"Siempre vivirás en nuestros corazones Chaco" se leía en una de las coronas de flores para despedir a José Juan, quien murió el pasado lunes 3 de marzo, aplastado entre los fierros de su auto, luego de que la trabe del Metro de la línea 12 se derrumbara.
Autoridades de la Ciudad de México, solo cubrieron los gastos funerarios, pero nadie ha venido
Efraín Juárez, padre de José Juan
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El cuerpo de Juan fue liberado del auto a las 05:00 de la madrugada y debido a la falta de identificación, fue llevado a la Agencia del Ministerio Público Iztapalapa 6, donde tras de varias horas de búsqueda, el cuñado de Efraín lo identificó.
Luego de 2 horas de trámites y de al menos 8 horas en donde se encargaron de preparar el cadáver de Juan, la espera finalmente terminó y le fue entregado el cuerpo de su amado hijo, a quien le realizaron un velorio, para que familiares y amigos puedan despedirse de él.
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En el lugar la tristeza invadía el ambiente, ya que muchos de los asistentes no podían creer lo que había sucedido.
La casa del fallecido donde se llevó a cabo funeral, estaba unas cuantas cuadras del lugar del accidente, sobre la caja donde descansa ahora José Juan, colocaron sus bebidas y sus alimentos preferidos, mientras flores, cristos y el fuego de las veladoras acompañaban el cuerpo, que se encontraba en medio del patio del que un día fue su hogar.
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