Fieles devotos a San Judas Tadeo se dieron cita en el Templo de San Hipólito y Casiano, de la Colonia Guerrero, aún en tiempos de pandemia; con cubrebocas y con respeto a la sana distancia, se colocaron frente a las rejas, para dar gracias y pedir la protección del Santo de los casos difíciles.
Pedro Mendoza, quien desde hace diez años acude cada día 28 al recinto, consideró que la fe es de cada persona, pero que San Juditas nos protege a todos; en tanto, Ignacio Cruz indicó que aún en tiempos de Covid-19 decidió acudir a dar orar porque “es momento de velar por la salud y el trabajo de uno y de la familia”.
La señora María de los Ángeles, con una imagen de San Judas Tadeo en brazo, dijo que fue a orar y dar gracias, porque su nieto nació bien y ya dejó el hospital, de igual forma pidió por la salud y el trabajo de toda su familia.
Ayer a diferencia de otras ocasiones donde había tumultos en las inmediaciones del templo, ahora los devotos conservaron la distancia; estuvieron unos minutos para elevar sus plegarias y se retiraron.
De las solicitudes más recurrentes por los fieles a San Jugas Tadeo son pedirle por su salud, bienestar y sobre todo que terminé pronto esta situación del coronavirus, que ha terminado con la vida de muchas personas.