Al gobierno de la Ciudad de México, el pleno de la Cámara de Diputados le aprobó un techo de endeudamiento de 4 mil 500 millones de pesos, el mismo monto aprobado para este año y que según diputados locales, representará un decremento en términos reales, porque no se incluyó el ajuste inflacionario.
Con base al decreto de la Ley de Ingresos de la Federación para 2022, que fue remitido al Senado de la República para su análisis, el monto de endeudamiento neto servirá para el financiamiento de obras contempladas en el Presupuesto de Egresos de la Ciudad de México para el Ejercicio Fiscal del próximo año.
Toda contratación y ejercicio de créditos, empréstitos y otras formas de crédito público para realizar operaciones de canje, refinanciamiento o reestructura de deuda pública de la entidad federativa, deberá sujetarse a lo dispuesto en la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios.
Quedó establecido que con el techo de endeudamiento la administración a cargo de la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, podrá financiar sus obras públicas, sobre todo las relacionadas con transporte y vialidad, que han sido prioridad en su gestión.
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Resulta que, en 2020, el Congreso de la Unión aprobó un tope de endeudamiento para la capital del país de 4 mil millones de pesos, pero en 2019, el primer año de gobierno de Sheinbaum, este rubro ascendió a 5 mil 500 millones de pesos.
La jefa de gobierno ha dicho que para el próximo año se tiene contemplado destinar una parte importante del presupuesto local a proyectos de movilidad, como la compra de trenes del Tren Ligero, adquisición de trolebuses, unidades de transporte RTP y la rehabilitación de algunas líneas del Metro, incluidos los trabajos correspondientes a la Línea Dorada.
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