En el Centro Histórico hay aproximadamente 8 mil negocios que han cerrado sus puertas de manera definitiva, y han dejado a 40 mil personas sin empleo, a raíz de la pandemia por el Covid-19, por las constantes de protestas sociales y bloqueos de sus principales avenidas que impiden el paso de compradores.
Además, enfrenta una invasión masiva de 40 mil ambulantes en el primer cuadro. “No se podría entender ese crecimiento desmedido de invasión a las calles, sino hubiera contubernio de algunas autoridades, no tengo nombres para señalar, pero no hay otra explicación si no existiera algún tipo de tolerancia o prebenda política”.
Ello lo comentó en una entrevista con La Prensa, Guillermo Alejandro Gazal Orduña, Presidente de Procentrhico, al advertir que si continúan los bloqueos y la invasión de ambulantes, se va a orillar a que cada vez más comerciantes se vean en la necesidad de bajar las cortinas.
Recalcó que hay un padrón de 27 mil comercios y desafortunadamente 8 mil se han visto en la necesidad de cerrar.
Sobre los empleos perdidos, el líder comercial dijo que en el Centro Histórico cada negocio emplea entre 8 y 10 personas, por lo que llega a 40 mil los directos, pero está el tema de los indirectos, donde mucha gente vende a los establecidos, por lo que la cifra se puede contar por tres.
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Gazal Orduña, -quien participó para que los triquis plantados en el Eje Central se recorrieran en Avenida Juárez con su campamento, para permitir el libre paso de esa importante avenida de la capital mexicana- explicó que buscaron empatía con éstos, y lograron convencerlos.
Reiteró su denuncia que el Centro Histórico de la Ciudad de México se encuentra secuestrado e invadido, “tenernos tres problemas fundamentales, la delincuencia con el tema de la extorsión, delito que ha estado atendiendo la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
De todos es sabido que la ley prohíbe el comercio en vía pública en los perímetros A y B, y hoy está desbordado, recordó.
Asimismo comentó que han realizado diversas denuncias con el nuevo secretario de gobierno, Martí Batres, pero no los han recibido.
El Centro está secuestrado por cierres, bloqueos inexplicables a las vialidades tanto vehiculares como peatonales, lo que viola flagrantemente el derecho constitucional al libre tránsito, por razones que desconocen y las autoridades encargadas de este tema no dan explicaciones claras, resaltó.
Gazal Orduña demandó a la jefa de gobierno tomar cartas en el asunto, ya que además, están al borde de la quiebra cientos de comercios en el Centro y el resto de la capital mexicana.
“Hemos sido los comerciantes establecidos y formales del Centro Histórico los primeros en cumplir y hacer cumplir todas y cada una de las medidas de seguridad para intentar mitigar este grave problema”, indicó.
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