/ miércoles 31 de mayo de 2023

Ropa de "paca", opción chilanga a bajos precios

Un pionero relata a LA PRENSA que este negocio ha sido el sustento de su familia en casi 3 generaciones

La venta de ropa conocida como “paca” ha sido una constate salvación para gran número de chilangos porque siempre encontramos prendas de buena calidad a muy bajos precios, incluso hay personas que pueden comprar piezas de marca que en una tienda nunca podrían costear.

En el centro de la Ciudad de México existió por muchos años una plaza comercial donde los vendedores de ropa se establecieron y a donde muchas personas incluso de otros estados llegaban a surtirse o aquellas madres que quieren prendas para sus bebés, que “al fin y al cabo” les dejan de quedar pronto”.

El señor Eduardo Meléndez García, pionero de la venta de ropa de paca, indicó que este negocio ha sido el sustento de su familia casi por 3 generaciones, indicó que tanto su esposa como sus hijos se dedican a la venta de ropa.

Durante la administración de Miguel Ángel Mancera acusó a estos vendedores de contrabando, y en el año 2016 los desalojaron de la plaza y les decomisaron la ropa, además expropiaron los predios y demolieron la construcción.

Foto: José Melton

Alrededor de 240 toneladas fueron decomisadas en un operativo que se realizó con 5 mil elementos de policías; destruyeron la plaza, la ropa fue entregada al Sistema de Administración Tributaria por que los comerciantes no pudieron acreditar la propiedad legal de las prendas.

El gobierno no dio ninguna solución a los vendedores que incluso habían pagado por sus locales, el señor Eduardo recuerda con mucha tristeza el momento en que la policía le arrebató todo lo que tenía y luego como el gobierno calló y con el silencio le negó el único modo de vida que el había llevado por más 30 años.

“Lo que nosotros deseamos es trabajar; incluso nosotros ya pagábamos impuestos”; asegura que el gobierno de la Ciudad de México nunca tuvo intención de llegar a un arreglo para reubicar a los vendedores.

Junto con sus hijos y algunos otros familiares, contó a LA PRENSA que cuando ese primer operativo llegó el gobierno aseguró resolver su situación; sin embargo, nunca hubo la creación de mesas de dialogo; como lo prometieron.

Con los años, al parecer fue olvidado el asunto; olvidado por las autoridades pero no por esta familia que sufre el constante acoso de las autoridades, que los golpean con constantes operativos, en los cuales decomisan la mercancía y el dinero que llevan encima; además de que los difaman, los acusan de otros delitos; como fue el caso del hijo de Socorro Meléndez quien hace algunos días fue detenido durante un operativo en el que se negaba a entregar su mercancía; sin embargo al ser presentado en el Ministerio Público fue acusado de portar más de medio kilo de marihuana.

Los comerciantes aseguran que ni en Tepito han llevado a cabo operativos tan agresivos y constantes como lo han hecho en esta zona donde algunos seguían vendiendo, no entienden porque la autoridad ha mostrado tanta saña.

PREDIO ABANDONADO

Luego de que los comerciantes fueron desalojados, el jefe de gobierno junto con la Secretaría de Gobierno anunció con bombo y platillo la rehabilitación de San Antonio Abad, teniendo como centro una moderna plaza.

Dicho proyecto solo llegó a colocar la primera y única piedra, luego fue anunciado que se construirían oficinas gubernamentales; el día de hoy los terrenos lucen en franco abandono, llenos de basura e invadidos por personas en situación de calle.

Además de aquellas personas conocidas como “paracaidistas” quienes ya instalaron campamentos para presionar al gobierno y que conviertan el predio en viviendas.

Al recorrer la calle que alguna vez fue el centro de trabajo para la familia Meléndez, ahora solo se aprecia el abandono y el olor a podrido, no solo de la basura y las heces que ahí se encuentra, sino del abuso del que han sido víctimas; negándoles el derecho a trabajar.

Hasta el momento ni ellos saben de manera exacta porque se les ha criminalizado, incluso más que a narcotraficantes; lo único que piden es un espacio donde puedan vender sin ser hostigados por la autoridad; aseguran que están dispuestos a pagar los impuestos necesarios para poder ejercer su negocio; están dispuestos a trabajar con el gobierno de la ciudad.

Es por ello que hacen el llamado a la Jefa de Gobierno y a la Secretaría de Gobierno que se reúnan con ellos para poder llegar a un acuerdo y que la cacería de brujas que se ha hecho en su contra pare.

Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem

La venta de ropa conocida como “paca” ha sido una constate salvación para gran número de chilangos porque siempre encontramos prendas de buena calidad a muy bajos precios, incluso hay personas que pueden comprar piezas de marca que en una tienda nunca podrían costear.

En el centro de la Ciudad de México existió por muchos años una plaza comercial donde los vendedores de ropa se establecieron y a donde muchas personas incluso de otros estados llegaban a surtirse o aquellas madres que quieren prendas para sus bebés, que “al fin y al cabo” les dejan de quedar pronto”.

El señor Eduardo Meléndez García, pionero de la venta de ropa de paca, indicó que este negocio ha sido el sustento de su familia casi por 3 generaciones, indicó que tanto su esposa como sus hijos se dedican a la venta de ropa.

Durante la administración de Miguel Ángel Mancera acusó a estos vendedores de contrabando, y en el año 2016 los desalojaron de la plaza y les decomisaron la ropa, además expropiaron los predios y demolieron la construcción.

Foto: José Melton

Alrededor de 240 toneladas fueron decomisadas en un operativo que se realizó con 5 mil elementos de policías; destruyeron la plaza, la ropa fue entregada al Sistema de Administración Tributaria por que los comerciantes no pudieron acreditar la propiedad legal de las prendas.

El gobierno no dio ninguna solución a los vendedores que incluso habían pagado por sus locales, el señor Eduardo recuerda con mucha tristeza el momento en que la policía le arrebató todo lo que tenía y luego como el gobierno calló y con el silencio le negó el único modo de vida que el había llevado por más 30 años.

“Lo que nosotros deseamos es trabajar; incluso nosotros ya pagábamos impuestos”; asegura que el gobierno de la Ciudad de México nunca tuvo intención de llegar a un arreglo para reubicar a los vendedores.

Junto con sus hijos y algunos otros familiares, contó a LA PRENSA que cuando ese primer operativo llegó el gobierno aseguró resolver su situación; sin embargo, nunca hubo la creación de mesas de dialogo; como lo prometieron.

Con los años, al parecer fue olvidado el asunto; olvidado por las autoridades pero no por esta familia que sufre el constante acoso de las autoridades, que los golpean con constantes operativos, en los cuales decomisan la mercancía y el dinero que llevan encima; además de que los difaman, los acusan de otros delitos; como fue el caso del hijo de Socorro Meléndez quien hace algunos días fue detenido durante un operativo en el que se negaba a entregar su mercancía; sin embargo al ser presentado en el Ministerio Público fue acusado de portar más de medio kilo de marihuana.

Los comerciantes aseguran que ni en Tepito han llevado a cabo operativos tan agresivos y constantes como lo han hecho en esta zona donde algunos seguían vendiendo, no entienden porque la autoridad ha mostrado tanta saña.

PREDIO ABANDONADO

Luego de que los comerciantes fueron desalojados, el jefe de gobierno junto con la Secretaría de Gobierno anunció con bombo y platillo la rehabilitación de San Antonio Abad, teniendo como centro una moderna plaza.

Dicho proyecto solo llegó a colocar la primera y única piedra, luego fue anunciado que se construirían oficinas gubernamentales; el día de hoy los terrenos lucen en franco abandono, llenos de basura e invadidos por personas en situación de calle.

Además de aquellas personas conocidas como “paracaidistas” quienes ya instalaron campamentos para presionar al gobierno y que conviertan el predio en viviendas.

Al recorrer la calle que alguna vez fue el centro de trabajo para la familia Meléndez, ahora solo se aprecia el abandono y el olor a podrido, no solo de la basura y las heces que ahí se encuentra, sino del abuso del que han sido víctimas; negándoles el derecho a trabajar.

Hasta el momento ni ellos saben de manera exacta porque se les ha criminalizado, incluso más que a narcotraficantes; lo único que piden es un espacio donde puedan vender sin ser hostigados por la autoridad; aseguran que están dispuestos a pagar los impuestos necesarios para poder ejercer su negocio; están dispuestos a trabajar con el gobierno de la ciudad.

Es por ello que hacen el llamado a la Jefa de Gobierno y a la Secretaría de Gobierno que se reúnan con ellos para poder llegar a un acuerdo y que la cacería de brujas que se ha hecho en su contra pare.

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