/ miércoles 24 de marzo de 2021

Cuerpos hídricos del Valle de México son desaprovechados, alerta académico de la UAM

Esa casa universitaria convoca a diversos foros sobre las alternativas que aporten soluciones a las problemáticas derivadas a la escasez del vital liquido

Óscar Monroy Hermosillo, académico del Departamento de Biotecnología y de la UAM, resaltó el manejo equivocado del agua en el Valle de México, pues “si pensamos que era un gran lago –el del Anáhuac, con cerca de nueve mil kilómetros cuadrados en época de lluvias– se debe considerar que se cuenta con gran cantidad de líquido, y lo sigue teniendo, porque los 45 ríos que entran a la Cuenca de la zona aportan alrededor de diez metros cúbicos por segundo (m3/s) en promedio anual”.

El maestro universitario manifestó que el problema es que esos cuerpos hídricos, al llegar a la metrópoli son entubados y fluyen en los drenajes, por lo que no se aprovechan; al mismo tiempo hay escasez, lo que obliga a realizar la extracción del subsuelo –16 m3/s– y traer el recurso desde Michoacán por el sistema Cutzmala: diez m3/s.

Explicó que en total, el Valle de México recibe 36 m3/s, donde la cuenca natural recibía sólo diez. Por cada metro cúbico que se agrega a la red “gastamos 30 o 35 pesos”, una inversión que se ahorraría “si aprovecháramos los ríos, se trataran y se reciclaran”.

En esta época es trascendental tener una “ética del agua” y entender que este elemento no es una mercancía, sino un bien público “al que tenemos que dar un buen uso”, resaltó.

En la UAM, académicos trabajan en la captación de lluvia y su distribución, contribuyendo a que colectividades diversas tengan la oportunidad de recolectar y manejar sus propios sistemas y tratamientos.

No olvides seguirnos en Google Noticias para mantenerte informado

Algunos grupos están dedicados a la gobernanza y a promover la participación ciudadana en los consejos de cuenca para influir en la planeación sobre las asignaciones y las concesiones, además de presentar propuestas para que se trate y recircule.

La Universidad Autónoma Metropolitana creó la Red de Investigación en Agua de la UAM (RedAgUAM), con el propósito de impulsar e integrar la indagación multidisciplinaria desarrollada en sus cinco sedes académicas –Azcapotzalco, Cuajimalpa, Iztapalapa, Lerma y Xochimilco– en torno a distintas áreas, incluidos los procesos sociales de la acción colectiva sobre gestión del bien.

Monroy Hermosillo, coordinador de la nueva instancia, que con la intervención de más de 20 docentes tiene entre sus principales funciones convocar a foros de discusión y establecer vínculos con organismos nacionales e internacionales, trabajando en cinco áreas: Gestión y gobernanza, institucionalidad; Innovación-desarrollo científico; Bienestar y salud; Desarrollo, cambio ambiental y ecosistemas, y Derechos humanos, género y pueblos originarios, así como una transversal sobre Cultura del agua.

Serán abordados en la primera, entre otros aspectos, los procesos sociales de organización de la acción colectiva en materia de gestión del recurso, que incluyen los asuntos políticos, jurídicos, sociológicos, antropológicos y culturales, por lo que “necesitaremos especialistas en sociología, leyes, historia y ciencia política para ver cómo abrimos el ámbito institucional, es decir, si la administración debe estar sólo en manos del gobierno o debe haber participación ciudadana”.

El segundo apartado incorporará iniciativas y resultados sobre patentes y prototipos enfocados en la solución de problemas en cuanto a calidad, disponibilidad, seguridad sanitaria o tratamiento, con el fin de definir, por ejemplo, “si queremos grandes presas para generar fluido eléctrico o podemos aprovechar la energía hidráulica de otras maneras, procurando la preservación de la seguridad de la gente y que no esté expuesta a inundaciones, como ocurrió recientemente en el estado de Tabasco”, especificó en entrevista.

La tercera línea estudiará el acceso a fuentes de abastecimiento, patrones de consumo y de sustitución, o las implicaciones de la degradación derivada de los esquemas de uso, pues “desde que se entubó y se llevó a los hogares, las enfermedades disminuyeron”, por lo que “no podemos descuidar lo que se llama la ingeniería sanitaria en su manejo y, por el contrario, es preciso mejorarla para dar salud a la gente”.

En el apartado final, los especialistas se abocarán a llevar a la práctica propuestas que contribuyan a reducir la brecha entre los ámbitos urbano y rural, y entre aquellos que por condiciones de género, pobreza, marginación o exclusión sufren limitaciones en el ejercicio del derecho humano al recurso.

Los pueblos originarios que viven en un medio rural y han cuidado su hábitat reclaman esa garantía, sin embargo, no les es reconocida, mientras que la mitad de la población, constituida por mujeres, ha sido la responsable de llevar todo a la casa, “aunque a la hora de establecer comités comunitarios y tomar las decisiones, ellas no están presentes”, puntualizó.

Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem

Óscar Monroy Hermosillo, académico del Departamento de Biotecnología y de la UAM, resaltó el manejo equivocado del agua en el Valle de México, pues “si pensamos que era un gran lago –el del Anáhuac, con cerca de nueve mil kilómetros cuadrados en época de lluvias– se debe considerar que se cuenta con gran cantidad de líquido, y lo sigue teniendo, porque los 45 ríos que entran a la Cuenca de la zona aportan alrededor de diez metros cúbicos por segundo (m3/s) en promedio anual”.

El maestro universitario manifestó que el problema es que esos cuerpos hídricos, al llegar a la metrópoli son entubados y fluyen en los drenajes, por lo que no se aprovechan; al mismo tiempo hay escasez, lo que obliga a realizar la extracción del subsuelo –16 m3/s– y traer el recurso desde Michoacán por el sistema Cutzmala: diez m3/s.

Explicó que en total, el Valle de México recibe 36 m3/s, donde la cuenca natural recibía sólo diez. Por cada metro cúbico que se agrega a la red “gastamos 30 o 35 pesos”, una inversión que se ahorraría “si aprovecháramos los ríos, se trataran y se reciclaran”.

En esta época es trascendental tener una “ética del agua” y entender que este elemento no es una mercancía, sino un bien público “al que tenemos que dar un buen uso”, resaltó.

En la UAM, académicos trabajan en la captación de lluvia y su distribución, contribuyendo a que colectividades diversas tengan la oportunidad de recolectar y manejar sus propios sistemas y tratamientos.

No olvides seguirnos en Google Noticias para mantenerte informado

Algunos grupos están dedicados a la gobernanza y a promover la participación ciudadana en los consejos de cuenca para influir en la planeación sobre las asignaciones y las concesiones, además de presentar propuestas para que se trate y recircule.

La Universidad Autónoma Metropolitana creó la Red de Investigación en Agua de la UAM (RedAgUAM), con el propósito de impulsar e integrar la indagación multidisciplinaria desarrollada en sus cinco sedes académicas –Azcapotzalco, Cuajimalpa, Iztapalapa, Lerma y Xochimilco– en torno a distintas áreas, incluidos los procesos sociales de la acción colectiva sobre gestión del bien.

Monroy Hermosillo, coordinador de la nueva instancia, que con la intervención de más de 20 docentes tiene entre sus principales funciones convocar a foros de discusión y establecer vínculos con organismos nacionales e internacionales, trabajando en cinco áreas: Gestión y gobernanza, institucionalidad; Innovación-desarrollo científico; Bienestar y salud; Desarrollo, cambio ambiental y ecosistemas, y Derechos humanos, género y pueblos originarios, así como una transversal sobre Cultura del agua.

Serán abordados en la primera, entre otros aspectos, los procesos sociales de organización de la acción colectiva en materia de gestión del recurso, que incluyen los asuntos políticos, jurídicos, sociológicos, antropológicos y culturales, por lo que “necesitaremos especialistas en sociología, leyes, historia y ciencia política para ver cómo abrimos el ámbito institucional, es decir, si la administración debe estar sólo en manos del gobierno o debe haber participación ciudadana”.

El segundo apartado incorporará iniciativas y resultados sobre patentes y prototipos enfocados en la solución de problemas en cuanto a calidad, disponibilidad, seguridad sanitaria o tratamiento, con el fin de definir, por ejemplo, “si queremos grandes presas para generar fluido eléctrico o podemos aprovechar la energía hidráulica de otras maneras, procurando la preservación de la seguridad de la gente y que no esté expuesta a inundaciones, como ocurrió recientemente en el estado de Tabasco”, especificó en entrevista.

La tercera línea estudiará el acceso a fuentes de abastecimiento, patrones de consumo y de sustitución, o las implicaciones de la degradación derivada de los esquemas de uso, pues “desde que se entubó y se llevó a los hogares, las enfermedades disminuyeron”, por lo que “no podemos descuidar lo que se llama la ingeniería sanitaria en su manejo y, por el contrario, es preciso mejorarla para dar salud a la gente”.

En el apartado final, los especialistas se abocarán a llevar a la práctica propuestas que contribuyan a reducir la brecha entre los ámbitos urbano y rural, y entre aquellos que por condiciones de género, pobreza, marginación o exclusión sufren limitaciones en el ejercicio del derecho humano al recurso.

Los pueblos originarios que viven en un medio rural y han cuidado su hábitat reclaman esa garantía, sin embargo, no les es reconocida, mientras que la mitad de la población, constituida por mujeres, ha sido la responsable de llevar todo a la casa, “aunque a la hora de establecer comités comunitarios y tomar las decisiones, ellas no están presentes”, puntualizó.

Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem

Policiaca

Amplían hacia Edomex la búsqueda de dos “goteras” por homicidio en hotel de Iztapalapa

Las presuntas homicidas presumían en sus redes sociales sus constantes ataques, operaron en Texcoco y hasta en Acapulco

Policiaca

Detienen a dos presuntos colaboradores de “La Unión” en la zona de la Merced

Los sujetos identificados como “El Nutella” y a “El Moreno” son vinculados con “El Tomate”, uno de los principales colaboradores del grupo criminal con base en Tepito

Policiaca

Atoran en flagrancia a presunto talamontes de Milpa Alta

Fue detenido durante un operativo de inteligencia contra la tala clandestina encabezado por personal de la Subsecretaria de Inteligencia e Investigación Policial de la SSC