, el Viejo Hospital Juárez, los fantasmas de la Basílica de Guadalupe, son tan solo algunos casos que han sembrado terror en decenas de generaciones en la Ciudad de México. Aquí te contamos algunas.

“La Leyenda de La Llorona”

Esta sin duda alguna es de las más famosas a nivel nacional y Latinoamérica, se remonta a la época prehispánica con Cihuacóatl, quien fue una mujer que perdió a su esposo en una batalla y tras el sufrimiento y dolor enloqueció, mató a sus hijos.

Tras cometer este atroz crimen intentó suicidarse, sin embargo, la comunidad la detuvo para que fuera juzgada, torturada y finalmente sacrificada.

Otra versión dice que la mujer mató a sus hijos por petición de su novio y posteriormente se arrepintió cuando su pareja le fue infiel.

Sin embargo, la leyenda cuenta que hasta estos días hay una mujer vestida de blanco que se aparece por las noches en distintas zonas de la Ciudad de México susurrando “Ay mis hijos, dónde están mis hijos”.

“La casa de la tía toña”

En la tercera sección de Chapultepec hay una enorme casa, y cuenta la leyenda que le pertenecía a una señora conocida como “La tía toña” quien poseía una gran fortuna heredada de su esposo.

La tía Toña se la pasaba sola en su casa, pero la bondad le corría por la sangre y para gastar bien su dinero decidió darles hogar a niños de la calle, también vestido y alimento.

Sin embargo, los niños sin saber la buena acción que realizaba la Tía Toña, comenzaron a portarse mal, a ser irrespetuosos, hacerle la vida imposible, hasta un qué, la mujer no soportó y mató a todos los pequeños y después los arrojó a la barranca.

Después de esto la anciana decidió quitarse la vida. Cuentan las personas que intentan ingresar a la casa que se escuchan gritos de niños, así como una vibra negativa, además que se logra ver la silueta de la Tía Toña en una de las ventanas de la casa.

“La casa de las Brujas”

En el corazón de la colonia Roma, entre las calles de Orizaba y Durango, se encuentra el Edificio Rio de Janeiro, también conocido como la “Casa de la Brujas” por muchos vecinos, quienes indican que por las noches se siente mucha tensión cuando pasas por afuera.

Esta edificación es de 1908 cuando Porfirio Díaz lo mandó a construir en el marco de las celebraciones del Centenario de la Independencia.

La leyenda dice que a mitad del siglo XX, en una de las habitaciones vivía una bruja llamada Bárbara Guerrero, una bruja llamada “Pachita” que era contantemente por políticos, artistas entre otras personas famosas para pedirle favores.

Se dice que realizaba rituales, donde invocaba espíritus y fantasmas. Hasta hoy en día vecinos señalan que aún deambula Pachita por los rincones del edificio, pues en ocasiones se escuchan ruidos extraños.

“El Antiguo Convento de la Concepción”

Este convento de monjas fue construido en la época colonial, ubicado en la esquina de Belisario Domínguez y República de Brasil en el Centro Histórico de la Ciudad de México.

La leyenda cuenta que había una joven adinerada llamada María Gil, quien se había enamorado perdidamente de un joven, el cual solo quería el dinero.

Los hermanos de esta mujer le dijeron que solo era un interesado, pero ella no hizo caso, por lo que le ofrecieron una fuerte cantidad de dinero al susodicho para que se alejara de María, lo aceptó y huyó.

María entró en depresión, sufría y lloraba todas las noche, por lo que sus hermanos decidieron meterla al convento y que se recuperara emocionalmente con el amor de Jesús, sin embargo, solo empeoró y terminó suicidándose en un árbol de duraznos. Fue enterrada al día siguiente.

Meses después otras monjas dijeron ver la silueta de María en todos los rincones del convento, el árbol fue retirado y sus apariciones siguen vigentes hasta la fecha.

“Viejo Hospital Juárez”

Esta leyenda cuenta la historia de una enfermera llamada Eulalia, conocida como “La Planchada”, debido a su vestimenta impecable. Y que laboraba en el Hospital Juárez de México.

Un día atendió a un apuesto joven llamado Joaquín y se enamoró de él, eran felices que hasta planeaban casarse. Joaquín tuvo que hacer un viaje a un seminario; Eulalia feliz le contó a uno de sus compañeros enfermeros y este le contó que su novio, Joaquín, se había casado y estaba de luna de miel.

Esta situación provocó que Eulalia entrara en depresión, se enfermó y murió en el hospital. Se dice que tras su muerte, miles de pacientes agradecían atenciones a enfermeros y enfermeras, sin que estos tuvieran conocimiento de acción alguna.

Con el tiempo empezaron a describir a esta enfermera que cuidaba de los pacientes en la madrugada, se trataba de “La Planchada”, que regresa del más allá para atender a las personas. Hasta la fecha aún hay pacientes que aseguran que recuperaron su fuerza gracias a Eulalia.

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