La Prensa en Línea
Arianna Alfaro
Estudiantes incorporados a la Universidad Autónoma de MéxicoUNAM, han comentado a La Prensa la desazón con la que miran elactuar de las autoridades, tanto fuera como dentro de lainstitución, ya que al interior parece gobernar el director ogrupo administrativo en turno, quienes controlan grupos de porrospara reprimir a la comunidad estudiantil.
Desde la trinchera del gobierno, los estudiantes perciben que suactuar no los protege, ni de grupos de choque o delincuentes que sehan filtrado. Casos en los que ni juntas, ni separadas, juegan ensu favor las autoridades.
Alina Lozada. 30años. Egresada de la Facultad de CienciasPolíticas y Sociales
“Yo creo que los porros se saben tan protegidos que nisiquiera ocuparon en cubrirse el rostro. Entonces no sé si lapolicía hubiera sido tan efectiva.
Creo que lo necesario es capacitar a auxilio UNAM. Ojalá esofuera suficiente. Lo cierto es que lo que ocurre en la universidades el reflejo de la situación del país y eso es tristísimo,porque siempre había sido como una burbuja de libertades.
Estoy en contra de quienes piden que intervenga la fuerzapública o que se controle el acceso, porque es un espaciopúblico, al que cualquiera que esté interesado en obtener algúntipo de conocimiento debiera poder acceder. Creo que los autoresintelectuales buscan desestabilizar en la coyuntura del cambio degobierno, y sí, yo creo que son los priístas marcandoterritorio.
Pues aplaudo lo que hicieron los chavos, porque son loslegítimos defensores de su espacio, aunque lo que ocurre en laUNAM nos debiera importar a todos por ser escuela pública”.
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Susana Fregoso. 18años. Estudiante del Colegio de Ciencias yHumanidades CCH
“Los estudiantes vamos contra tres frentes que afectan laestabilidad de nuestro movimiento estudiantil, por un lado, losporros que sirven como una medida de presión de las autoridadespara mantenernos al margen, por otro, la administración de lasescuelas y de la misma UNAM que no hace nada por mejorar lascondiciones dentro de las instalaciones educativas, ni deseguridad, ni con los directivos y la policía, que al intervenir,ocurre lo que pasó con la liberación de los dos porros queparticiparon el día la marcha.
Profesor de posgrado de la Facultad deEconomía
“La comunidad estudiantil en general posee un desencanto delas autoridades, la crisis que enfrenta la UNAM es contradictoria,por un lado, posee un alto nivel de reconocimiento internacionalcomo institución educativa, pero la otra cara es de mucho descuidohacia el estudiantado y el profesorado que conforman a la máximacasa de estudios”.
“La seguridad no es algo que se tenga que negociar, es algoque debe implementarse siendo la Ciudad Universitaria tan grande ynumerosa como la conocemos, los ojos deberían estar puestos en elbienestar de los estudiantes y que su prioridad sea aprender y nocómo hacerse escuchar por sus dirigentes”.
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Fermín “N” 23años. Estudiante de la Facultad deEconomía
“La fuerza de la policía no es necesaria dentro de la UNAM,pero es necesario que el rector se ponga las pilas, que se refuerceuna estrategia donde la vigilancia y la seguridad para los alumnosse pueda garantizar de algún modo, y bueno, aunque es un espaciolibre, creo que sí debería haber filtros para aquellos que nopertenecen a la institución, lo que ayudaría a que, no cualquieracon fines negativos, ingrese tan fácil”.
“Lo que hoy demandamos todas las células que componemos a laUNAM es una sola cosa, ser escuchados y que se note que esa vozproduce a un cambio. Podemos ver estudiantes que exigen seguridad,otros que quieren profesores para sus asignaturas, otros más,aulas equipadas, otros que los cobros no sean excesivos o tenerespacios recreativos o de expresión artística, es decir, cosasque se pueden llevar a cabo, pero las escuelas y en general laUNAM, ha hecho oídos sordos y lo que tenemos ahora es laconsecuencia de esa sordera”.
Ernesto Godoy. 19años. Preparatoria
“Para nada nos dan confianza las autoridades, liberaron a dosporros que violentaron la marcha el lunes 3, eso termina de hablarmal de UNAM que es incapaz de pedir justicia por la seguridad desus propios estudiantes y profesores en un sitio que es autónomo yque, además, cuenta con personal de seguridad para resguardarlos.De las instituciones de justicia poco se puede decir después deesta liberación. Este movimiento pareciera no tener autoridades deconfianza en general”.
Por otra parte, según declaraciones tanto de Edmundo Garrido,procurador general de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CDMX),acompañado de Roberto Ochoa, subprocurador regional de laProcuraduría General de la República (PGR), las autoridades nopretenden intervenir en la autonomía de la máxima casa deestudios, razón por la que se mantienen al margen de gruposporriles dentro de Ciudad.
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