Con el objetivo de dejar en la población estudiantil un mensaje de paz y de no violencia, el escritor Juan Villoro participó en la última jornada de este año del programa Lunes por la Educación para la Paz, en compañía de la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo (STYFE), Soledad Aragón Martínez.
Ambos acudieron a la Escuela Secundaria Diurna 188 Aztecas, ubicada en Pedregal de Santo Domingo, en la alcaldía Coyoacán, para dar una charla -ante unos 300 estudiantes- sobre las formas de violencia y cómo evitarla.
Aragón Martínez mencionó que para esta administración es importante fomentar el respeto, la paz y la no violencia, así como identificar y evitar el bullying.
“Durante todo el año hemos visitado escuelas secundarias de la ciudad en el marco del programa ´Lunes por la Educación para la Paz´, y hoy queremos decirles que para el gobierno de la Ciudad de México ustedes, niñas, niños y adolescentes son muy importantes”, expresó.
Los estudiantes leyeron fragmentos de El Diario de Ana Frank, El niño que vivía en las estrellas, del escritor catalán Jordi Sierra i Fabra, y de El libro salvaje, al cual dio lectura su autor, Juan Villoro.
El escritor dijo, “en la literatura comunicamos cosas que quisiéramos vivir y que están en nuestra mente. Tenemos cosas en la cabeza, inquietudes, cosas que no se alivian con una aspirina, tenemos carencias, sueños y la literatura sirve para todo eso, nos da remedios, es como una gigantesca farmacia en donde encontramos remedios para todas las cosas que sentimos, para todas las cosas que pensamos”.
El escritor mexicano mencionó que la lectura ayuda que se genere un cambio en la sociedad mexicana.
“Se han implicado en este programa de manera directa las personas que llevan la gestión pública. Ellos están poniendo el ejemplo de venir a leer a las escuelas, entonces, si la gente que hace la gestión pública de México está dispuesta a dedicar su tiempo, a compartir a algunos de sus escritores favoritos, pues yo creo que es un muy buen ejemplo que deberían seguir todas las áreas de la administración pública”, sostuvo.
El escritor confirmó su compromiso de seguir participando en esta iniciativa que fomenta la cultura de la no violencia a través de la lectura.
“Aquí hemos logrado plantar una semilla, pero esto tiene que desarrollarse más, en la medida en que las y los jóvenes puedan acceder a los libros y puedan escribir ellos también sus propios textos, esto va a ir creciendo”, subrayó el escritor.
Al final de la sesión se obsequiaron ejemplares de El libro salvaje, dedicados por el autor, a los estudiantes que respondieron a preguntas respecto a la lectura. Además, se donaron varios ejemplares a la biblioteca escolar para su consulta
EGS
