Como una alternativa encaminada a enfrentar la escasez de agua, en 26 municipios del Estado de México se puso en marcha el programa que buscar potabilizar el agua de las lluvias, mediante un sistema de captación instalado en escuelas públicas.
En 36 centros educativos fueron colocados estos mecanismos con los que las autoridades estatales pretenden hacer acopio de unos 10 millones de litros de agua en total
Según Sylbeth García Boone, directora general de coordinación con organismos operadores de la Comisión de Agua del Estado de México, la intención es aprovechar las precipitaciones pluviales y lograr mediante un proceso bien estructurado potabilizar el agua de las lluvias.
Aseveró que la meta es asegurar que en el regreso presencial a clases los niños cuenten con la higiene que requieren para evitar la propagación del Covid-19.
En información oficial, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obra, a través de la Comisión del Agua estatal, en coordinación con la asociación civil Neta Cero, arrancaron en Lerma el programa piloto “Escuelas Ahorradoras con Sistema de Captación de Agua Pluvial, Casita del Agua”.
El objetivo de este programa piloto es implementar sistemas de captación y potabilización de agua de lluvia, que garanticen a la comunidad estudiantil el acceso al líquido, con una calidad apta para su consumo.
No olvides seguirnos en Google Noticias para mantenerte informado
Al respecto, García Boone, manifestó que la idea con esta política pública es volver a lo más básico, y rudimentario, que es captar el agua de lluvia. Agregó que se tata de instituciones en zonas en condiciones de vulnerabilidad, y esta captación representa mil 76 pipas que las escuelas dejarán de comprar para abastecer del servicio a la comunidad.
La captación se realizará mediante canaletas que conducen el líquido a través de tubos el agua que cae entre los primeros seis y 10 minutos de lluvia hacia un separador donde se almacena, de nombre Tlaloque, que sirve para sacar la tierra y polvo, lluvia ácida; enseguida se capta todo lo demás que cae de agua para almacenarse en tinacos que son clorados, para que tenga la calidad y la durabilidad adecuada. Una vez ahí se puede disponer para lavar patios, los baños y lavarse las manos, solo no es para beber.
Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem
