Luego de la detención de Yoseline “N” mejor conocida como YosStop, una de las influencers con mayor popularidad en México, los usuarios de las redes sociales exigieron la detención de otros youtubers como Memo Aponte, Yayo Gutiérrez y Ricardo Ponce.
Recientemente, la reputación de los generadores de contenido en el país se ha visto manchada debido a la polémica en la que se han visto involucrados
Entre las figuras públicas que se volvieron tendencias en las redes sociales salió a relucir el nombre de Memo Aponte, quien en 2019 fue acusado de pedir a sus fans fotos de desnudos.
De acuerdo con estos testimonios, el actor pedía seguir lasconversaciones por Telegram para usar el modo de “chatsecreto”, en el cual los mensajes pueden ser programados para autodestruirse.
En la misma cuenta se publicó audios en el que se escucha como Memo solicitaba verse a altas horas de la noche con ellas.
Otro caso que llamó la atención fue el de Yayo Gutiérrez, quien fue denunciado ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México por tener fotos y videos íntimos de varias mujeres.
La youtuber Ixpanea contó en esa ocasión que que ambos tenían una relación de amistad desde hace aproximadamente 10 años. Sin embargo, hace un par de años tuvo acceso a su computadora y encontró material explícito de otras mujeres.
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“Él tenía una carpeta que se llamaba ‘Fun’, Tenía muchísimas, muchísimas carpetas con nombres de chicas, de las cuales yo conocía a cuatro y eran youtubers en ese tiempo”, explicó. “Yo nunca le dije nada a estas chicas. Yo en el momento lo único que hice fue borrar esa carpeta”.
Finalmente, en estos días, también se volvió tendencia Ricardo Ponce por presuntamente crear una secta sexual a través de retiros, en donde manipula a mujeres para abusar de ellas.
La youtuber Maire Wink, anunció públicamente que había iniciado un proceso legal en la Fiscalía Especializada en Delitos Sexuales de Quintana Roo en contra de Ricardo, por lo que pidió a más víctimas levantar la voz.
La exnovia de Ponce, Valentina Camacho confirmó que las denuncias son ciertas y confesó que ella fue testigo de la incomodidad que se vivía en las sesiones, percatándose así que todo era “sexual”.
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